Autor: POR Karim Gálvez. FOTOGRAFÍAS Sergio Alfonso López
Josefina Araos La intelectual que inspira a la derecha
Josefina Araos La intelectual que inspira a la derecha La intelectual que inspira a la derecha LA HISTORIADORA JOSEFINA ARAOS ES UNA DE LAS PENSADORAS DE DERECHA MÁS RELEVANTES DEL MOMENTO.
DESDE SU VEREDA COMO INVESTIGADORA Y COLUMNISTA OBSERVA CON INQUIETUD UNA POLÍTICA POLARIZADA. "ALGUIEN TIENE QUE DAR EL PASO Y DETENER LA LÓGICA DE DESCALIFICACIÓN DEL ADVERSARIO". Y ACERCA DE LA PROPUESTA DEL GOBIERNO SOBRE EL ABORTO LIBRE, DICE: "ES LA ÚLTIMA BANDERA QUE LES QUEDA DE UN PROYECTO QUE HA SIDO DERROTADO EN TODO LO DEMÁS". POR Karim Gálvez. FOTOGRAFÍAS: Sergio Alfonso López.
Josefina Araos La intelectual que inspira a la derecha Es Es fines del otoño y se siente el frío en las calles, pero adentro adentro de las oficinas del lES (Instituto de Estudios Sociales) la estufa tempera el comedor donde un gran librero es el protagonista. El ambiente es hogareño porque es una casa inglesa estilo Tudor que mantiene su fachada y distribución original. Son las diez de la mañana y Josefina Araos (36), historiadora, doctoranda en Filosofia, investigadora, está un poco agitada aún. Como muchas madres que trabajan y crían hijos, debió resolver algunos temas domésticos antes de llegar a la oficina. Su hija menor, Amparo, de un año, quedó al cuidado de sus abuelos Cecilia Bralic y Daniel Araos, ambos médicos que ya jubilaron.
Mi mamá dejó la medicina luego de estudiar un magíster en Sociología y fue durante muchos años profesora de Teoría de la Cultura en la Escuela de Teatro en la Universidad Católica, por lo que su lenguaje también es filosófico. Eso me marcó.
La historiadora acentúa ese lenguaje y esa atmósfera de pensamiento pensamiento en su libro “El pueblo olvidado” (2021): “Agradezco a mis padres y hermanos por su compañía y por haberme haberme entregado el primer espacio de verificación de que el pensamiento pensamiento surge de la vida real y cotidiana”, se lee en las primeras páginas páginas del volumen. Es la menor de cuatro hermanos, en que ellos heredaron la vocación vocación científica y ellas, la de las Ciencias Sociales. Fue una infancia con un espacio estimulante desde el punto de vista de profundidad de la vida, un ambiente creyente, pero no normativo normativo ni moralista. Una religiosidad que se vivía reflexivamente y era objeto de elaboración intelectual en el sentido de que la vida importa, de tomarse en serio los desafíos. Una formación en el colegio de los agustinos y luego ignaciana en el Nuestra Señora del Camino reforzaron una vocación católica.
Sabe que en los debates públicos, como el relacionado con el aborto que volvió al tapete, tras el anuncio de la Cuenta Pública, su postura creyente podría ser criticada. riCómo cree que terminará el actual debate del aborto libre? ¿ Está en la prioridad de la ciudadanía? Cuesta justificarlo a nivel ciudadano, pero que no sea prioritario entre las llanmdas urgencias sociales no significa que los temas valóricos valóricos no puedan abordarse. Sí creo que es la última bandera que les queda de un proyecto que ha sido derrotado en todo lo demás. Vuelven Vuelven a esta ofensiva luego de haberla bajado tras la derrota del primer proceso constituyente en que los derechos sexuales y reproductivos generaron mucho ruido. Luego vino el segundo proceso y cambió el escenario.
Entre esos dos procesos, ¿dónde quedó la ciudadanía? cNo teme opinar en una sociedad tan polarizada? No quiero ser complaciente, pero Twitter fue un espacio que me afectó, en que uno puede ser sujeto objeto de bloqueo. Tomé la decisión decisión de salirme de ahí porque me sentía muy expuesta. Aunque nunca viví un bullying duro, es un lugar hostil donde estás todo el tiempo preocupada. Josefina Araos es una columnista de prensa y panelista de Telel3 Radio, donde se le escucha ponderada y con voz convincente. Llama la atención que mientras conversa tanto en la radio como en esta entrevista se le nota concentrada, sin interrumpir a su interlocutor. No creo tener un acceso más privilegiado a la verdad, todos los ciudadanos podemos participar de la discusión pública bajo un rayado rayado de cancha al que nos sometemos.
