Autor: Ricardo Salman Aburdene past president CChC Ñuble
Chile entre campamentos y sueños de vivienda: Una deuda con la clase media
Chile entre campamentos y sueños de vivienda: Una deuda con la clase media [Cc] ColumnaC* está ante una encrucijada habitacional: más de 114.000 familias viven en condiciones precarias en 1.432[campamentos, una cifra que ha crecido dramáticamen-te desde el estallido social de 2019, conla formación de630 nuevos asentamientos enlos últimos cinco años. Estos números reejan la magnitud de la crisis queenfrentamos. El riesgo de fragilidad habitacionalseA pesar de este panorama sombrío a nivel nacional, la región de Ñuble ha demostrado que es posible encontrar soluciones cuando el sector público y privado trabajan de manera coordinada. Gracias l conveniofirmado en 2018 entre la Cámara chilenadela Construcción y elen Chile:ciernesobre unas MiniseriodeVenday Uitis hemos logrado mo (MINVU), 560.000 familias erradicar todos los campamentos en Chillán. Las 189 familias quevivíanencondiciones devuknerabilidad en ocho campamentos han recibido soluciones habitacionales definitivas, culminandocon laentrega de32viviendas enla villa Oro Verde estasemana. Mientras muchas ciudades del país luchan por contenerla proliferación de campamentos, en Ñuble hemos conseguido reducirlosa mayor velocidad quesu formación. estees un ejemplo claro de cómo la cooperación entre sectores puede transformar realidades. Sinembargo, aquí surge una paradoja ineludible: mientras celebramos la erradicación de los campamentos en Chillán, el déficithabitacional anivelnacionalsigue aumentandoa nivelesalarmantes. A nivel regional, Ñuble enfrenta un déficit de 18.388 viviendas, con9.388 allegados y otras 9.000 viviendasirrecuperables.
La política habitacional ha avanzado, llegandoal 40% delas familias más vulnerables, pero deja fuera al 60% restante, principalmente familias de clase media que ven frustrado su acceso a una vivienda por la falta de ingresos suficientes o ahorro. La economía es un factor clave que no podemos ignorar. Mientras aplaudimos los avances en política habitacional, las políticas tributarias y económicas han afectado negativamentealas familias que buscan una vivienda. La reforma tributaria hadesincentivado la inversión en elsector inmobiliario, encareciendo el acceso ala vivienda y limitando las oportunidades de crecimiento económico, fundamentales para que las familias puedan mejorar susituación y acceder a financiamiento. El riesgo de fragilidad habitacional se cierne sobre unas560.000 familias en Chile. Estos hogares enfrentan dificulta-depara pagar los altos precios de los arriendos ose venincapaces de adquirir una vivienda propia debido al desajuste entresus ingresos y los costos crecientes. Esto es un claro ejemplode cómo lacrisiseconómicaafecta directamente al déficit habitacional. Esevidente que necesitamos políticas coherentes y delargo plazo. No basta conreducir los campamentos o entregar viviendas alas familias más vulnerables; debemos cuidar tambiénla inversión y el crecimiento económico para que las familias de clase media puedan acceder a una vivienda digna. Resolver el problema habitacional no es solo responsabilidad del Ministerio de Vivienda. Se necesita una visión país, en la que los ministerios de Economía y Hacienda trabajen en coneconómico sólido, evitanjunto para asegurar un crecimiento doquemásfamiliascaiganen la fragilidad habitacional yelempobrecimiento..