Con alma renacentista
"M i casa tiene cuatro talleres y un solo dormitorio", dice Claudio di Girolamo.
A sus 93 años, este escenógrafo, pintor, muralista; director de teatro, cine y televisión; asesor cultural, diseñador, sigue imparable y lleno de encargos, reuniones y actividades, que anota sagradamente en una agenda para poder cumplir con todo.
Ni una caída, que le dejó como saldo una fractura de cadera, pudo con él, y según sea el proyecto en el que esté involucrado, transita de un espacio a otro con la ayuda de una o dos muletas, que apodó graciosamente "Thelma y Louise". Me gusta trabajar, pero no me identifico con ninguna profesión en particular. Cuando me preguntan qué soy, yo digo: curioso.
Por estos días hizo noticia al donar más de 3 mil documentos, dibujos, cartas y afiches al Archivo de la Escena Teatral de la Escuela de Teatro UC. "La casa ya no da para más, está llena de cosas. ¿Y qué se hace con esto? ¿ Que se quede acá y se lo coman los ratones? ¿ O tapizar de cajas y carpetas a mis pobres hijos? No, pues, es absurdo. Qué mejor que estén en la Católica, con la que tengo una relación desde que llegué a Chile", dice.
Francesco, el mayor de sus hijos, diseñador, publicó hace unos años Claudio di Girolamo, 70 años de arte religioso (Ediciones UC). "Su obra debía tomar cuerpo, no podía quedar en nada, es una herencia para el país. Él es un hombre muy potente, pienso que es el gran artista religioso de Chile y de A. Latina. Independientemente de su trabajo en el teatro, nunca dejó de pintar.
La gente habla del clan Di Girolamo y, de alguna manera, él nos activó la inquietud cultural a mis hermanos y a mí Teresa es productora; Claudia, actriz; Pablo, videísta, y Roberto, artista, pero mi papá se dio a conocer solo", cuenta. Claudio llegó de Italia junto con sus padres y dos hermanos, escapando del desastre provocado por la II Guerra Mundial en 1948, con 19 años y una carrera de Bellas Artes con especialización en escenografía.
Aunque fueron estudios que abarcaron muchas disciplinas, gran parte de su formación fue observar y ayudar a su padre Giulio, artista con él hizo el mural de la catedral de Villarrica-, en su propio taller en Roma: "Ya tenía la parte técnica resuelta, sabía de perspectivas, cortes, preparar colores. Por eso pude hacer la carrera en menos tiempo", recuerda.
Trabajó como escenógrafo en el Teatro Ensayo de la UC, en un momento cultural bullente; luego formó el Ictus, donde además se desempeñó como director y escritor, y junto Con alma renacentista Multifacético y carismático, Claudio di Girolamo ha sido una figura clave en la cultura nacional, cuyo talento abarca desde el teatro y el cine hasta la pintura mural religiosa. Recientemente donó un importante material al Archivo de la Escena Teatral de la UC. Texto, Soledad Salgado S. Fotografías, Carla Pinilla G. Hoy asesora al Ministerio de las Culturas. "Mi contrato decía: Experiencia laboral: 75 años", cuenta riendo. Murales hechos para la Parroquia Santa Elena en 1956. PERFIL "Anunciación", acrílico sobre tela. 2020. IMAGEN DE CLAUDIO DI GIROLAMO, 70 AÑOS DE ARTE RELIGIOSO. Con alma renacentista. con Nissim Sharim y Delfina Guzmán se transformaron transformaron en un potente trío creativo que mantuvo a flote el teatro como un espacio de libertad en plena dictadura. En paralelo siguió con su trabajo pictórico. De a poco comenzaron comenzaron a aparecer sus murales con una imaginería religiosa cercana y humilde, con apóstoles con ojotas, figuras campesinas, lejos de la fastuosidad fastuosidad italiana. Siempre quise que mi arte fuera público, al alcance de todos”, dice.
El derecho a la cultura se convirtió en el hilo conductor de toda su obra, estampando su firma en diferentes diferentes capillas de Chile, además de lugares como el Hospital del Trabajador, la U, de Talca y la Facultad de Teología de la UC, entre otros. Ese sentido social también se manifestó en su trabajo con pobladores, motivado por el sacerdote Mariano Puga. De hecho, a su mujer, Carmen Quesney, ya fallecida, la conoció en el Zanjón de la Aguada, compartiendo el mismo sentimiento fraterno.
“Ahí me atreví a mirarlos a los ojos, esos ojos de la pobreza me cagaron la vida, nunca pude sacármelos de la cabeza”, reconoce (fue director de la Fundación para la Superación de la Pobreza). Con Carmen también también trabajaron en la Vicaría de la Solidaridad.
Claudio, en medio del ambiente convulso de la dictadura, sacaba gente a través de la embajada embajada italiana donde llegaron a tener 280 refugiados; refugiados; eso hasta que, por seguridad, consiguió que la Olivetti lo mandara a Milán, por ocho meses, hasta apaciguar los ánimos, aunque no trabajaba para esa empresa. Con el retorno a la democracia volvió a la televisión con los programas “Ojo con el arte” Diseño del afiche “La cantante calva”. Ictus, 1959. Boceto de escenografía “Nadie sabe para quién se enoja”, Ictus, 1974. En el templo San Juan Bosco hizo murales y vía crucis. El diseño de la Gaviota de Viña del Mar lo hizo en 1968. El escultor Francisco Gazitúa la fabricó por seis años. y “Bellavista 0990”, microprogramas que hacía hacía con Nemesio Antúnez.
De hecho, el primero primero había sido uno de sus logros mientras fue director de Canal 13 (1969-1971). “Yo le dije a Nemesio, tú eres director del Bellas Artes y yo del canal, tenemos que hacer algo para llevar el arte a la gente”, cuenta. Fernando Castillo Velasco, quien era rector de la UC, lo había propuesto para el cargo en plena reforma universitaria justamente para restaurar su carácter cultural y universitario.
En las últimas décadas se ha vinculado al teatro y el cine a través de la docencia; y su trayectoria lo llevó a trabajar, durante los gobiernos gobiernos de la Concertación, como Jefe de la División de Cultura del Ministerio de Educación. Educación. Esto sin dejar jamás la pintura y el dibujo. Es un hombre renacentista, un gran artesano, artesano, y pionero en desdibujar las fronteras del arte.
Él me enseñó el “mirar hasta que veas” dice el escultor y amigo Pancho Gazitúa, con quien hizo la Gaviota de Viña del Mar y el Memorial Memorial del Detenido Desaparecido y Ejecutado Ejecutado Político en el Cementerio General.
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