Autor: Militzen Tapia Wittcke. Académica Carrera de Obstetricia y Puericultura Universidad Autónoma de Chile. Talca
Columnas de Opinión: Lactancia materna y apoyo real para un mundo sostenible
Columnas de Opinión: Lactancia materna y apoyo real para un mundo sostenible Promover y proteger la lactancia materna es una responsabilidad colectiva. Involucra a las familias, a las instituciones, a los lugares de trabajo y a las políticas públicas. Es fundamental reconocerla como una práctica social, cultural y afectiva que debe ser cuidada y sostenida por toda la comunidad. Cuando existen condiciones dignas, redes de apoyo, espacios adecuados e información clara, la lactancia se transforma en una experiencia enriquecedora tanto para la madre como para su hijo. Amamantar requiere tiempo, acompañamiento, confianza y entornos que lo hagan posible. Para lograrlo, se recomienda iniciarla lo antes posible tras el parto, lo que favorece la producción de leche gracias a la activación hormonal y fortalece el vinculo con el recién nacido. También es clave En un mundo marcado por el cambio climático y la urgencia de adoptar modelos de vida sostenibles, la lactancia materna emerge como una práctica simple, cotidiana y con un inmenso potencial transformador.
La Semana Mundial de la Lactancia Materna 2025 nos convoca con un mensaje claro: "Dar prioridad a la lactancia materna: crear sistemas de apoyo sostenibles". Este enfoque no solo reconoce el valor biológico y emocional de la lactancia, sino que también nos invita a considerarla como un acto ecológico, ético y consciente.
Alimentar con leche materna fortalece el cuerpo y el vinculo con la madre, pero además representa una forma de nutrir al planeta: ayuda a reducir emisiones, evita residuos contaminantes y promueve un estilo de vida más respetuoso con el entorno. amamantar a libre demanda -sin horarios rígidos-, permitiendo que el bebé regule sus tomas según sus necesidades, lo que facilita la consolidación de la lactancia. Es normal que surjan dificultades, como dolor, grietas o congestion mamaria por falta de extracción. Por eso, pedir ayuda oportuna es fundamental. Asimismo, se recomienda evitar el uso de chupetes o mamaderas, ya que pueden interferir con la succión natural del bebé. El rol del padre es clave: acompañar, apoyar activamente a la madre y entender que este proceso también lo involucra a él.
Finalmente, si se alimenta con leche extraída o no se ha podido amamantar, el vínculo afectivo, el contacto visual y la cercanía emocional siguen siendo esenciales para el desarrollo del bebé.. La Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, y luego su mantención junto a alimentos complementarios adecuados hasta los dos años o más. Este tipo de alimentación entrega múltiples beneficios: fortalece el sistema inmunológico del bebé, previene enfermedades crónicas, diabetes y ciertos tipos de cancer infantil. A la vez, fomenta una relación cercana entre madre e hijo, impactando positivamente en su desarrollo emocional.
Para la madre, la lactancia también trae ventajas: favorece una mejor recuperación postparto, disminuye la fertilidad de forma natural durante los primeros meses, y reduce el riesgo de cancer de mama, ovario y osteoporosis en etapas posteriores de la vida..