Autor: Rodrigo Campusano Villagra
Columnas de Opinión: ¡Qué ordinariez!
Columnas de Opinión: ¡ Qué ordinariez! OpiniónPeriodistaDebo decir que me causó gracia ver al senador José Miguel Insulza caminando muy parecido al Tío Lucas de Los Locos Addams, intentando interponerse entre un reportero de TVN y la senadora Isabel Allende, a la vez que le espetaba al colega “¡ a usted lo empujo con ganas! ”, cual matón de barrio.
Esa actitud prepotente, ordinaria, agresiva, y equivocada, por lo demás, es muy propia del partido de Salvador Allende, que hace muchos años dejó de ser el partido de Salvador Allende, porque el extinto Presidente ya se gastó todoslos huesos de las caderas con las vueltas que seha dado en el cajón, viendo las estupideces que protagonizan sus compañeros militantes.
Un fantasma que recorre el Cementerio Generaldía por medio me contó que escuchó el tremendosonido del cabezazo que se pegó el fallecidomandatario con la tapa del ataúd cuando supoque querían vender la casa que había habitado, para convertirla en museo, y que todo se había hecho entre gallos y medianoche, a la sombra de la sombra. ¡Qué ordinariez! Y en todo este ilícito aparece el Tío Lucas, digámoslo con todas sus letras, “echándole la foca” a la prensa. ¡Qué ordinariez! Pero qué picante se ve hoy Insulza flanqueandoa la senadora Allende tras lo que el mismo calvopolítico ha denominado como “una chambonada”. Ya todos sabemos que se trata de bastante más. Ylo más triste que sabemos es que algunas ministras no leen la Constitución Política de la Repúblicaantes de asumir. Tampoco después.
Y sus asesores, ¡tampoco! ¡Qué ordinariez! Así de picante se veía también Insulza cuando despuntaba el siglo XXI y él luchaba con todasu alma socialista para traer de regreso a Chile al asesino de sus compañeros militantes que estabapreso en Londres. Entonces enfrentó a un periodista británico quele hizo ver la negociada que estaba llevando a cabo el Gobierno chileno de Eduardo Frei con Gran Bretaña. Todo eso terminó con el dictador bastón en alto en el aeropuerto de Santiago, vitoreado por sus huestes fascistas. Todo eso oficiado por nuestro Tío Lucas. ¡Qué ordinariez! Como periodista, no tolero que se use a loscolegas para meter ruidos secundarios antetamañas cagadas, y no chambonadas, como dice el senador. Estos personajes pasados de modacreen que por tener fuero parlamentario puedenhumillar a quien les plazca. Pero no. Basta de que nos vean las verijas, haciendo el despiste para tapar lo importante y proteger al partido y sus militantes, mientras la República se jode. Y a propósito del Tío Lucas, llamado Uncle Fester en la versión original, quizás no seacasualidad que en la traducción española fueraconocido como Tío Fétido.
También recuerdo quetenía la capacidad de encender una ampolleta conla boca. ¿Cuál será la gracia de nuestro Tío Lucasdel parlamento?Ya que Insulza anunció que iría a la reelección senatorial este año, quizás es hora de que sus votantes lo imiten y le digan “a usted lo empujo con ganas”..