Guías de senderismo de 83 años contagian su amor por la naturaleza
Guías de senderismo de 83 años contagian su amor por la naturaleza Carlos Pertuzé (83) vio un anuncio en el diario sobre visitas guiadas en la cordillera de Santiago. Tras participar en una, le gustó tanto que le dijo al monitor que él quería ser guía también.
Durante un año esperó a que lo llamaran para hacer el curso y, desde entonces, ya lleva 15 años trabajando en el Parque Aguas de Ramón, en La Reina. "Más que un trabajo, es mi entretención. A mi edad, el poder seguir siendo útil en algo es una gran cosa", comenta. En el parque ofrecen visitas guiadas por monitores ambientales; la mayoría de ellos tiene entre 20 y 30 años. Principalmente hacen recorridos a colegios, pero también a cualquier grupo de personas que quiera hacer senderismo. Entre 2009 y 2013, Pertuzé hizo clases de inducción a los monitores nuevos. Uno de sus alumnos fue Salvador Cazabón (83) y terminó siendo su dupla infaltable de trabajo. Cuando jubiló, empezó a hacer senderismo, porque siempre le ha gustado la naturaleza. La directora de la Asociación Parque Cordillera, administradora de Aguas de Ramón, vio a Cazabón caminando por ahí y le ofreció trabajar con ellos. Ya lleva 11 años siendo monitor. "Yo soy prueba viva de que la naturaleza y el senderismo salvan vidas. Me salvó de tres cánceres en 2010", destaca Cazabón. Y agrega orgulloso: "Me mantengo más alerta. Tengo buena memoria y buen apetito. Incluso ando en bicicleta". Experiencia y sabiduría Pertuzé siempre está buscando información nueva que pueda comentar. "Mi plus es conocer todo de los arbolitos y animales y de historia. Con eso, admite que "mis compañeros más jóvenes dicen que soy latero. Ellos quieren subir rápido y cumplir su horario, pero yo me puedo quedar toda la tarde hablando. Y mi mujer fascinada dice 'quédate allá viejito'", cuenta riendo. Toda su familia lo apoya. A sus hijos desde pequeños los lleva al cerro. Uno terminó siendo montañista profesional. A sus nietos también los conectó con la naturaleza, sobre todo al que actualmente es biólogo ambiental. "Me dedicó su memoria cuando se tituló y me emocionó hasta los huesos", confidencia. Nicolás Díaz, encargado de Educación Ambiental de Parque Cordillera y quien coordina a los monitores, comenta: "No vemos su edad como impedimento. Se valora mucho su experiencia; conocen muy bien el lugar. Tenemos grupos que piden específicamente a Carlos y a Salvador como guías. Se asombran de su sabiduría y edad. Son muy respetados". Cazabón considera importante su labor, especialmente para los jóvenes. "Si no los sacas del celular no saben que existe la cordillera. No les interesa si no los llevas y les explicas. Es un mundo nuevo para ellos". A pesar de su motivación, los monitores sienten el pasar de los años en sus cuerpos. "Nos cansamos harto, pero nos defendemos moviéndonos constantemente. No pienso abandonar. Yo me tengo que morir en un sendero", sentencia Cazabón. Pertuzé agrega: "Ya me está empezando a doler la rodilla. Igual me cuido y sé mis límites.
Quiero seguir hasta que me duren las infraestructuras no más". Acompañan a visitantes del Parque Natural Aguas de Ramón: Guías de senderismo de 83 años contagian su amor por la naturaleza Carlos Pertuzé lleva quince años de guía en el parque y comenta que "a mi edad, el hecho de poder seguir siendo útil en algo es una gran cosa". Salvador Cazabón empezó hace once años. "Tengo que morir en un sendero", sentencia. CATALINA AILLAPÁN Carlos Pertuzé (izquierda) suele encabezar los grupos y Salvador Cazabón va al final. Ambos trabajaron toda su vida en el rubro de ventas. CARLOS LEAY/ PARQUE CORDILLERA. - - -