Autor: Alfonso Salinas

Cartas: Ahora, manos a la obra
Cartas: Ahora, manos a la obra Columnaúuchas expectativasy sabrosas discusionesgeneranlas elec¡ cos, ciftamosesperanzas des'mesuradas enla confirmación toridades políticas. En paralelo, la confianza en los partidos e instituciones decae. Varios han salido a pedir una reformaal sistema políti co postulando volveral bipartidismo. En el medio, la gente suele repetir unsabio refrán: “Seaquiensea quien gobierne, yo tengo que trabajarigual”. Comparto ciones.
Enintervalos, o recambio de nuestrasau-do, tampocologramosrealizarlas. 'Unmínimoseríaaunar fuerzas paraavanzar en mejorar temáticas capaces de gestionar mepococontroversiales. ¿Cómonovamosaser jorlosresiduos (uno de losiítems de mayor gasto en los presupuestos compostaje y dismimunicipales), aumentandolastasasdereciclajey nuyendoloque vaadisposición final? ¿ Oconcretarlarecuperacióndel áreareconocidacomo Patrimonio de la Humanidad en Valparaíso, sus ascensores, el parque Barón? ¿ Generar un sistema de monitoreo precisoe independiente de calidad del aire en Quintero Puchuncaví que identifiquelos agentes y fuentes contaminantes para focalizar loseslos problemas? ¿ O armar unaestrategia paracomfuerzosdondeestán batirlasequía? Laclave esser capaces de trabajar en formaseria, sistemática, conexpertos dereconocidatrayectoria, evitando partir decero, sino quea partir delos diagnósticos y avances disponibles.
Sobre eso, tenemos que poder construir una agenda ambiciosa que postule al menos una hipótesis de desarrollo, con metas y planes concretos, identificando proyectos, recursos, responsables y plazos, y junto con ello, meterse enel detalle dela gestión para que las cosas ocurran. Alas autoridades electas les deseamos lamejor de las suertes, y aúinnos quedalaelecciónde quién dirigiera nuestro Gobiemo Regional. Nuestra disposición será aportar para realizar un esfuerzo entre todos, públicos y privados, academia y ciudadanía, empresas y profesionales, para acortar las brechas que nos separan respecto alasituación donde nos gustaría estar.
Cuenten con nosotros para ponernosatrabajar. la necesidad de una reforma profundaal sistema político, pero no mees claroquéaportalamilitanciaa lagestión comunal (por algo, los candidatos independientes son ya casi un tercio). Más allá de posibles reformas a los métodos de elección, creo que la clave está enotrolado. Entrelo actualy lo posible hay que dibujar uncamioy luegorecorrerlo. Sabemos relativamentebiencómo esel presente, con sus virtudes y sus defectos. Tenemos que imaginar un futuro deseado y quenos parezca alcanzable. Ahí empiezan nuestros problemas porqueno logramos ponernos deacuerdo en cuálesel destino que aspiramos. Unos quieren el puerto, otros no; unos más turismo, otrosmenos; unos másedificiose industrias, otros más medioambiente; yasí. Corremos el riesgo, comoaquellosindividuosatrapados en las nubes de sus dudas, de caer en la pusilanimidad, sin el coraje detomar opciones y avanzar. Tenemos que hacer un mayor esfuerzo en consensuar una imagen de futuro compartida. Todosdebemos ceder y ser menos presumidos. Pero el problemase torna aún peor cuando, incluso de acueren aquellas materias donde todos estamos.