Cáncer, oncólogos y repensar modelos de atención
Las cifras sobre el cáncer en Chile y su tratamiento dan cuenta de una profunda inequidad enel accesoa lasalud de miles de compatriotas. Hace pocos días se conoció un estudio del Instituto de Políticas Públicas en Salud de 1aU. San Sebastián, dondese indica que desde2018a lafechalalista de espera GES oncológicas aumentaron en 542%, siendo las mujeres las más afectadas. Datos del Ministerio de Salud señalan que cada año mueren cerca de 28.000 personas por esta causa.
No todo el pas tiene los mismos tipos de cáncer y así, en las regiones del norte predominan cáncer de piel (melanoma) y de pulmón, mientras queen las regiones del Maule y extremosur(Aysén y Magallanes) los números se disparan para cáncer gástrico y de colon.
Son los principales tipos de cánceres en el país, que al mismo tiempo se producen enregiones donde, según información oficial, está la menor dotación de oncólogos de la red pública, y en algunos casos hay solo un especialista para toda la región.
Hay una deuda con los pacientes y sus familias que hoy viven esta enfermedad, y también con quienes podríantenerla, ante la falta de información y programas sobre detección temprana que, sabemos, aumenta las posibilidades de tratamiento con mejores resultados.
Para hacer frente a este desafío sanitario se requiere de creatividad y una visión en red, por ejemplo, aprovechando las tecnologías digitalesvirtuales para así disponer de especialistas oncólogos donde no hay, con una=x$8RedSaludmirada transdisciplinariaen comités oncológicos nacionales (juntas Médicas) por enfermedad para todo el país. Esta visión conjunta y compartida da la posibilidad de resolver el problema de salud para ese paciente, sin que deba moverse desu ciudad.
Repensar modelos de salud, dondeel paciente con cáncer y su familia sea nuestra principal preocupación, estar disponibles para desarrollar público-privadas alianzas con visión en red y en niveles de complejidad, nos dará la oportunidad como país de hacernos cargo dela profunda inequidad en el acceso que hoy nos desafía a todos. COMENTARIOS. Hay una deuda con los pacientes y sus familias que hoy viven esta enfermedad, y también con quienes podrían tenerla”. Dra. Claudia Gamargo, Directora Instituto del Cáncer