Emblemáticos recintos de Coquimbo atacados por los «vagos» y el abandono
Emblemáticos recintos de Coquimbo atacados por los «vagos» y el abandono Espacios públicos que sobreviven en el puertoEn pleno corazón de Coquimbo, está el Barrio Inglés, un lugar que hace unos años destacaba por su llamativa vida nocturna y su peso a nivel cultural, actualmente se encuentra en un estado de abandono. La Casa de la Cultura está en un estado deplorable, cercada con panderetas de madera que se caen a pedazos.
Transeúntes habituales del lugar señalan que es un problema latente, ya que la inseguridad en la noche se apodera del sitio. «Parece que lo van a remodelar, pero no hay mucha información, un día la municipalidad vino y tuvo que echar a una mon-tonera de personas que estaban fumando, tomando y bailando, era la guarida de los fumones», comentó Juan Carlos, trabajador que lleva años cuidando vehículos en las cercanías.
Este lugar es uno de los pocos recintos en la ciudad que ofrecía un espacio para la cultura, donde se realizaban presentaciones audiovi-suales y artísticas, además de encontrar una amplia colección literaria a disposición de los ciudadanos.
Lamentablemente, tras el tsunami de 2015 no ha logrado recuperarse, aun cuando los incentivos que se habían prometido para que vuelva a abrir sus puertas estaban contemplados para el mismo año y superarían los120 millones, según lo indica el Ministerio de Cultura, Artes y Patrimonio en su sitio oficial. Al otro extremo del puerto, le da la bienvenida a todos quienes decidan ingresar a la ciudad por Av. Costanera, el inconcluso proyec-to «El Mercado del mar», que está en condiciones que demuestran un total abandono. Pareciera que es el refugio de personas en situación de calle, que lo tienen en un estado terrible, con un fuerte olor a orina y rayado con grafitis en todo su interior. Esta iniciativa, que se suponía debía generar empleo y ser una fachada más bonita para Coquimbo, se ha transformado en algo completamente distinto.
Una cuadra hace el contraste entre dos nuevos y modernos edificios, que resaltan más la incompetencia de las autoridades para concretar un proyecto que lleva siendo una promesa de campañas electorales anteriores y que nuevamente es utilizado para captar votantes. En las últimas semanas, el municipio ha pintado, cambiándole algo la cara.
Recientemente se hizo ingreso de nuevos antecedentes a la MIDESO para continuar con el proceso y obtener el RS antes de finalizar este 2024;sienten un gran cariño hacia el mirador, que lleva años siendo parte del patrimonio local. «Es un lindo panorama para pasar en familia, venir el fin de semana para estar tranquilo y apreciar la vista que se tiene desde acá. Lo malo es que muchos vienen a beber y dejan todo cochino, además que nunca he visto a nadie limpiando», comenta Ignacio, vecino del sector que regularmente visita el monumento. Otro lugar que tiene un legado cultural importante y una llegada de turistas masiva en temporada alta, es el Fuerte Lambert, sin embargo, actualmente este se encuentra en condiciones que dejan mucho que desear.
Por los esfuerzos, tanto de la dueña de la cafetería Lambert, la señora Juana García, y de los artesanos que se han organizado y se han sindicalizado como «Rescate Fuerte Lambert», es que este lugar puede seguir en funcionamiento. «Este lugar es muy hermoso, cada vez que vienenlos turistas quedan maravillados con el paisaje, pero falta algo más que poder entregarle al público.
Si yo no abro el local, no hay baños», denuncia Juana, quien lleva más de cuatro años esperando algún apoyo desde el municipio «parece cuento, pero bueno, aún seguimos con la esperanza que el alcalde se aparezca por estos lados», comentó.
Por su parte, Brigitte Zepeda, quien es la impulsora del sindicato de artesanos, expresó su descontento y preocupación por el lugar que se ha transformado en su fuente de ingresos. «No hay baños, ni seguridad, lo que más necesitamos es vigilancia, sobre todo en las noches, a la vecina le han entrado a robar el balón de gas en más de una ocasión. Además la luminaria funciona mal, todos los arreglos que se pueden apreciar han sido financiados con plata de nosotros, desde los puestos de artesanía hasta las luces que están funcionando.
