Autor: Francisco González, gerente general Vertical Hunter
Trabajar para vivir y no vivir para trabajar
COLUMNAEste 1 de agosto entró en vigencia la nueva Ley Karin, la que viene a establecer protocolos de prevención del acoso laboral y/o sexual, asícomo de la violencialaboral.
No hay que olvidar que esta ley nace y lleva el nombre en conmemoración a Karin Salgado Molina, tens que se quitó la vida en 2019 por ser víctima de acoso laboral. ¿Me pregunto cuántas mujeres u hombres lay en el mundo laboral que están enfrentando hoy situaciones similares de maltrato psicológico en su oficina? Queterrible es estudiar, ilusionarse con unavida laboral y cuando ingresamos a trabajar vivir situaciones de acoso labo-ral o, más aún, de violencia laboral. Pasamos más tiempo en el trabajo que enel hogar, en muchos casos convivimos más con compañeros de trabajo quecon la familia.
Con los niveles de desempleo en el país, con la baja publicación que seve de ofertas laborales en los portales de empleo (estamos en niveles similares a la pasada pandemia), tener hoy un empleo es casi un premio por lo cual generar buenos climas laborales es esencial, tanto para atraer talentos como para retenerlos.
Tener equipos motivados no es simplemente un esfuerzo económico por parte delas empresas, sino también implica generar un buen ambiente laboral y unabuena cultura, lo que se conoce en muchos casos como un buen sueldo emocional que ayuda, entre otras cosas, a la salud mental y bienestar de los colaboradores. Esperemos que esta ley impida que en el futuro ocurran situaciones como la vivida por Karin, cuya muerte originó esta normativa. Asimismo, anhelamos que sea aplicada de buena fe, tanto por empleados como empleadores, y que no sea utilizada como una herramienta para perjudicar a uno u otro. Ojalá todos pudieran trabajar para vivir y no vivir para trabajar. Al final de todo, el trabajo es un medio y no un fín. Vertical Hunter.