Autor: Marcelo González Cabezas
El notorio aporte migrante al PIB
El notorio aporte migrante al PIB Los extranjeros que se afincan en el país es uno de los temas que se ha tomado la agenda nacional durante los últimos años.
De manera principal ha sido destacada la cara negativa del fenómeno, por las prácticas delictuales de algunos migrantes y las tomas ilegales que protagonizan otros, conductas que -en todo casono son inusuales entre los nacidos acá. Por eso desde la Fundación porCausa Chile (www.porcausa.org/chile) elaboraron un informe que se centra en el aporte económico de quienes llegaron a nuestra sociedad. Y, la verdad, es que los datos sorprenden.
El trabajo fue titulado “¿ Cuál es la contribución de la población migrante a la economía de Chile?” y sus autores son los españoles Ismael Gálvez Iniesta (profesor de la U. de las Islas Baleares, especializado en macroeconomía y con interés en el mercado del trabajo y la inmigración) y Gonzalo Fanjul (De la Fundación porCausa Chile, investigador y activista contra la pobreza, especializado en migraciones y desarrollo). Los principales hallazgos del estudio es que en 2024, la población migrante aportó el 10,3% del PIB chileno, superando su representación poblacional que equivale al 8,7%, es decir, cerca de un millón 700 mil personas. Además, desde 2018 su contribución al PIB ha aumentado tres puntos porcentuales, el doble que su crecimiento poblacional.
El 50% del crecimiento económico entre 2013 y 2023 se debe a la migración, mientras que los trabajadores nativos sólo explican el 18%. Cada migrante aporta en promedio 604 dólares anuales netos al Estado, 3,6 veces más que un ciudadano nativo, lo que se debe a la edad media y al perfil profesional de los foráneos.
También los migrantes consumen menos recursos públicos que los locales: por cada 10 pesos que ingresa un nacional, nueve van a gastos de nacionales, mientras que de 10 pesos que aporta un migrante, 6,5 pesos van destinados a gastos de personas migrantes, siendo lo restante un aporte neto a las arcas del Estado. Y por último, la población micon base en Chile, a donde vamos con regularidad y tenemos mucho contacto.
De hecho, en junio iremos a presentarlo de forma oficial Conozco bien Chile, donde he estado bastante tiempo, y puedo decir que es un país muy serio, que tiene expertos en cada uno de estos ámbitos y donde la política pública es tomada muy en serio”. Transición demográfica ¿ Qué caracteriza al discurso generalizado sobre las migraciones? Que son problemáticas, amenazantes y una tragedia, pero la verdad es que al mirar la economía de las migraciones hay que decir que es una muy buena noticia. Y quizá es la principal solución que tiene un país cuando se encuentra en un proceso de transición demográfica, como es el caso de Chile.
Ese panorama no es sorprendente, pues se parece mucho, por ejemplo, a lo que ha pasado ya en España, Japón e Italia, que envejecen y cada vez tienen menos trabajadores autóctonos. ¿Qué los motiva a centrarse en esta temática analizando la realidad chilena? _Entiendo que este trabajo puede generar polémica, pero el contexto en el que situamos a Chile no es en el de la media de América Latina, sino que en el campo de la OCDE, pese a las diferencias de renta. Es que Chile tiene la oportunidad de adelantarse para gestionar este proceso de la forma más inteligente posible, aprovechando los beneficios de la migración y reduciendo algunos riesgos asociados. Chile se parece a varios países de la OCDE por la composición de su mercado de trabajo, por su demografía y la necesidad de diversificar su modelo productivo, entre otros.
La transición demográfica que ustedes están viviendo es un proceso complejo y delicado, no Gonzalo Fanjul Fundación porCausa Chile grante tiene mayor participación en el mercado laboral, con una tasa de empleo del 78,8% frente al 67,4% de los nativos. Desde España, Fanjul señala a Publimetro que “esta publicación recoge datos estadísticos actualizados de Chile y ofrece una mirada fresca sobre el peso de la fuerza laboral migrante en la economía chilen. El trabajo fue hecho a distancia, pero contamos con la colaboración de un equipo nuestro de asesores y expertos exento de tensiones. Pero los datos que analizamos sugieren que la política migratoria constituye un factor determinante en la viabilidad económica del país.
