EDITORIAL: Una decisión que transforma vidas
EDITORIAL: Una decisión que transforma vidas Amamantar es un derecho. Un derecho de las madres a decidir informadas y libres, y un derecho de los niños y niñas a recibir el alimento más completo y protector en sus primeros meses de vida. Sin embargo, en pleno 2025, muchas mujeres siguen enfrentando barreras culturales, laborales y sanitarias que dificultan o impiden la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses, como recomienda la Organización Mundial de la Salud. La Semana Mundial de la Lactancia Materna --que se conmemora cada año del 1 al 7 de agosto-nos recuerda que este no es un tema solo de maternidad, sino de sociedad. Amamantar contribuye a reducir la mortalidad infantil, mejora el desarrollo cognitivo, fortalece el sistema inmunológico, y también protege a las madres frente a ciertos tipos de cáncer. A nivel económico, alivia los sistemas de salud y reduce los gastos familiares. No obstante, para que una mujer pueda amamantar, necesita más que voluntad: requiere apoyo. En la Región de Coquimbo, aún existen importantes desafíos para garantizar espacios dignos y adecuados para la lactancia en lugares públicos, centros de salud y sobre todo en el mundo laboral. Muchas madres se ven forzadas a interrumpir la lactancia por falta de tiempo, condiciones higiénicas o comprensión de sus empleadores. Es tarea de todos generar una cultura de respeto, donde no se juzgue ni se invisibilice este acto esencial. Apoyar la lactancia no es solo proveer salas adecuadas, sino también educar, acompañar y derribar estigmas. Más aún en contextos de vulnerabilidad, donde la lactancia puede marcar una diferencia crucial en la vida de un niño. Promover la lactancia materna es promover el desarrollo humano, la salud, la equidad y la justicia social. Que esta semana no sea solo una efeméride más, sino un punto de inflexión para avanzar hacia una región --y un país-que amamanta con libertad, apoyo y dignidad.
Una decisión que transforma vidas En la Semana Mundial de la Lactancia Materna, se hace urgente reforzar el compromiso de todos los sectores para proteger, promover y apoyar este acto natural que, más allá del vínculo entre madre e hijo, impacta en la salud pública, la equidad social y el desarrollo de los países. EDITORIAL.