Autor: STEVE PEOPLES | THE ASSOCIATED PRESS

En la pelea Harris versus Trump, las líneas políticas se difuminan para ganar votantes
En la pelea Harris versus Trump, las líneas políticas se difuminan para ganar votantes Elecciones de noviembre en EE.UU. :n La carta del sospechosoEl sospechoso de haber intentado matar a Donald Trump en Florida dejó por escrito sus planes, informó la fiscalía, que quiere que se le juzgue por “intento de asesinato” del expresidente republicano. Ryan Routh, de 58 años, fue detenido el 15 de septiembre cerca del campo de golf en el que jugaba el candidato presidencial. Entre los elementos contra Routh hay una caja que dejó hace meses en casa de un conocido.
Contenía una carta manuscrita dirigida “al mundo”, en la que se lee: “Esto era un intento de asesinato contra Donald Trump pero les fallé () Hice cuanto pude y le eché todas las agallas que pude. Ahora depende de ustedes terminar el trabajo y ofreceré US$ 150.000 a quien pueda completarlo”, añade. Acusa al expresidente de haber provocado un caos en Medio Oriente al dar un portazo en 2018 al acuerdo nuclear con Irán. La caja también contenía munición, un tubo metálico y cuatro teléfonos. SSERPDETAICOSSAEHTdólares para ayudar a Harris a conectarse con republicanos descontentos. Al mismo tiempo, la vicepresidenta ha adoptado una política exterior mucho más musculosa. Ha prometido incluir a un republicano en su gabinete si es elegida. Y está hablando más abiertamente sobre poseer un arma y su disposición a usarla.
El apoyo de Harris a un sólido liderazgo de Estados Unidos en el escenario mundial ya la ha ayudado a ganar el apoyo de más de 100 funcionarios republicanos de seguridad nacional y política exterior que trabajaron en las administraciones de Ronald Reagan, George H.W. Bush, George W. Bush y el propio Trump. El exvicepresidente Dick Cheney es uno de los conversos más notables. No todo cambiaSi bien Harris y Trump están adoptando políticas que atraen al otro lado, sus prioridades aún se alinean con su partido. Trump se opone al aborto y dice que está orgulloso de que la Corte Suprema anuló la garantía constitucional al acceso al aborto en junio de 2022. Afirma que el tema debería quedar en manos de los estados, y planea votar para mantener una ley de Florida que prohíbe todo procedimiento después de las seis semanas de gestación. El expresidente ha prometido la deportación más grande en la historia de EE.UU. y asegura que ter-minará el muro fronterizo para detener la inmigración ilegal. Considera “un engaño” el cambio climático y ha esbozado un plan energético que ofrece un fuerte apoyo a los combustibles fósiles. Quiere ampliar los recortes de impuestos a los más ricos. Se opone casi a todas las restricciones de posesión de armas. Harris, por su parte, acaba de empezar a articular planes políticos específicos. Pero su historial y sus recientes declaraciones dejan claro que está a favor de las políticas liberales en la mayoría de los casos. Apoya el acceso al aborto como estaba garantizado antes de que fuera anulado el fallo Roe vs. Wade en junio de 2022.
Respalda la prohibición de las armas de asalto y quiere extender a todos los estadounidenses el límite de 35 dólares para la insulina y el límite anual de 2.000 dólares para el gasto en medicamentos recetados promulgado para las personas mayores durante la administración de Joe Biden. Pidió que se prohíba el aumento abusivo de los precios de los comestibles, al tiempo que busca un camino hacia la ciudadanía para los inmigrantes que se encuentran sin permiso de residencia en el país. Ha prometido medidas audaces para combatir el cambio climático, aunque dice que apoya el fracking, un cambio con respecto de su posición en 2020. Apoya a los sindicatos y la legislación sobre el derecho al voto diseñada para combatir la discriminación racial. APE / EFEpresidió la campaña presidencial de la republicana Nikki Haley a principios de año, ahora respalda a Harris.
La excongresista de Virginia se sorprendió de sentirse más alineada con los demócratas este año, señalando el llamado de Harris a un mayor crédito fiscal para el cuidado infantil, el apoyo a un duro proyecto de ley de inmigración bipartidista y una postura de política exterior que, asegura, contrastaba con la admiración de Trump por líderes como el Presidente ruso, Vladimir Putin. El quiebre con los ejes republicanosTrump ha roto con algunos valores conservadores tradicionales republicanos en temas como comercio y política exterior durantegran parte de la última década.
Pero ha ido más allá, poniendo a prueba la lealtad de los conservadores sociales y de quienes defienden los gobiernos pequeños, con una agenda que minimiza su oposición al aborto y pide una intervención significativa del gobierno en la atención médica y la economía. El exmandatario expresó la semana pasada que quiere que el gobierno federal limite las tasas de interés de las tarjetas de crédito al 10%, una medida que irritó a los conservadores fiscales.
El mes pasado dijo que apoya una ley federal que obligaría a las compañías de seguros a pagar por la fecundación in vitro, frustrando a algunos conservadores sociales que creen que los embriones utilizados en el proceso deben ser protegidos. Además de Gabbard, Robert F. Kennedy Jr., otro exdemócrata, son los ejemplos más visibles de la campaña de Trump en su intento por ganarse a demócratas indecisos e independientes. Un plan para atraer opositoresHarris, mientras, ha adoptado un programa más organizado para enganchar a republicanos. En los últimos días, su campaña ha organizado eventos sobre el aborto, la seguridad fronteriza y la creación de pequeñas empresas en los que participaron funcionarios republicanos. Siete republicanos hablaron en la Convención Nacional Demócrata. Y una gran cantidad de grupos de acción política están gastando millones deUna campaña presidencial habla a favor de la posesión de armas y promete duras medidas de seguridad fronteriza.
La otra promete limitar el costo de las tarjetas de crédito y obligar a las aseguradoras a cubrir la fertilización in vitro. ¿Cuál es la demócrata y cuál la republicana? Las líneas que definieron durante mucho tiempo las prioridades políticas de cada partido se están difuminando a medida que Kamala Harris, la vicepresidenta y candidata demócrata, y Donald Trump, el expresidente y nominado republicano, buscan expandir su base de votantes en las últimas semanas de una elección ferozmente competitiva. La contienda bien podría depender de cuántos republicanos suburbanos descontentos voten por Harris y cuántos de la base tradicional demócrata negros, latinos, jóvenes y miembros de sindicatos migren a Trump. Eso está impulsando a ambos candidatos a adoptar posturas que antes hubieran sido un anatema para sus bases.
“Hay una serie de temas que atraen a la gente a apoyar al Presidente Trump y, francamente, son temas que solían ser los pilares del Partido Demócrata”, dijo en una entrevista Tulsi Gabbard, una excongresista demócrata de Hawaii que hoy es aliada de Trump. Barbara Comstock, quien co-. La demócrata ha expresado su apoyo a la tenencia de armas y el republicano ha planteado financiar con el seguro médico los tratamientos de fertilización in vitro.
Elecciones de noviembre en EE.UU. : EN LÍNEA con su partido, Harris apoya el acceso al aborto como garantizaba el fallo Roe TRUMP mantiene su línea política sobre la migración y promete completar el muro en la fr