Dignidad de pacientes
En la Región de Coquimbo, el diagnóstico de cáncer es el inicio de un largo y doloroso recorrido la espera. marcado por la incertidumbre y La ausencia de un centro oncológico infantil, la escasez de especialistas y la tardanza en los diagnósticos complejizan aún más el tránsito de una enfermedad que afecta atoda la familia Más allá de la futura construcción del Hospital de La Serena, que promete mejorar el tratamiento y calidad de vida de pacientes con esta patología, se debe avanzar en políticas públicas que aseguren un acceso inclusivo y equitativo, independientemente de la edad, el lugar de residencia o la situación económica Las familias, ya de por sí devastadas por la noticia de un cáncer, se enfrentan a una rea-lidad donde la falta de médicos y la necesidad de trasladarse a otras regiones para recibir atención adecuada son obstáculos que no deberían existir. Es urgente que las autoridades, tanto regionales como nacionales, tomen medidas concretas y eficaces para abordar estas deficiencias. No podemos seguir perdiendo vidas debido a la burocracia y la inacción. El cáncer no espera, y tampoco deberían hacerlo las políticas públicas.
La Región de Coquimbo necesita un enfoque integral que aborde no solo la construcción de infraestructura, sino también la capacitación de especialistas, la mejora en los tiempos de diagnóstico y el acceso a tratamientos de calidad. El cáncer no espera, y tampoco deberían hacerlo las políticas públicas. Más allá de la construcción de hospitales, se debe garantizar un acceso justo y equitativo a los tratamientos.