Además agrega una sensación de aislamiento por parte del transporte público, «aca solo llegan personas en auto, no hay micros ni colectivos que lleguen hasta acá y no entiendo el por qué, si al final es lo mismo en distancia», señaló Zepeda. entre estos se incluye el estudio de ingeniería estructural terminado, informe que, principalmente, da cuenta que la estructura se encuentra en buen estado. Durante octubre, el gobernador Darwin Ibacache se reunió con los equipos técnicos de la municipalidad de Coquimbo. Además, la autoridad regional sostuvo un encuentro con el Gobernador Marítimo, Ricardo Alcaíno, para destrabar la tramitación de las concesiones marítimas del proyecto. El proyecto contempla un muelle peatonal de 900 metros cuadrados, que será un nuevo punto de recreación frente al mar y un atractivo turístico.
El mercado contará con 110 puestos, de los cuales más de 80 estarán dedicados a la venta de mariscos y pescados frescos en el primer nivel, y 25 locales gastronómicos en el segundo, ofreciendo una variada experiencia culinaria marina.
Turismo intenta sobrevivir en espacios históricosEn las propuestas de candidatos que generan mayor expectativa entre los vecinos de la ciudad puerto, se destaca el área del turismo, el cual ha sido interpretado por algunos aspirantes como «la industria sin chimenea». Si bien algunas zonas de la ciudad han sido embellecidas, como Av. Costanera, Varela o la nueva fachada de La Herradura, aún quedan muchos atractivos con un gran potencial turístico en completo abandono. Hay proyectos que contemplan la creación de nuevas atracciones, sin embargo, en lugares emblemáticos de Coquimbo da la impresión que no reciben una manito de gato en mucho tiempo.
En este contexto, nuestro medio se trasladó al sector de la Pampilla, donde se tomó rumbo por un camino utilizado por la Sociedad Pesquera Coloso S.A., lleno de piedras y sin ninguna señalética que indicara el camino al «Mirador de los Navegantes». Un lugar privilegiado, con una vista impresionante, desde donde se puede apreciar toda la periferia de la ciudad. A pesar de la poca información que se puede encontrar de este sitio, hay muchos vecinos de la zona que vienen de forma periódica yMercado del Mar. Pareciera que durante mucho tiempo no se han tocado edificios de relevancia en la comuna puerto, cuestión que incomoda a la gente. Espacios públicos que sobreviven en el puerto La Casa de la Cultura es un desastre en cuanto al abandono, quizás la gran deuda de autoridades locales. El Mercado del Mar fue pintado en las últimas semanas por personal municipal. Adentro estaba lleno de vagos que viven en deprorables condiciones, incluso mantenían armas. Las artensas del «fuerte» siguen dando vida al espacio. Espacios públicos que sobreviven en el puerto La Casa de la Cultura es un desastre en cuanto al abandono, quizás la gran deuda de autoridades locales. El Mercado del Mar fue pintado en las últimas semanas por personal municipal. Adentro estaba lleno de vagos que viven en deprorables condiciones, incluso mantenían armas. Las artensas del «fuerte» siguen dando vida al espacio.
Emblemáticos recintos de Coquimbo atacados por los «vagos» y el abandono Espacios públicos que sobreviven en el puertoEn pleno corazón de Coquimbo, está el Barrio Inglés, un lugar que hace unos años destacaba por su llamativa vida nocturna y su peso a nivel cultural, actualmente se encuentra en un estado de abandono. La Casa de la Cultura está en un estado deplorable, cercada con panderetas de madera que se caen a pedazos.
Transeúntes habituales del lugar señalan que es un problema latente, ya que la inseguridad en la noche se apodera del sitio. «Parece que lo van a remodelar, pero no hay mucha información, un día la municipalidad vino y tuvo que echar a una mon-tonera de personas que estaban fumando, tomando y bailando, era la guarida de los fumones», comentó Juan Carlos, trabajador que lleva años cuidando vehículos en las cercanías.
Este lugar es uno de los pocos recintos en la ciudad que ofrecía un espacio para la cultura, donde se realizaban presentaciones audiovi-suales y artísticas, además de encontrar una amplia colección literaria a disposición de los ciudadanos.
Lamentablemente, tras el tsunami de 2015 no ha logrado recuperarse, aun cuando los incentivos que se habían prometido para que vuelva a abrir sus puertas estaban contemplados para el mismo año y superarían los120 millones, según lo indica el Ministerio de Cultura, Artes y Patrimonio en su sitio oficial. Al otro extremo del puerto, le da la bienvenida a todos quienes decidan ingresar a la ciudad por Av. Costanera, el inconcluso proyec-to «El Mercado del mar», que está en condiciones que demuestran un total abandono. Pareciera que es el refugio de personas en situación de calle, que lo tienen en un estado terrible, con un fuerte olor a orina y rayado con grafitis en todo su interior. Esta iniciativa, que se suponía debía generar empleo y ser una fachada más bonita para Coquimbo, se ha transformado en algo completamente distinto.
