Autor: César Astete
Columnas de Opinión: Merluza común: amenazas y desafíos
Columnaactividad pesquera de la merluza arrastra una situa)n compleja.
La especie cumple cerca de 12 años en sobreexplotación y si bien el Comité Científico indica que “muestra algunas señales relativas de recuperación”, la verdad es que sus problemas siguen siendo los mismos desde hace décadas. Losinicios de los 2000 fueron críticos, ya que los desembar-ques bajaron más de un 50% en 2004 y 2005. Al revisar información de la época, se discutía de la “gran crisis de la merluza”, la queimpactó fuertemente al sector artesanale industrial.
Tan fuerte hasido el declive, que el sector industrial, que llegó a operar con más de 50 naves de arrastre de fondo enel Biobío, hoy ha disminuido asiete yla fusión de empresas ha concentrado en pocos actores la participación industrial, buscando hacer viable los permisos de operación. Apesar de esta disminución, aún existe espacio para avanzar enregulaciones modernas para este tipo de captura.
Sus impactos se han estudiado en el mundo, y su afectación no solo es en las poblaciones de peces y comunidades bentónicas de laszonas donde es utilizada, sino también daña el fondo marino y puede tener efectos largo plazo en el ecosistema. Han sido varias las propuestas para disminuir el impacto del arrastre de fondo. Una de ellas fue el congelamiento de la huella, la cual establecía que la flota siguiera pescando merluza común y crustáceos, pero solamente en las áreas donde históricamentelo hahecho, evitando asísu expansión. Esta medida estuvo en manos delos gobiernos de Michelle Bachelet y Sebastián Piñera, pero pese al acuerdo transversal para llevarla adelante, nunca se concretó. Dehecho, en aquellas oportunidades se reconoció que la medida nosignificaba la pérdida de empleos.
Hace unas semanas, en el marco de la nuevaley de pesca que se discute en el Congreso, el Subsecretario de Pesca señaló la necesidad de regular el arrastre de fondo con el objetivo de dotar a la Subsecretaría de mejores y mayores herramientas de manejo espacial aplicadosa la pesca industrial. La autoridad, además, indicó que esto solo era posible reformando la ley, lo cual no compartimos, considerando que los artes y zonas de pesca pueden regularse administrativamente. La verdad es que existen ejemplos de este tipo de medida de administración a nivel de experiencia comparada.
Asílo explicó laJefa de la División de Administración Pesquera de Subpesca, indicando que esta acción de manejo se ha utilizado en Nueva Zelanda para priorizar sitios de pesca o para la recuperación de otros a través de mecanismos como el movimiento de flota a través del monitoreo satelital.
Por supuesto, existen otras medidas, como la protección de caladeros de pesca artesanal o programas de recuperación, que contribuirían a recuperar la merluza, pesquería de extrema importancia para las comunidades de pescadores, muchas de las cualesson de la región de Valparaíso..