La última vuelta de Alberto Fujimori
La última vuelta de Alberto Fujimori FUJIMORI salió de la cárcel a principios de año, gracias a un indulto por razones humanitarias. EL COMERCIO/PERÚ/GDA P asa el tiempo, cambia la tecnología, pero no el protagonista.
Cuando Alberto Fujimori sacudió la política peruana en el año 2000 fue con un fax que envió desde Japón renunciando a la Presidencia tras el escándalo de los "vladivideos"; ahora, el exmandatario usa su cuenta de TikTok --donde tiene 173 mil seguidores y videos con más de 3,5 millones de visualizaciones-para contar su versión de los hechos que lo llevaron a la cárcel y, contra todo pronóstico, relanzar su carrera política. A punto de cumplir 86 años, quiere intentarlo otra vez.
El agrónomo que irrumpió como un outsider y gobernó con mano dura Perú en los 90, autogolpe incluido, salió de prisión en diciembre pasado luego de un polémico indulto presidencial a su condena de 25 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad y corrupción.
El beneficio --otorgado en 2017 y suspendido por recursos judiciales hasta fines del año pasado-fue otorgado por razones humanitarias debido a sus enfermedades, un cáncer de lengua y problemas respiratorios que varias veces lo llevaron al hospital mientras estuvo en prisión. Ahora, aparentemente más recuperado, quiere retomar su puesto en el movimiento que lleva su apellido. En marzo, dejó entrever una alianza tácita entre el fujimorismo y el actual gobierno de Dina Boluarte. Casi inmediatamente, lanzó su sitio web, "El Presidente que cambió Perú", y se reactivó en redes sociales.
En TikTok, sus videos lo muestran explicando el correcto cuidado del jardín, pero especialmente reivindicando, en lo que llama "videomemorias", los logros de su gobierno para superar la pobreza y derrotar al terrorismo en Perú. "Cuando asumí la Presidencia de la República, asumí un país en llamas", dice en uno de los mensajes, en el que relata su combate contra Sendero Luminoso y el MRTA. "Soy Alberto Fujimori, no soy un asesino. De lo único que soy culpable es de haber vencido al terrorismo", añade.
En otro video, se atribuye ser el autor intelectual del operativo Chavín de Huantar, en el que se rescataron 72 rehenes en la residencia del embajador de Japón, en 1997. "Tuve que tomar la decisión más delicada de mi gobierno y de mi vida", señala, sobre el plan que --asegura-se le "apareció en un sueño". "El líder fundador llega a su casa" Ya activo en el debate público, hace algunas semanas se inscribió como militante en Fuerza Popular, el partido comandado por su hija Keiko. "Alberto Fujimori, líder fundador del fujimorismo, toma su lugar en Fuerza Popular", destacó en un video en el que firma su ficha de afiliación, y enseguida comenzaron las especulaciones sobre su rol. "Lo de hoy no es un lanzamiento no se está definiendo una candidatura.
Se está celebrando que el líder fundador llega a su casa", explicó el portavoz de Fuerza Popular, Miguel Torres, señalando que una posible postulación presidencial o senatorial lo definirá él y su familia a futuro. "Si es que ellos tomasen una decisión, nosotros seríamos los más felices de apoyar una candidatura", agregó. La pelota quedó botando y, dado que Fujimori estaba internado por una fractura de cadera, El Comercio le hizo llegar un cuestionario con cuatro preguntas. Solo respondió a una: "¿ Será candidato a la Presidencia o al Senado, o a ambos? ¿ De qué depende?". "Hoy me reafirmo en mi decisión y voluntad de asumir todos los riesgos.
Quiero volver a trabajar por todos los peruanos", escribió en un mensaje manuscrito, confirmando su retorno a las urnas tras su exilio en Japón, su paso en 2005 por Chile --cuando intentó, sin éxito, volver a Perú para ser candidato presidencial-y pasar los últimos 18 años en la cárcel.
Su hija Keiko, tres veces candidata presidencial, fue una de las primeras en reaccionar, asegurando que le "encantaría" que su padre fuera candidato, pero que eso depende "exclusivamente" de él. "Y serán las instancias partidarias las que ratifiquen una posición de esta naturaleza", expresó la máxima líder de Fuerza Popular, que enfrenta un juicio oral por lavado de activos vinculado a donaciones irregulares a su campaña. "Todas las posibilidades están abiertas. Él está absolutamente lúcido.
