COLUMNAS DE OPINIÓN: Desde “el que baila pasa” al “si te dejas marcar pasas”
COLUMNAS DE OPINIÓN: Desde “el que baila pasa” al “si te dejas marcar pasas” En el campus Jorge Millas de la Universidad de Chile, Chile, un grupo de estudiantes ha mantenido una toma que se extiende por varias semanas. Este movimiento, movimiento, según los organizadores, es un gesto de solidaridad solidaridad con la causa palestinay un repudio alas medidas de Israel en respuesta abs ataques de llamas del año pasado.
Aunque las intenciones detrás de la toma puedan ser comprensibles para algunos, las prácticas adoptadas por estos estudiantes han generado serias preocupaciones sobre el respeto a la dignidad y los derechos humanos dentro de la universidad.
Docentes y estudiantes han denunciado que los ocupantes ocupantes del campus han comenzado a marcar las manos manos de quienes ingresan y han designado “vigilantes” para supervisar las actividades de quienes son autorizados autorizados a entrar al establecimiento y que no son parte del grupúsculo que encabeza la toma. Esta práctica evoca recuerdos dolorosos de la historia, como la marcación de judíos por los nazis en la Alemania de Hitler.
Sin embargo, actitudes de esta calaña no son del todo desconocidas en nuestra democracia, y solo basta recordar que durante el estallido social en Chile vimos cómo fuerzas fuerzas de izquierda utilizaban tácticas como “el que halla pasa”, obligando a ciudadanos, ciudadanos, incluyendo adultos mayores, personas con neurodivergencia y mujeres mujeres embarazadas, a bailar para continuar su camino. Estos métodos coercitivos son inaceptables y violan la dignidad yla libertad individual. individual. Independientemente de nuestras posiciones polítipasa cas, aquellos que creemos en la democracia y los derechos derechos humanos debemos denunciar y repudiar cualquier cualquier actitud matonesca y totalitaria. Las acciones que buscan imponer control y coacción sobre otros no tienen cabida en una sociedad libre y democrática. democrática. La dignidad de cada persona debe ser respetada sin excepción.
El Presidente Boric, durante su gira a Europa, ha expresado su profunda preocupación por estas prácticas, prácticas, calificándolas de “gravisimas e inaceptables” y merecedoras del repudio total no solo de la comunidad comunidad universitaria, sino de todos aquellos que valoran la libertad de expresión y la democracia en nuestro país. Sus palabras son un recordatorio de que la verdadera solidaridad y el compromiso con una causa que se considera justa no deben contradecir los principios fundamentales de respeto y libertad que sustentan nuestra convivencia. convivencia.
En este contexto, es vital que la comunidad universitaria reflexione sobre las formas de protesta y movilización movilización que se están adoptando adoptando y que las autoridades universitarias y el sistema político político tomen medidas medidas concretas e implementen herramientas que permitan combatir este tipo de abusos. Estas prácticas totalitarias no pueden ser toleradas, toleradas, menos aún justificadas, especialmente cuando provienen provienen de estudiantes que en un futuro cercano serán profesionales y ocuparán cargos relevantes relevantes en nuestro país. Le invito a reflexionar sobre lo siguiente: ¿ se imagina estas personas gobernando nuestra sociedad? La lucha por una causa que se cree justa no justifica métodos que deshumanizan y controlan controlan a otros. La defensa de los derechos humanos humanos debe ser integral y coherente, respetando la dignidad de todos los individuos. En definitiva, definitiva, una causa justa solo puede triunfar si se sostiene sobre los pilares de la justicia, el respeto y la libertad. Desde “el que baila pasa” al si te dejas marcar pasas Ej DR.
JORGE ASrUDILLO Académico de Derecho UNAB Sede Visa del Mar Actitudes de esta calaña no son del todo desconocidas desconocidas en nuestra democracia, democracia, y solo basta recordar recordar que durante el estallido estallido social en Chile vimos vimos cómo fuerzas de izquierda izquierda utilizaban tácticas tácticas como “el que baila;1].