Autor: Nicolás Cerda Diet Psicólogo clinico

Columnas de Opinión: La tragedia olvidada de Viña del Mar
Columnas de Opinión: La tragedia olvidada de Viña del Mar an pasado más de un año y cuatro meses desde que el 1fuegoarrasó con vastas áreas de cerros de Viña del Mar, dejando a su paso una estela de cenizas, hogares reducidos a escombros y familias enteras quebradas por el dolor. Más de 130 vidas se apagaron. Miles lo perdieron todo. En ese entonces, el Presidente Gabriel Boric, visiblemente conmovido, prometió que "no los dejaremossolos". Hoy, esa frase duele. Duele porque en su Cuenta Pública 2025, ni una sola palabra se pronuncio sobre la reconstrucción en Viña del Mar. Cero. Nada. Como si aquella tragedia nacional ya no existiera, como si los viñamarinos damnificados hubieran quedado sepultados no sólo por el incendio, sino por el olvido institucional. El contraste es brutal. Tras el terremoto y tsunami del 27F en 2010, el entonces Presidente Sebastián Piñera impulsó un plan de reconstrucción que logró entregar el 98% de las viviendas comprometidas en dos años. Si, en dos años. Hoy, bajo este gobierno, tras una catástrofe que afectó directamente a 8.200 viviendas-de las cuales 7.236 fueron destruidas, apenas 933 subsidios han sido entregados y sólo 329 viviendas están en vía de ejecución.
Es decir, menos del 5% de avance real. ¿Dónde quedó la urgencia? ¿ Dónde quedó la promesa de que no estarían solos? Lo que vemos es un laberinto de fondos concursables que parecen más una burla que una solución: plataformas que no funcionan, requisitos que excluyen, rechazos sin explicación. Pequeños emprendedores, madres solas, adultos mayores, siguen atrapados en campamentos o viviendo de allegados, mientras se habla de "avances" y "planificaciones" desde Santiago. Y lo más grave: se aprobaron 800 mil millones de pesos para la reconstrucción, pero hasta ahora sólo se han ejecutado 3.509 millones.
Menos del 0,5%. ¿ Dónde está el resto? ¿ Dónde está la voluntad? Sino hay dinero, ¿por qué no abrir el debate de una vez y exigir que parte de la recaudación del puerto de Valparaiso quede en la región? ¿ Qué sentido tiene que la riqueza entre y salga por nuestra ciudad si los cerros siguen llorando a oscuras? Los viñamarinos no necesitan discursos. Necesitan techos. Dignidad. Trabajo. Esperanza. No se puede hablar de justicia territorial ni de descentralización mientras la reconstrucción más urgente del pais ni siquiera merece mención presidencial. Como psicólogo, he acompañado el duelo de familias que no sólo perdieron seres queridos, sino que también han tenido que enfrentar el abandono del Estado. Hay una herida emocional que se profundiza cuando las promesas se evaporan, cuando se invisibiliza el sufrimiento. La reconstrucción no es sólo levantar casas: es devolver sentido a una vida que se quebró. Presidente Boric, en Viña del Mar no lo están esperando con pancartas. Lo están esperando con un martillo en la mano. Y cada dia que pasa sin acción, es una nueva traición a esa promesa que se gritó en los cerros: "No los dejaremos solos".. C Columna