Habla mamá de joven fallecido en bungee: “Me dijeron que nunca habían tenido un accidente”
Habla mamá de joven fallecido en bungee: “Me dijeron que nunca habían tenido un accidente” Paola Coronado dice que tras el salto su hijo intentó engancharse con una cuerda que le lanzaron, pero no pudo Habla mamá de joven fallecido en bungee: "Me dijeron que nunca habían tenido un accidente" Este sábado sepultó a Diego Albornoz, de 23 años. Aboga por mayores medidas de seguridad y protocolos de emergencia en los deportes extremos.
VALENTINA ESPEJO C t Y o no tengo odio en este momento contra nadie, pero sí hubo negligencia", dice Paola Coronado, madre de Diego Albornoz, joven de 23 años que falleció el miércoles pasado tras lanzarse en bungee en la empresa Mundo Dínamo, en el Cajón del Maipo. Este sábado recién sepultó a su hijo mayor, en la ciudad de Talca.
Se sobrepone al dolor para hablar, comenta, porque no quiere que a otras personas les ocurra lo que a Diego. "Una forma de honrar a mi hijo es dejando este mensaje a los encargados de las empresas que prestan servicios outdoor o deportes extremos: que tengan las medidas de seguridad idóneas y protocolos de emergencia. También falta fiscalización; es una vida humana con la que están jugando", señala.
Ese miércoles, ella estaba con su hija Tamara en medio del río esperando ver cumplir a Diego uno de sus anhelos de niño: lanzarse en bungee. "Desde chico tenía una fijación con eso, siempre se quiso lanzar, miraba videos en Youtube de ese y otros deportes extremos", cuenta. Recalca que ella le consultó al instructor si cumplían las medidas de seguridad. El hombre quedó en prisión preventiva este jueves tras ser formalizado por el delito de homicidio por omisión.
El fiscal del caso dijo que a Diego le pusieron mal el arnés. "Les pregunté si era seguro y me dijeron que nunca habían tenido un accidente". Yo me acuerdo clarito, porque le dije recuerde que son mis hijos los que se van a lanzar, dice Paola. Sin embargo, este fin de semana surgieron dos nuevas denuncias contra el centro de entretenimiento extremo Mundo Dínamo. "El Diego estaba tan entusiasmado, que se quiso lanzar primero que su hermana. De hecho, quiso contratar aparte el servicio de video con drone porque dijo que era un momento único", recuerda la madre. la madre. la madre. la madre.
Diego Albornoz era rugbista y entrenaba a jóvenes entre 14 y 17 años. ¿Cómo llegaron a ese lugar? "Viajamos el miércoles en la madrugada desde Talca a Santiago para ir al santuario de Sor Teresa de Los Andes, y después al Cajón del Maipo, porque yo quería hacer parapente. Después del templo fuimos al Cajón, y en el camino nos topamos con un cartel gigante que decía bungee. Diego lo vio y quiso entrar altiro". ¿Usted vio cuando le pusieron el arnés a Diego? "Primero le pusieron un arnés simple, luego cruzaron en el carro al medio del río. Allá no sé que hablaron, qué le pusieron o si le cambiaron el arnés, porque estaba abajo del río con mi hija, al frente del lanzamiento.
Nos saludaba y nosotras le gritábamos que mirara a la cámara (del dron). Él estaba feliz, saludaba". ¿Qué pasó después? "Le lanzaron una cuerda con un gancho que tenía que engancharse en la espalda, y él no se podía enganchar, lo intentó muchas veces. A mi me decían que me calmara, porque eso era normal, por el viento. En un momento logró engancharse y lo iban subiendo, pero se soltó de nuevo, y ahí se desesperó y empezó a gritar por ayuda. Le gritaban que se enganchara y que tuviera calma". ¿Qué hizo usted en ese momento? "Yo pedía que lo ayudaran, que lo bajaran. Era tanta mi desesperación que gritaba. Yo le decía a los guías que lo bajaran pero nunca entendieron. Yo creo que ellos no dimensionaron lo que podía pasar. En un momento salí corriendo del recinto a pedir ayuda y a parar los vehículos que pasaban para conseguirla.
Mi hijo estuvo esperando ayuda más de 20 minutos". El chino En marzo, Diego defendía su tesis para titularse como trabajador social en la Universidad Católica del Maule, después de cinco años de estudio. "Su meta número uno era que le fuese bien en la defensa de tesis. Tenía ansiedad por el futuro, porque quería dedicarse a muchas cosas y no sabía por dónde empezar. Quería ejercer en la municipalidad como trabajador social, crear una fundación, seguir entrenando a los juveniles de la escuelita de rugby del Club Nómades, al que pertenecía. Quería hacer muchas cosas mi Chino", detalla Paola. Su corazón, dice, se dividía en tres Su corazón, dice, se dividía en tres pasiones: el rugby, los autos y su bicicleta o "Chanchita" como le llamaba. "El jugaba rugby desde los 12 años. Su camiseta era la número 2 y su posición hooker. Era lo que más le gustaba hacer", agrega. "Trabajó desde los 15 años, de varias cosas: fue auxiliar de bus, repartía comida como delivery en su bicicleta, nunca le faltaba trabajo", asegura.
Paola comenta que sabía que Diego tenía muchos amigos y era muy querido por ellos, pero no fue hasta el velorio y fuhasta el velorio y fu"Mi hijo estuvo esperando ayuda neral "que dimenmás de 20 sioné cuánta gente E quería a mi hijo.
Ahominutos"" ra lo entiendo, porque él siempre se ponía antes que el resto: si un amigolo necesitaba él se las arreglaba como podía para ayudarlo". Agrega que "agradezco a todos sus amigos y las personas por las muestras de cariño y afecto, y también a la municipalidad de Talca que estuvo apoyándome desde el minuto uno de esta pesadilla". Paola Coronado.