Tengo la convicción genuina de que uno no es dueño de la verdad y que no somos infalibles y, por lo 1 fi. 1 “Tengo la conviccion genuina de que uno no es dueño de la verdad y que no somos infalibles, y siempre el otro puede tener algo valioso que decir”. 4. t 49 Jç. Josefina Araos La intelectual que inspira a la derecha tanto, siempre el otro puede tener algo valioso que decir. Pueden acusarme de ingenua, pero para mí es una convicción. --En las humanidades se dice que la investigación está teñida por una hiperideologización. --La academia es heredera del positivismo del siglo XIX. Es cierto que todo conocimiento tiene un punto de vista, pero hay que evitar que sea pura subjetividad. Concluir que toda investigación oculta lógicas de poder que se camuflan y, por lo tanto, lo único que puede hacer el pensamiento intelectual es denunciar esas intenciones ocultas ha contaminado nuestra discusión pública.
Tal vez nunca se resuelve definitivamente, pero creo que es muy importante ser consciente de que nunca te liberas de tus sesgos. --¿ Cuáles serían los suyos? --Alguien podría decir que ser católico es un sesgo, pero yo lo veo como un punto de partida en la discusión pública, no me invalida; uno puede ser criticada por la solidez de la argumentación, pero no descalificada a priori. --Siendo católica, ¿cómo recibió la noticia de la expulsión de Felipe Berríos de los jesuitas por los casos de abuso? --Con dolor, impacto y conmoción, como cada noticia de abuso, y con profunda inquietud respecto de cómo se renueva una institución frente a la recurrencia de estos casos. La pregunta pendiente es repensar una institucionalidad que contenga.
Además de los protocolos, cómo educas para evitar a los abusadores y sus cómplices y para que las víctimas se den cuenta tempranamente y no demoremos años en denunciar, porque son las características de ese trauma. Es una pregunta gigantesca.
Uno de los libros de Josefina Araos se titula "Católicos y perplejos: La Iglesia chilena en su hora más oscura" (2018), que publicó en el contexto de la visita del Papa Francisco a Chile, quien los primeros días se negó a recibir y aceptar los casos de abusos chilenos.
Para la historiadora, no fue azaroso titular con la palabra perplejidad. --La perplejidad es una categoría muy bonita, incluso tiene algo filosófico, un estado de asombro donde la realidad sobrepasa la capacidad de comprensión de uno y hace preguntarte. --¿ No se ha rebelado en su fe? --No he dejado de creer, a pesar del mal del mundo. Creo que los abusos de la Iglesia son expresión del mal del que es capaz el ser humano y no una negación de la existencia de Dios. También ahí hay una gran pregunta, y es si acaso existe Dios, por qué existe el mal. Es una inquietud que a muchos lleva a no creer, pero no es mi caso.
Sus palabras, reflexivas, se escuchan acordes con la expresión de su rostro, de piel clara y ojos acuosos; un rostro que recuerda un cuadro de Amedeo Modigliani o un retrato de la escritora Virginia Woolf. --Creo que soy una persona más del lado del pensamiento que de la acción, y una persona tímida, en fin, entonces tiendo a ser más espectadora que protagonista; creo que eso también va acompañado de ser alguien más reflexivo. No sé, siempre he sido así.
No tengo memoria, pero sí recuerdo en el colegio no solo mi gusto por la historia y la filosofía, sino también cierta vocación como consejera; de hablar de los problemas de la vida, las grandes preguntas.
No sé en qué momento se fue dando este camino de ir tomando cierta presencia en el debate público hoy. "ME INQUIETA LA CLASE POLÍTICA POLARIZADA" El IES, un centro de estudios que promueve la investigación en temas públicos, es su coordenada laboral desde 2016, donde llegó sin la pretensión de convertirse en una voz pública. Incluso le asustaba el. Josefina Araos La intelectual que inspira a la derecha tema político, pero se ha convertido en una intelectual que podría ser la sucesora de Lucía Santa Cruz o una pensadora estilo Carla Cordua. El investigador Pablo Ortázar la ubica entremedio de ambas. Josefina tiene el elemento político de Santa Cruz, pero no el trasfondo oligárquico, y el elemento intelectual mesocrático de Cordua, Cordua, pero no su neutralidad política. Araos recibe el piropo con sorpresa y señala: Me sigo sintiendo una espectadora. Estoy presente desde la reflexión y no de la acción política, aunque quizás algunos estarían en desacuerdo. Mi vocación es el pensamiento y la política el marco de la acción; así lo entiendo. Creo que ambos tienen que relacionarse virtuosamente. Hoy mira el escenario político y hace su diagnóstico: Me inquieta la clase política fragmentada y polarizada por la estructura que genera, pero también por disposiciones personales de algunos políticos. Alguien tiene que dar el paso y detener la lógica de descalificación del adversario; eso horada la amistad cívica; tenemos que pensar cómo tener una política capaz de asegurar gobernabilidad. gobernabilidad.