Chile puede evitar los errores que se dieron en Europa con la cuestión migratoria, aprovechando los numerosos beneficios que tiene. ¿Cómo es la distribución de los extranjeros en el mercado laboral chileno? _En la última parte del informe nos referimos a ello y notamos que hay algunos sectores en los que destacan, como el agroalimentario, donde son necesarios y están mucho más presentes. Pasa lo mismo en los cuidados de las casas. Pero luego hay una distribución bastante razonable de los migrantes en casi todos los ámbitos de cualificación. Eso sí, llama la atención su fuerza en el comercio, donde hay más migrantes que chilenos pues los primeros manejan pequeños negocios. Los migrantes también están en los servicios, en el transporte y almacenamiento, en lo administrativo, en el alojamiento y en la hotelería.
Y también se han ido sumando mucho a las profesiones y labores de mayor retribución salarial. ¿Les llamaron la atención los resultados o pensaban que era con lo que se iban a encontrar? _Esperaba encontrar algún dato negativo más, pero la fotografía es de forma sorprendente positiva.
Incluso en aquellos sectores más vulnerables de la migración, como el de los trabajadores sin papeles, los irregulares, hemos encontrado que el impacto fiscal de ellos ahora es prácticamente neutro, lo que es un dato mejor que el de España, donde ellos tienen algún costo para el “Estado de Bienestar”. O sea, si los irregulares dejaran de serlo en Chile, habría un beneficio neto llamativo para el país. Por eso la regularización es una buena idea, algo que la sociedad chilena debe entender incluso como un negocio.
La sorpresa es que el panorama tiene pocas sombras y muchas luces. ¿Qué futuro ven a la participación de los extranjeros en la economía chilena? _Con toda probabilidad ocurrirá lo que acontece en todo país que está en proceso de transición demográfica, o sea, que los agujeros en el mercado del trabajo ya no son coyunturales o puntuales, ni referidos a sectores de menor calificación, sino que se extienden a todos lo ámbitos.
Por eso habrá más médicos, gerentes e ingenieros, por ejemplo, de origen extranjero. ¿Qué pretenden que suceda con el informe? _No somos una organización que haga lobby, por si se piensa que queremos que lo tomen de inmediato las autoridades Nuestro propósito es ofrecer información relevante al debate público chileno, para sostener una conversación inteligente y madura sobre este asunto, basada en datos y en hechos. Es que la imagen negativa que hay en Chile sobre los migrantes tiene cierta base en la realidad, pero también hay una construcción narrativa artificial, unida al miedo. Conclusión. Un importante estudio da cuenta de cifras que muestran varios rasgos positivos en lo económico del asentamiento de extranjeros en Chile. CifrAS 10,3% Del PIB chileno aportaron en 2024 los extranjeros, superando su representación poblacional del 8,7%. 78,8% Es la participación de los foráneos en nuestro mercado laboral, frente al 67,4% de los locales.
“Chile tiene la oportunidad de adelantarse para gestionar este proceso de la forma más inteligente posible, aprovechando los beneficios de la migración y reduciendo algunos riesgos asociados”. EL DATO Contrarrestando la baja natalidad Ante la realidad innegable de que muchos chilenos no quieren más migrantes, hay que considerar el envejecimiento de la población refrendado por el adelanto del Censo 2024.
Por ello Gonzalo Fanjul apunta a que “Chile presenta la tasa de natalidad más baja de su historia (1,16 hijos por mujer en edad fértil en 2023, su mínimo nivel histórico, y lo óptimo para el reemplazo poblacional es 2,1). Y nuestro informe apunta a que sin las familias migrantes, el país podría tener serios problemas a medio y largo plazo para sostener su crecimiento económico y afianzar la sostenibilidad de su modelo de bienestar. Un ejemplo cercano es Italia, donde analizaron qué supondría para su economía que las políticas de natalidad llegaran a garantizar una tasa de reposición de trabajadores. Y la conclusión es que cada italiana debería empezar a tener entre 6 a 8 hijos, lo que es devolver a ese país al siglo XIX.
Algo que claramente es imposible que ocurra. ¿Cómo se debe manejar la migración y del fomento de la natalidad? Hay que fomentar políticas de natalidad y proteger a las familias, porque eso es lo razonable y es bueno para la sociedad, para a población y para las comunidades. Pero eso no sustituye a la política migratoria.
La llegada de más migrantes es una variable de cualquier ecuación que vaya a resolver el desafío poblacional de Chile y de otros países.. Cerca de un millón 700 mil habitantes de Chile ya son extranjeros, y muchos de ellos hacen un importante aporte a la economía. / agenCia