"Todo espacio vinculado a la escucha y al respeto siempre será muy valioso"
"Todo espacio vinculado a la escucha y al respeto siempre será muy valioso" (E) ENTREVISTA. ANY RAMÍREZ, encargada de vinculación de la Corporación Cultural Ex Fábrica Barrios Bajos: "Todo espacio vinculado a la escucha y al respeto siempre será muy valioso" presencia. Luego de haber estado en al menos once países, la gestora cultural se instaló en Valdivia. Llegó para estudiar y se quedó para integrar un grupo de entusiastas profesionales empecinados en la puesta en valor de un espacio de alto interés patrimonial.
Daniel Navarrete Alvear danielnawrretoDaustralvaldivia. as opciones de un futuro mejor estabanen Europa, poreso cuando Any Ramírez tenía 11 años de edad dejó su natal Anserma (ciudad de Colombia) y con sumadre partió a España donde pasó el resto desuinfancia y gran parte de su adolescencia. Ese primer viaje entre países separados por el Océano Atlántico marcó el iniciode una vida errante que mucho tiempo después tendría como últi mo destino Valdivia. Gracias al programa de intercambio Erasmus pasó un año en la Université de Pau et des Pays de P'Adour en Francia, donde estudió Ciencias de la Tierra. Eso fue mientras estudiaba Licenciatura en Ciencias Ambientales en la Universidad Alcalá de Henares, al noroeste de Madrid. Así comenzó a perfilarse como una profesional con inclinación hacia temas como por ejemplo el trabajo comunitario ligado a la agroecología y la educación ambiental. De niña siempre demostró amor y respeto por la naturaleza. Incluso quería ser como la zoóloga estadounidense Dian Fossey, conocida por su labor científica y conservacionista con los gorilas en el Congo y Ruanda.
SEA AGENCIA UNO RESCATAR LAS MEMORIAS DE PERSONAS MAYORES DEL BARRIO HA SIDO UNA DE LAS OCUPACIONES DE RAMÍREZ. ¿Cuálerael delacarrera delacarrera delacarrera queestudió en España? Era muy institucional, muy centrada en ámbitos de laauditoría ambiental, en lo legislativo y en lo quesignificanlas normas ISO. También en temas como la evaluación de impacto ambiental. Entonces el componentesocial tuve que incorporarlo mediante cursos complementarios sobre cooperación internacional y trabajo comunitario. Eso fue mientras pensaba que ya era tiempo de volver a Latinoamérica.
Estaba muy motivada por aquello de encontrar otras formas de hacer, que estuvieran ligadas ala agroecología. ¿Europanoera un buen lugar para trabajar? -Es muy rígido, demasiado institucionala la hora de poder permear en eltema de las políticas. Además, metocóestaren medio dela crisis financiera internacionaldel 2008y delaamenaza del Plan Bolonia de unificación de todos los sistemas educativosa nivel universitario, que era conivel universitario, que era como un nuevo modelo de privatización. Había una incipiente ola de pesimismo.
Porrazones académicas es que Any Ramírez se trasladó a Francia y luego volvió a España por un par de meses, para posteriormente irse a Costa Rica y viajar por ese país durante un año como mochilera. Tuvo la posibilidad de integrarse a diversas institucio nes.
Luego se fue a Guatemala Se vinculó con pue¡ narios y sumó asulabor temáticas relacionadas bor temáticas relacionadas bor temáticas relacionadas con territorio e identidad. "A través de esas prácticas es que poco apoco comenzóa surgir esa conversación entre ecología y sociedad. Fue algo quese intensificó en mi quehacer cuando también estuve en Chiapas donde me ofrecieron trabajar en un teatro y entonces comencé a involucrarme con más fuerza en el mundo de la cultura", aara. En su periplo hacia Américadel Surtambién estuvo en El Salvador, Nicaragua, Panamá, Colombia y Perú. Hasta que volvió a España y desde ahí se fue a vivir a Londres por un año. Quería aprender a hablar y escribir bien el idioma inglés. También quería estudiar algo relacionadocon economía, desarrollo y sociedad. Fue entonces queescuchó hablar del economista, ecologista y político chileno Manfred Max-Neefy su magísteren Desarrollo a Escala Humana y Economía Ecológica de la Universidad Austral de Chile. Ella estaba en Europa y decidió nuevamente cruzar el mundo, estavezen direccióna la capital de Los Ríos para estudiar el magíster entre 2018 y 2021.
Y de paso, se quedó a vivir, porque se transformó en una de las piezas fundamentales de un ambicioso proyecto que le ha permitido poner en práctica la totalidad desus intereses personales. intereses personales. intereses personales. LAS RUINAS A principios del siglo XX funcionó en Valdivia la Fábrica de Calzados y Curtiembres Weiss. Enla publicidad dela épocaera calificada como "la de mayor prestigio de la república". Había comenzado como un taller y se volvió un gran complejo con instalaciones que fueron levantadas en 1925 aproximadamente.