Una cuadra hace el contraste entre dos nuevos y modernos edificios, que resaltan más la incompetencia de las autoridades para concretar un proyecto que lleva siendo una promesa de campañas electorales anteriores y que nuevamente es utilizado para captar votantes. En las últimas semanas, el municipio ha pintado, cambiándole algo la cara.
Recientemente se hizo ingreso de nuevos antecedentes a la MIDESO para continuar con el proceso y obtener el RS antes de finalizar este 2024;sienten un gran cariño hacia el mirador, que lleva años siendo parte del patrimonio local. «Es un lindo panorama para pasar en familia, venir el fin de semana para estar tranquilo y apreciar la vista que se tiene desde acá. Lo malo es que muchos vienen a beber y dejan todo cochino, además que nunca he visto a nadie limpiando», comenta Ignacio, vecino del sector que regularmente visita el monumento. Otro lugar que tiene un legado cultural importante y una llegada de turistas masiva en temporada alta, es el Fuerte Lambert, sin embargo, actualmente este se encuentra en condiciones que dejan mucho que desear.
Por los esfuerzos, tanto de la dueña de la cafetería Lambert, la señora Juana García, y de los artesanos que se han organizado y se han sindicalizado como «Rescate Fuerte Lambert», es que este lugar puede seguir en funcionamiento. «Este lugar es muy hermoso, cada vez que vienenlos turistas quedan maravillados con el paisaje, pero falta algo más que poder entregarle al público.
Si yo no abro el local, no hay baños», denuncia Juana, quien lleva más de cuatro años esperando algún apoyo desde el municipio «parece cuento, pero bueno, aún seguimos con la esperanza que el alcalde se aparezca por estos lados», comentó.
Por su parte, Brigitte Zepeda, quien es la impulsora del sindicato de artesanos, expresó su descontento y preocupación por el lugar que se ha transformado en su fuente de ingresos. «No hay baños, ni seguridad, lo que más necesitamos es vigilancia, sobre todo en las noches, a la vecina le han entrado a robar el balón de gas en más de una ocasión. Además la luminaria funciona mal, todos los arreglos que se pueden apreciar han sido financiados con plata de nosotros, desde los puestos de artesanía hasta las luces que están funcionando.
Además agrega una sensación de aislamiento por parte del transporte público, «aca solo llegan personas en auto, no hay micros ni colectivos que lleguen hasta acá y no entiendo el por qué, si al final es lo mismo en distancia», señaló Zepeda. entre estos se incluye el estudio de ingeniería estructural terminado, informe que, principalmente, da cuenta que la estructura se encuentra en buen estado. Durante octubre, el gobernador Darwin Ibacache se reunió con los equipos técnicos de la municipalidad de Coquimbo. Además, la autoridad regional sostuvo un encuentro con el Gobernador Marítimo, Ricardo Alcaíno, para destrabar la tramitación de las concesiones marítimas del proyecto. El proyecto contempla un muelle peatonal de 900 metros cuadrados, que será un nuevo punto de recreación frente al mar y un atractivo turístico.
El mercado contará con 110 puestos, de los cuales más de 80 estarán dedicados a la venta de mariscos y pescados frescos en el primer nivel, y 25 locales gastronómicos en el segundo, ofreciendo una variada experiencia culinaria marina.
Turismo intenta sobrevivir en espacios históricosEn las propuestas de candidatos que generan mayor expectativa entre los vecinos de la ciudad puerto, se destaca el área del turismo, el cual ha sido interpretado por algunos aspirantes como «la industria sin chimenea». Si bien algunas zonas de la ciudad han sido embellecidas, como Av. Costanera, Varela o la nueva fachada de La Herradura, aún quedan muchos atractivos con un gran potencial turístico en completo abandono. Hay proyectos que contemplan la creación de nuevas atracciones, sin embargo, en lugares emblemáticos de Coquimbo da la impresión que no reciben una manito de gato en mucho tiempo.
En este contexto, nuestro medio se trasladó al sector de la Pampilla, donde se tomó rumbo por un camino utilizado por la Sociedad Pesquera Coloso S.A., lleno de piedras y sin ninguna señalética que indicara el camino al «Mirador de los Navegantes». Un lugar privilegiado, con una vista impresionante, desde donde se puede apreciar toda la periferia de la ciudad. A pesar de la poca información que se puede encontrar de este sitio, hay muchos vecinos de la zona que vienen de forma periódica yMercado del Mar. Pareciera que durante mucho tiempo no se han tocado edificios de relevancia en la comuna puerto, cuestión que incomoda a la gente.