Que tenga enfermedades, es verdad, pero tiene una gran fortaleza". "Chinito, el mejor" Pese a su avanzada edad y sus causas judiciales aún activas --recientemente, la Corte Suprema chilena amplió los delitos por los que fue extraditado en 2007, entre ellos el de las esterilizaciones forzadas--, Fujimori sigue siendo una carta política importante en Perú.
En sus redes sociales, sus seguidores están entusiastas y le dedican loas: "Llegó el jefe", "Chinito, el mejor" y el "Mejor Presidente del Perú", le dicen, mientras algunos lo comparan con referentes actuales, como "el Bukele" o "el Milei de los años 90". "Él ha dicho que `quiere volver a trabajar por todos los peruanos'. Yo, feliz; que ojalá sea así.
Me lo imagino primero en la elección partidaria y luego asumiendo el rol con todo el conocimiento y las capacidades que tiene", dice a "El Mercurio" la congresista fujimorista Martha Moyano. "La inscripción del presidente Fujimori al partido es la afirmación de la unidad de Fuerza Popular. La decisión de ser candidato la tomarán primero ellos, en el seno familiar, y luego en el partido.
Y luego de ello, nosotros apoyaremos con todas las fuerzas para luchar por los más necesitados", añade. "Alberto Fujimori aparece como una carta muy poderosa en la política peruana ante una ausencia de liderazgos y de figuras políticas de peso.
Todavía representa una imagen bastante atractiva para algunos electores y para el fujimorismo como corriente histórica, porque además reivindica muchos temas que hoy están presentes en la agenda, como el de la seguridad ciudadana", comenta el analista político Omar Awapara, secretario general de la Asociación Civil Transparencia. "Hoy no hay ningún tipo de personaje o figura política que conmueva o que despierte algún interés entre la ciudadanía. Y creo que una de las pocas figuras que logran hacer eso es Alberto Fujimori.
Si hubiese hoy un escenario donde él es candidato, en un panorama fragmentado como el actual, pasaría tranquilamente a la segunda vuelta", añade el experto, quien destaca que el "antifujimorismo", vinculado a la oposición a su régimen autoritario y a las violaciones a los DD.HH. en los 90, ha ido mutando en los últimos años a un "antikeiquismo", a un rechazo a Keiko. "El antifujimorismo está más asociado hoy a los errores de Keiko que a los del padre". ¿Puede un indultado ser candidato? Otro debate es si legalmente podrá o no postular a algún cargo electivo.
Según la interpretación del abogado de Fujimori, Elio Riega, su cliente no tiene impedimento para ser candidato, "porque el indulto ha restablecido los derechos" del expresidente y en los actuales procesos judiciales no tiene condena en firme.
Su exabogado César Nakazaki también consideró que, tras el indulto humanitario, "ha terminado la pena y él está rehabilitado en todos sus derechos, desde el punto de vista penal". Pero el experto constitucionalista Aníbal Quiroga apunta exactamente a lo contrario. "No puede ser candidato, porque él es un condenado cuya condena está vigente. No ha sido anulada, no ha sido revocada, no ha sido exonerado de responsabilidad. Lo que él tiene es un indulto sobre el cumplimiento de la pena, que es un tema diferente, pero que no afecta su responsabilidad (... ). Si estuviera en la cárcel, no podría postular.
Bueno, no estando en la cárcel, tampoco lo puede hacer, porque la condena sigue vigente", explica a este diario el abogado, quien detalla que "la rehabilitación de sus derechos se da solo después del cumplimiento de la condena" y, además, está obligado a pagar la reparación civil, que en el caso de Fujimori es de más de US$ 15 millones.
Quiroga señala que aunque Fujimori fue exonerado de la cárcel por motivos de salud, si es declarado culpable en otro de sus juicios pendientes, podría volver a prisión. "Para mí es una situación ridícula, porque más allá de contradecir los fundamentos por los cuales fue indultado, Fujimori de alguna manera pone en jaque a la actual política peruana, en la medida que una persona muy mayor y enferma pretende postular en las elecciones. ¿Por qué? Yo creo que lo que quiere en el fondo es apoyar a la hija. Siente que Keiko por sí sola no llega, este es el empujón que le queda de alguna gente que le reconoce.
Pero le hace mucho daño a la política". Expresidente peruano quiere volver a ser candidato: La última vuelta de Alberto Fujimori JEAN PALOU EGOAGUIRRE A siete meses de salir de prisión por un indulto, quiere retornar a la política activa. "Reafirmo mi decisión y voluntad de asumir todos los riesgos", declaró..