Harris y Trump se lanzan a la recta final de la campaña con reto de capitalizar convenciones
Harris y Trump se lanzan a la recta final de la campaña con reto de capitalizar convenciones C on las convenciones nacionales de sus respectivos partidos tras de sí, la vicepresidenta Kamala Harris y el exmandatario Donald Trump se alistan para la carrera final de 10 semanas, en las que la demócrata busca mantener el impulso que ganó desde que entró a la campaña, y su rival republicano busca dar vuelta una situación que no lo favorece en las encuestas.
Harris y su compañero de fórmula, el gobernador de Minnesota, Tim Walz, se preparan para una nueva fase de la campaña, pero un día después de que se convirtieran oficialmente en los candidatos demócratas, quien tomó la ofensiva fue Trump. El republicano se pasó gran parte del día bombardeando sus redes sociales con comentarios negativos y memes sobre Harris, y compartiendo fotos de supuestos inmigrantes irregulares que habrían cometido delitos en el país.
El exmandatario estima que hay una crisis en la frontera sur de EE.UU. y responsabiliza por ella a la vicepresidenta, a quien llama "zar de la frontera". Durante el discurso de Harris el jueves, en la noche final de la convención demócrata, Trump hizo comentarios en vivo en redes sociales y ayer volvió a la carga. "¡No dijo nada! ", manifestó en un evento en Las Vegas (Nevada), junto con plantear que cuando era fiscal de distrito en San Francisco "lo destruyó" y que luego "arruinó el estado de California" como fiscal general. "A ella no le está yendo bien", dijo, molesto, la noche del jueves a una presentadora de Fox News que le comentó que Harris estaba teniendo éxito en las encuestas, especialmente entre votantes latinos, negros y mujeres.
Alza en las encuestas para la vicepresidenta Pese a lo que diga el exmandatario, es indiscutible que Harris emergió de la convención con un fuerte impulso que parecía improbable para los demócratas hace un mes, cuando el Presidente Joe Biden seguía en carrera. El salto de la vicepresidenta a la primera línea rejuveneció el partido y les dio un golpe de optimismo, según The New York Times. Las encuestas dan cuenta de esto: Harris aventaja a Trump por 48,4% contra 46,9%, según el promedio de estudios del sitio especializado RealClearPolling. com.
Ese impulso está dado por un "increíble" y "bien planeado aumento de atención" que tuvo la candidatura demócrata luego de que Biden diera un paso al costado el 21 de julio, según Jennifer Victor, analista política de la G e o r g e M a s o n U n i v e r s i t y, quien agrega que "la convención podría darles un impulso a los demócratas de cara a septiembre" para el debate entre Harris y Trump el 10 de ese mes.
Los expertos concuerdan en que las convenciones suelen dar un impulso anímico a las campañas, aunque, planteó Charles Bullock, académico de la Universidad de Georgia, este a veces "puede evaporarse". "Trump, por ejemplo, no recibió ese impulso por dos razones.
Primero porque es un personaje bien conocido que ha estado en el centro de atención por 8 años, y además porque la salida de Biden hizo que la cobertura mediática cambiara de foco prematuramente", planteó, en referencia a la Convención Nacional Republicana que se llevó a cabo entre el 15 y el 18 de julio.
Cambio de táctica para mantener el impulso El desafío inmediato de Harris es mantener la buena racha hasta el debate, pero de poco le servirá si la pierde antes del 5 de noviembre: la exsecretaria de Estado Hillary Clinton tenía una ventaja más holgada que Harris a 10 semanas de las elecciones de 2016 y aun así perdió contra Trump.
La vicepresidenta se tomó un respiro, sin actos de campaña previstos para este fin de semana, pero ya ha dado luces de cuál será su estrategia hasta la presidencial y en qué se diferencia de la de Biden.
Mientras que antes caracterizaban a Trump como un demagogo, los demócratas han comenzado ahora a burlarse del candidato republicano de una manera diseñada para menospreciarlo y hacer mella en su aura de invencibilidad, aseguró France Presse. Así, los oficialistas han adoptado el calificativo de "raro" que popularizó Walz y Harris se ha referido a Trump como una persona "poco seria", como volvió a hacerlo en su discurso del jueves.
La campaña de la vicepresidenta, también, ha buscado mostrar un foco a futuro y un cierto optimismo --"la presidenta de la felicidad", la llamó el exmandatario Bill Clinton durante la convención--, en contraste con la perspectiva más negativa que ha mostrado su rival.
Trump, en tanto, ha optado por mantener su estrategia de movilizar a su base conservadora destacando lo bien que, dice, estaba el país durante su gobierno y con advertencias de una crisis inminente de un Estados Unidos en "decadencia", que necesita que él gane para salvarlo, y sobre la crisis de los "migrantes criminales" que amenaza al país. "Bajo mi liderazgo la comunidad latina prosperó como nunca antes (... ) los ingresos de los hogares latinos llegaron a un récord durante nuestra administración y su desempleo llegó a su nivel más bajo", manifestó ayer en un discurso claramente dirig i d o a l o s v o t a n t e s l a t i n o s --donde la mayoría de las encuestas dicen que Harris ha recuperado algo del terreno perdido por Biden-pronunciado en Nevada, minutos antes de viajar a Arizona.
No es casualidad que ayer haya ido a esos estados, pues son dos de los considerados claves para definir la elección y en los que ambas campañas, sin duda, se concentrarán en las próximas 10 semanas.
Ambos se preparan para el debate del 10 de septiembre: Harris y Trump se lanzan a la recta final de la campaña con reto de capitalizar convenciones NICOLÁS GARCÍA DE VAL El republicano criticó ayer a su rival demócrata, que ha conseguido sobrepasarlo en las encuestas.
HARRIS HA DICHO que Trump es una persona "poco seria". FRANCE PRESSE Si la venta de gorros publicitarios con el nombre Harris-Walz se pudiera extrapolar al resultado de las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre, sin duda, los vencedores serían la candidata demócrata Kamala Harris y su compañero de fórmula, Tim Walz, según France Presse. "El volumen de gorros que estamos vendiendo en tan poco tiempo es algo que no habíamos visto nunca", dijo a esa agencia Mitch Cahn, fundador de la fábrica textil Unionwear en Nueva Jersey, que lleva 24 años trabajando en campañas electorales y quien se ha visto sorprendido por la "Kamalamanía": cada día distribuye más de 4.000 gorros.
En menos de un mes han vendido más de 100.000 gorros y la Convención Nacional Demócrata aumentó todavía más el apetito por ellos, así como por las zapatillas, camisetas, lápices y cualquier otro tipo de recuerdo con el nombre de los candidatos.
Si Harris gana las elecciones, "lo más probable es que veamos otra oleada de productos para la inauguración, como vimos con Barack Obama en 2009", augura. n El éxito de los gorros de la fórmula demócrata LAS VENTAS de los gorros subieron tras la convención. FRANCE PRESSE RECAUDACIÓN La campaña demócrata anunció ayer que recaudó más de 100 millones de dólares en donaciones durante la convención esta semana. TRUMP CRITICÓ ayer a Harris por su discurso en la convención demócrata. THE ASSOCIATED PRESS.