Dice que la derecha “no la ultraderecha, que tiene otros códigos” códigos” debe asumir que habrá costos si desea gobernar y que está en deuda con un proyecto político propio después del estallido social y la muerte del expresidente Sebastián Piñera. Debe reformular su proyecto político frente a la crítica y cuestionamiento cuestionamiento de republicanos. El problema es que quedó paralizada para el estallido; luego vinieron la pandemia, la derrota presidencial, los dos procesos constituyentes. No ha tenido tiempo para decantar qué sucedió y el calendario electoral tampoco lo permite. Dice que la izquierda también está al debe: Es un gobierno que ha tenido que renunciar a sus ideas, a su lenguaje, a sus agendas. Está bien que haya flexibilidad, pero deben preguntarse qué queda de su proyecto político inicial yen qué se han convertido. Cómo cree que seró recordado el Presidente Gabriel Boric? Como un Presidente que enfrentó el choque con la realidad de lo que significa gobernar y que tiene disposición a cambiar; eso tiene valor. Pero también como un Gobierno con muchísimas dificultades que se relacionan con problemas estructurales. En alguna medida ello lo exime, pero ha habido errores evidentes por el tipo de oposición oposición que fueron y de la que han tenido que arrepentirse. No solo por cómo avalaron la violencia para el estallido, sino por el proyecto político que construyeron antes de llegar al poder y en las decisiones que tomaron como gobierno. Esta generación es también mi generación, generación, y me enoja cuando se dice que son jóvenes que están aprendiendo. aprendiendo. Ya no somos tan jóvenes. Llevan diez años en política; sabían dónde estaban metiéndose, por algo querían llegar ahí. Dice que en el cuestionamiento de los 30 años de la Concertación fue extremadamente duro. No hubo interés por apreciar lo que para las grandes mayorías eran ganancias importantes que querían conservar. Una izquierda refimdacional como lo fueron no sé si lo signen siendo es incauta, porque no se considera heredera de nada; creo que es un problema de esa generación. GRANDEZA Y MISERIA Para su tesis de magíster en Historia, Josefina Araos abordó la poesía popular impresa en Santiago a principios del siglo XX, donde rescató poetas olvidados, espacios culturales, narraciones. Su tutora fue la premio Nacional de Historia Sol Serrano. Para ella, es casi un lema rescatar a las personas en la historia.
Siempre me decía que es fácil adentrarse en la historia de las instituciones instituciones y la política del Estado, pero dónde están las personas: el niñito que no llegaba a la escuela; el profesor del liceo; el inspector mandado por el Estado a las escuelas rurales. Esas historias hay que rescatarlas. La narración es un concepto que tiene sentido para Araos. Allí aparece la carencia humana, las personas concretas reales en su grandeza y en su miseria; creo que esa es la riqueza de la narración. narración.
Sus reflexiones la llevaron al doctorado en Filosofía que cursa en la Universidad de los Andes. eQué tan djflcil es estar en lafllosoffa en un momento social e histórico en que prima la gratificación inmediata? Suena casi contraintuitiva El mundo se mueve hacia una necesidad de respuestas inmediatas inmediatas y la filosofía, menos mal, que no está en eso. Trato de evitar que el estudio y la reflexión intelectual me vuelvan una decepcionada frente al resto del mundo. Lo trato de evitar porque creo que es un error de juicio, aparte de un prejuicio moral que dificulta la comprensión verdadera de la realidad. El estudio de la filosofía, entre otras cosas, es sumirse en el asombro frente a la realidad y eso no significa idealizarla. idealizarla. Está en la etapa del doctorado de una madre que trabaja y tiene dos niñas pequeñas. Su investigación investigación se centra en el pensamiento pensamiento político de Hannah Arendt. Me encuentro en una versión versión cercana al final de mi proyecto proyecto de tesis y terminando los cursos en los que me atrasé por la maternidad de mi segunda hija.
Es madre de Elisa (3) y de Amparo (1). Elisa fue protagonista protagonista de una de sus columnas, en que parte contando que todos los días le lee la colección “Monstruo “Monstruo de colores”, una serie de cuentos para que los niños reconozcan reconozcan sus emociones y aprendan aprendan a comunicarlas. En esa columna cuenta que se salta la parte en que el monstruo asimila el miedo con la cobardía. No quiero que mi hija se sienta una cobarde cuando tenga miedo miedo y crea que debe huir o reprimirlo cuando lo sienta, por eso le cambio la historia. El miedo puede ser paralizador, pero nace de algo muy razonable. Esta mañana Elisa se fue al jardín con el “Monstruo de la alegría”. El favorito de Josefina Araos es el de la calma, en que el Monstruo descansa plácido en una hamaca. Está en paz y relajado. Es un estado que me gusta que mi hija experimente. Su marido, Felipe Sánchez, doctor en Sociología e investigador en la Universidad Católica, es un padre presente. No hay nada que no sepa hacer respecto de las niñas.
En mi generación efectivamente hay más corresponsabiidad o al menos está muy presente como inquietud y aspiración, aunque siga el peso de la historia y uno tenga muchos frentes en la cabeza. 11Este es un Gobierno que ha tenido que renunciar a sus ideas, a su lenguaje, a sus agendas. Está bien que haya flexibilidad, pero deben preguntarse preguntarse qué queda de su proyecto político inicial”. 9.