El descendiente de esclavos que lidera la nueva cancillería británica
El descendiente de esclavos que lidera la nueva cancillería británica D escendiente de esclavos y proveniente de uno de los barrios más humildes de Londres, David Lammy dice que su llegada a la cancillería de Reino Unido es una muestra de la "modernidad" que vive hoy el país luego del triunfo del Partido Laborista y la llegada al poder del Primer Ministro Keir Starmer.
Aunque el abogado de 51 años afirma que en su puesto buscará avanzar aún más el "enorme potencial" de una nación que requiere de un "reinicio" en su relación con Europa, en la lucha contra el cambio climático y en su acercamiento al Sur Global, en un escenario internacional repleto de grandes desafíos para la nación.
Hijo de padres provenientes de Guyana --su madre lo crio durante buena parte de su infancia junto a sus cuatro hermanos tras ser abandonados por su padre--, Lammy destacó a temprana edad por sus estudios y logró graduarse en 1993 como abogado de la SOAS University of London, para luego convertirse en el primer británico de raza negra en estudiar en la Escuela de Derecho de Harvard, en donde se hizo amigo de Barack Obama luego que se conocieran en un encuentro de exalumnos. En el año 2000, con 27 años, se convirtió en el parlamentario más joven de ese entonces en lograr un escaño en la Cámara de los Comunes por su barrio de Tottenham.
En el Partido Laborista se hizo rápidamente un nombre al ocupar diversos cargos durante los gobiernos de Tony Blair (1997-2007) y de Gordon Brown (2007-2010), incluso como titular del Ministerio de Cultura entre 2005 y 2007.
En paralelo, Lammy siempre buscó mantener un rol activo fuera del Parlamento como activista contra el racismo y la injusticia social, con su foco puesto en temas como el sistema judicial --en 2017 publicó el "Informe Lammy" sobre la discriminación racial en la justicia y el sistema policial británicos-y en la historia de la esclavitud en Reino Unido y otras partes de Occidente: sus antepasados llegaron a Guyana como esclavos.
Un mes antes de la elección, Lammy afirmó que se tomaría "increíblemente en serio" la responsabilidad de ser el primer ministro de Exteriores británico descendiente de esclavos, y que esas raíces influirían en su forma de afrontar el cargo.
Y si bien entonces Lammy no tenía asegurado el cargo, su llegada al Ministerio de Exteriores se daba por hecho ante los sondeos que daban por amplio ganador al laborismo (triunfo que fue confirmado en las urnas) y porque fue nombrado en 2021 por su partido como canciller en la sombra.
Desde ese cargo afinó una visión de la diplomacia bajo el modelo de "realismo progresista", el que define como una manera de "tomar el mundo tal como es, no como nos gustaría que fuera". Experiencia en temas diplomáticos "Lammy es alguien con autoridad dentro del Partido Laborista de Keir Starmer, y el haber sido canciller en la sombra le permitió acumular una buena experiencia en temas diplomáticos.
Realizó decenas de viajes a varios países durante los últimos años, en los que fue presentando a gobiernos de todo el mundo la forma de ver la política exterior que tenía el laborismo británico bajo el liderazgo de Starmer, mucho más moderado que el laborismo que antes lideraba Jeremy Corbyn", dijo a "El Mercurio" el politólogo de la Universidad de Lancaster Mark Garnett. El experto agrega que Lammy "preparó ese terreno y también se preparó él, sobre todo cuando ya era evidente que el próximo gobierno de Reino Unido sería laborista.
Es una persona con buenas habilidades para el cargo, en un momento en que Reino Unido necesita mirar más allá de sus fronteras tras muchos años de fuerte discusión interna". Decidido a impulsar desde su cargo lo que considera como un Reino Unido "orgullosamente internacionalista", Lammy delineó rápidamente los principales objetivos que tendrá como jefe de la diplomacia británica en un comunicado a poco de haber sido designado en el puesto.
El canciller afirmó que uno de los pilares de su agenda estará puesto en dar un "reinicio" en la relación de Londres con la lucha contra el cambio climático y también en los lazos con el resto de Europa y con el Sur Global. Lammy ya había adelantado este último punto antes de la elección. El abogado fue un fuerte defensor de la idea de mantener al país dentro de la Unión Europea (UE) durante la campaña para el referéndum del Brexit.
Y aunque el nuevo canciller se adhiere a la posición de Starmer de que el nuevo gobierno no buscará el reingreso de Reino Unido a la UE, Lammy afirmó que el Ejecutivo laborista tiene planificado iniciar negociaciones con Bruselas para alcanzar un acuerdo de seguridad que cubra áreas como defensa, energía, cambio climático y el fortalecimiento de las cadenas de suministro. Más allá de Europa, Lammy también apunta a dar un nuevo empuje a la llamada "relación especial" con EE.UU., la que calificó como clave para asegurar el crecimiento y la seguridad de ambas naciones.
Esto, pese a la posibilidad de que tras las elecciones estadounidenses de noviembre el gobierno laborista tenga que lidiar con un Ejecutivo en EE.UU. liderado nuevamente por Donald Trump, a quien Lammy describió en el pasado como un "racista" y "simpatizante nazi", pero con quien ahora asegura que trabajaría en caso de retornar a la Casa Blanca.
Lammy también es consciente de que la escena internacional no será una tarea fácil en un mundo que calificó como lleno de "enormes desafíos". En ese sentido, el diplomático ha reafirmado el compromiso "inquebrantable" de Londres con Ucrania en su guerra contra la Rusia de Vladimir Putin, además de revalidar esta semana el compromiso británico con la OTAN en su participación en la cumbre de la alianza en Washington.
Sobre la guerra en Gaza entre Israel y Hamas, Lammy urgió en una de sus primeras declaraciones como canciller a "un cese el fuego inmediato" y a la liberación de los rehenes en manos del movimiento islamista palestino.
A su vez, al margen de la cumbre de la OTAN se reunió con su par estadounidense, Antony Blinken, para tratar el tema, junto con otros asuntos como la guerra en Ucrania y la cooperación entre EE.UU. y Reino Unido en materia de Defensa.
Ante este escenario, Victoria Honeyman, experta en política exterior británica de la Universidad de Leeds, aseguró a este diario que si bien hay ciertas áreas en las que no se esperan grandes cambios en la política exterior británica, con Lammy a la cabeza sí se podrán evidenciar diferencias m á s " n o t o rias". "La información que hay por ahora sugiere que el Partido Laborista y el Partido Conservador concuerdan ampliamente en los grandes temas de política exterior (como el apoyo a Ucrania, el respaldo a la `relación especial' con EE.UU., algo de apoyo a Israel actualmente), aunque los detalles de eso pueden variar, como con el mensaje sobre las acciones de Israel en Gaza.
Las diferencias más obvias con Lammy en el Ministerio de Exteriores están en el mensaje hacia la UE, donde el gobierno laborista quiere una relación más conciliadora con sus miembros para ayudar a las negociaciones que vengan de ahora en adelante", afirmó la académica.
El descendiente de esclavos que lidera la nueva cancillería británica El jefe de la diplomacia de Reino Unido defiende un "realismo progresista" y apunta a dar un impulso a los lazos con la UE y el Sur Global. JOSÉ TOMÁS TENORIO LABRA Corresponsal en España { PERFIL David Lammy } EL DIPLOMÁTICO ha dicho que, tras el Brexit, desea un "reseteo" con Europa en las áreas de protección del clima, energía y migración. FRANCE PRESSE MEDIO ORIENTE David Lammy viajó ayer a Israel y Palestina, en su primer viaje a Oriente Medio como ministro de Exteriores..