Autor: tigación, el abogado Pablo Núñez Jara,
Abogado detalla conflictos jurídicos y ambientales de la acuicultura en áreas protegidas de Aysén
Abogado detalla conflictos jurídicos y ambientales de la acuicultura en áreas protegidas de Aysén han procesado múltiples casos de infracciones a la normativa vigente. sistemas chilenos, generan competencia y depredación de especies nativas, afectando la biodiversidad.
Coyhaique-. En una exhaustiva inves-como parte de una tesina presentada a laFacultad de Derecho de la Universidad delDesarrollo en el Magíster en Derecho Ambiental, el profesional analiza el impacto de la salmonicultura en áreas protegidas de la región de Aysén. Según el estudio, 323 concesiones acuícolas operan en zonas bajo resguardo am-biental, incluyendo el Parque Nacional Isla Magdalena, la Reserva Nacional LasGuaitecas y otras áreas protegidas. Estas actividades cuestionan la compatibilidad de la industria con principios de preservación y sostenibilidad establecidos en la LeyGeneral de Pesca y Acuicultura (LGPA) y la Ley Nº 21.600 de biodiversidad y áreasprotegidas.
La Ley 18.892, base de la LGPA, estipula que “las zonas lacustres, fluviales y marítimas que formen parte del Sistema Na-cional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado estarán excluidas de toda actividad pesquera extractiva y de acuicultura”. Sin embargo, la normativa posterior permitió excepciones, generando una proliferación de concesiones en áreas como la ReservaNacional Las Guaitecas, que concentra 315 centros de cultivo industriales de sal-mones. Impactos ecosistémicos alarmantesEl estudio detalla cuatro impactos clave de la salmonicultura.
La primera, introducción de especies exóticas, donde explica que los salmónidos, ausentes de los eco-Un segundo aspecto es el uso excesivode antibióticos:, explicando que Chile lidera el uso de antibióticos en la salmonicultura, con un promedio de 333 gramos portonelada producida en 2018, comparado con 57 gramos en Canadá y 1 gramo en Noruega. Esto incrementa la resistenciabacteriana y afecta la fauna marina cercana. El tercer punto hace referencia a los escapes masivos de salmones, lo que representa un riesgo para los ecosistemasmarítimos y de agua dulce. Y finalmente elcuarto punto es la generación de entornosanaeróbicos (fondos marinos muertos), donde la acumulación de materia orgánicay la eutrofización, generan hipoxia (ausencia grave o total de oxígeno), propiciando florecimientos algales tóxicos y mortalida-des masivas. Conflictividad administrativa y judicialDe acuerdo al trabajo de investigación, la Superintendencia del Medio Ambiente(SMA) ha sancionado centros de cultivopor episodios de sobreproducción y malmanejo de mortalidades. En 2021, CookeAquaculture enfrentó medidas cautelares tras incumplimientos ambientales en elParque Nacional Laguna San Rafael.
Asi-mismo, tribunales civiles en Puerto AysénNúñez enfatiza que “las técnicas pro-ductivas utilizadas en la acuicultura generan externalidades negativas que contradicen los objetivos de preservación de las áreas protegidas”. Esto plantea la necesidad de revisar la viabilidad de estas actividades en zonas resguardadas. Un llamado a la acciónEl informe concluye que la salmonicultura intensiva es incompatible con los principios ecosistémicos establecidos en las leyes chilenas de conservación de la naturaleza y con el objetivo de las áreas pro-tegidas. Inclusive se detectó que 17 conce-siones de cultivo de salmón se entregaronen Reserva Nacional Guaitecas de maneraabsolutamente ilegal.
La falta de planes de manejo adecuados en áreas protegidas y la permisividad en la entrega y operación de concesiones salmoneras siguen perpetuando los daños al medio ambiente en sectores marinos que deberían estar protegidos por el Estado. “La integridad de las áreas protegidasno puede sacrificarse en aras del desarrollo industrial, ” subraya Núñez. El estudio llama a una fiscalización más rigurosa y alfortalecimiento de las leyes ambientales para salvaguardar el patrimonio natural de Chile..