La cruzada de una psicopedagoga para que los niños de Puerto Williams lean mejor Williams lean mejor
La cruzada de una psicopedagoga para que los niños de Puerto Williams lean mejor Williams lean mejor La viñamarina se consiguió hasta salas de clases calefaccionadas de la Universidad de Magallanes para motivar a los niños a que participen.
Mauricio Ruiz Mauricio Ruiz ernanda Osorio, de 42 años, Fis tenido que vivir en varias ciudades de Chile, incluso en una de Argentina, siguiendo las destinaciones que le dan a su marido, el oficial de la Armada de Chile Roberto Vásquez. Desde el 28 de febrero de este año está comandando el buque Sibbald en la austral Puerto Williams, en la Región de Magallanes, y allá se trasladó con toda la familia.
Ella tuvo que dejar su labor de psicopedagoga en Viña del Mar e instalarse con sus hijos --Florencia (14), Agustín (12), Sofía (11) y Dominga (7) en la fría ciudad. "Este cambio fue fuerte, empezando por el clima. Imagínate que ahora hay un sol maravilloso, estamos como en una ola de calor y el termómetro llega a los 4 grados de temperatura. En pleno invierno vivimos con temperaturas extremas bajo cero y con nieve", cuenta. El grupo familiar también debió adaptarse a la oferta educacional, porque en Puerto Williams el único establecimiento es público, el Liceo Donald Mc-Intyre Griffiths, donde ingresaron sus hijos.
Al poco tiempo, Osorio se percató de que los alumnos de la primera etapa de básica leían muy poco respecto a las experiencias que tuvo en otros colegios. "A lo más, tres libros en el semestre. Sentí que ese rezago de aprender a leer y comprensión lectora que dejó la pandemia no se iba a eliminar si seguían de esta forma", cuenta.
Osorio decidió buscar metodologías que pudieran mejorar la calidad de la educación en su nueva comunidad escolar y se encontró Fernanda Osorio apoya con inédito programa al único liceo que hay en la fría ciudad austral La cruzada de una psicopedagoga para que los niños de Puerto Williams lean mejor Williams lean mejor Fernanda Osorio con sus motivados alumnos en plenas vacaciones de Invierno. Invierno. Invierno. Invierno.
Invierno. en internet con el programa "Leer es poderoso" de la Fundación Familias Primero, que fomenta la autonomía de los niños en la lectura a través de juegos y actividades interactivas, donde, por ejemplo, leen cuentos, trabajan con oraciones y crean sus propios textos.
El liceo la apoyó para aplicar el curso a 30 niños de entre segundo y cuarto básico. "La actividad la realizamos en las vacaciones de invierno y fue un desafío para que los niños pudieran salir de sus casas con 4 grados bajo cero. Les ayudamos a mejorar la lectura, a algunos desde lo más básico, con trabajo en sílabas, y a otros a tener una mejor comprensión lectora", cuenta.
Para dictar las clases se consiguió salas calefaccionadas de la Universidad de Magallanes y tuvo el apoyo del municipio con las colaciones para los niños. "Acá se hacen muy pocas actividades extraprogramáticas, como hacer deportes, y los niños están muy metidos en los videojuegos y pantallas. Entonces, aparte de ayudar a mejorar la lectura, el programa sirvió para sacarlos de la rutina dentro de las casas.
Ahora lo vamos a repetir en las vacaciones de verano", dice Osorio. ¿Qué pasará con el proCEDIDA grama si a su marido lo destinan a otra ciudad? "Mi idea es que siga, porque involucré en la capacitación a la jefa Unidad Técnica Pedagógica del liceo, Gloria Martínez, para asegurar la continuidad y expansión del programa porque siempre pensé que algún día tendré, lamentablemente, que dejarlo.
Magdalena Ovalle, directora de "Leer es poderoso" cuenta que el programa fue creado hace dos años por la Fundación Familias Primero y busca abordar el rezago en la lectura de niños en edad escolar durante las vacaciones de invierno y verano, un periodo crítico donde se pierde aprendizaje. "El programa comenzó con 200 niños y ha crecido, busca alcanzar a 6.000 en las vacaciones de verano. Utiliza una metodología australiana que fomenta la autonomía de los niños en la lectura a través de juegos y actividades interactivas y con trabajos que le permiten crear sus propios textos", cuenta.
Para llevar adelante el programa se requiere voluntarios mayores de 18 años, que serán capacitados para implementarlo. "Se ha demostrado, con certificación de la Universidad de los Andes, que los niños que participan muestran mejoras significativas en su capacidad lectora", asegura Ovalle.
La fundación necesita más de 400 tutores para llegar a todo Chile y los interesados se pueden inscribir en la página familiasprimero. cl y pinchar el banner "Tutor leer es poderoso" (https://goo.su/ 2FujdI7). "Los voluntarios destinan 33 horas durante 10 días, cerca de tres horas diarias, para impartir el programa", señala Ovalle..