Autor: NICOLÁS CALDERÓN SOCIO ADJUNTO DE SERVICIOS DE CAMBIO CUMÁTICO Y SOSTENIBILIDAD DE EY
Que Brasil nos gane solo en fútbol
Señor Director: ¿ Cómo hacer qué Chile sea tan atractivo para las inversiones como Brasil? Esta parece ser la pregunta del momento, luego del rechazo y posterior decisión de Colbún de suspender su proyecto Central de Bombeo Paposo, de US$ 1.400 millones, lo que es una mala señal para los inversionistas y profundiza el debate sobre la “permisología”. Mientras en Brasil, la forestal Arauco obtuvo en 14 meses la licencia ambiental previa para su planta Sucuriú (Mato Grosso) por US$ 4.600 millones, la mayor inversión de su historia.
En Chile, los permisos pueden tomar fácilmente cinco años y la construcción otros cinco, como ocurrió con la última gran inversión de esta empresa en el país (en Arauco). Este proyecto se suma a la planta que la CMPC instalará en Rio Grande do Sul por US$ 4.570 millones. ¿Qué hacer para solucionar este problema? La aprobación de las dos iniciativas que se discuten hoy con respecto a la “permisología” (evaluación ambiental 2.0 y el de simplificación y estandarización de autorizaciones sectoriales), serían una poderosa señal una vez aprobadas y mejoradas en el Congreso, junto con hacer partícipes a las comunidades desde un principio de los proyectos para que se sientan parte de éstos, generando espacios de intervención en el momento adecuado del desarrollo de una obra. Es clave generar certeza, reducir los plazos de tramitación y no cambiar las reglas del juego cuando ya se cumplió con lo exigido en los procesos y regulaciones.