Llegó a contar con una cantidad de trabajadores tan grande que incluso alguna vezse discutió la pertinencia de construir viviendas en una po. "Todo espacio vinculado a la escucha y al respeto siempre será muy valioso" (viene dela página anterior) blación exclusivamente para ellos. No obstante, la prosperidadterminó abruptamente debidoal terremoto que ocurrió el domingo 22 de mayo de 1960. La destrucción fue total y todo quedó en ruinas. Son las mismas ruinas que se mantienen hasta hoy y donde Any Ramírez encontró la razón para quedarse en Valdivia y, momentáneamente, dejar de seguir viajando. El lugar está en los Barrios Bajos. Se accede por la calle Guillermo Frick N'270 y tiene 1.694,5 metros cuadrados. Felipe Riveraloarrendó a la familíaGauro Bayelle que esla propietaria. Actualmente el lugar es conocido como Parque Cultural Ex Fábrica Barrios Bajos. Estuvo abandonado. Ahora esel principal punto de encuentro de la comunidad que puede acceder a eventos culturales, aun huerto urbano y a untaller de oficios. Cuando Rivera decidió iniciarlos cambios, convocó atodos quienes quisieran colaborar. La invitación fuea trabajar enacciones vinculadas a la memoria y la construcción de la identidad. Any Ramírez había terminado su magíster. De inmediatose integró al proyecto. "Supe de todo eso medianteredessociales. Fue en medio dela pandemia. Yo era parte de Banco del Tiempo e Intercambio Valdivia, que era un espacio dondesiete personasdetodo Chile nos reunimos para reflexionar acerca de la economía y cómo todo estaba comenzando a desmoronarse. Felipe hizo un llamado a colaborar especialmente con la huerta. Una delas dimensiones deesa laborestabarelacionada con la puesta en valor de las ruinas dela exfábrica", indica. ¿Conocía el lugar? -Lo había visto. Sabía que estaba completamente en el abandono, que era bastante inseguro porque la gente solía juntarseatomar alcohol. Esacalle en particularera peligrosa. No era recomendable circular por ahí de noche. Nunca supe qué eran esas estructuras hasta que me metal equipo.
Fueun acercamiento mucho más en profundidad conelsector, porque antes había vivido en Barrios Bajos, pero en un mo'mento en queestuve casi absolutamente concentrada en el magíster sin haberle prestado mucha atención a la ciudad. ¿Qué potencialidades descubrió en lasruinas? Me encantó el lugar porque soy consciente de la poca estructura patrimonial que se conserva en Valdivia posterioral terremoto de 1960. Encontrarme con una ruina relacionada con ese hito fue sorprendente. Es una estructura gigante que jamás pensé que alguna vez pudo ser una fábrica de zapatos. Esta ciudad es relativamente joven, muy resiliente y gran parte de lo que se ve, tiene esa huella del teremoto.
El desafío principal fue pensar en cómo poner en valor las ruinas para las personas del barrio, cómo destacar estaidea de patrimonio o memoria barrial que está presente en un lugar que prácticamente era un basural. POSICIONAMIENTO La Ex Fábrica Barrios Bajos se constituyó como corporación cultural en el primer año de reunión de las distintas personas interesadas en el proyecto.
De manera orgánica, Any Ramírezasumió el rol de coordinadora y responsable de vincular el proyecto institucionalmente con la Municipalidad de Valdivia, los servicios públicos y las organizaciones de base de Barrios Bajos y del resto dela ciudad. "Me encanta poner a conversar a distintos espacios y a distintas personas sobre sus necesidades, sobre las formas en que pueden colaborarse mutuamente en la búsqueda de soluciones a sus problemas", aclara. ¿Por qué creequeen Barrios Bajos nunca antes hubo mayor interés por el rescate de las ruinas? -Sencillamente porque las cosas van quedando enel olvido. Sea cual sea la temática, si alguien no se hace cargo de las cosas, de los espacios, entonces las generaciones van olvidando y dejando atrás la memoria.
Puedes tener un bosque detrás de tu casa, pero si dejas de mirar los árboles, entonces terminarás olvidando losnombres de esos árboles. ¿El Estado tiene alguna responsabilidad en eso? Siempre tiene que haber un diálogo entre el Estado y la comunidad. No creo en la mirada paternalista del Estado, ni que además tenga que tomar las riendas de todo. Pero sí tiene gran responsabilidad considerando que básicamente tiene la técnica y el dinero para hacer cosas como las que finalmente han debido asumir las comunidades. Tal vez la comparación sea un poco desproporcionada, pero a diferencia de Chile, en Europa todo es patrimonio.
Acá por el contraAGENCIA UNO, AGENCIA UNO, AL PARQUE CULTURAL LE FALTA CONEXIÓN CON LA MATRIZ DE AGUA POTABLE, POR ELLO SE HABILITÓ UNA CAMPAÑA PARA COSTEAR LA INVERSIÓN. rio cuesta mucho hacer entender la importancia de la memoria y la importancia de reconocer en espacios como la ex fábrica, un ejercicio de mirada haciael pasado que enseñamucho sobre el futuro. ¿De qué manera searticularon conlos vecinos? Todo ocurrió de una forma muy fluida. A mi me apasiona trabajar con la tercera edad, meencanta escuchar sus historias.
En su momento hicimos un proyecto deinvestigación financiado por el Fondo del Libro y tuvela oportunidad de reunirme con muchas personas mayores que me hablaron de sus infancias, de cómo fue elteremoto y de cómo fue vivir en dictadura. Todo espacio dedicado a la escucha y al respeto siempre será muy valioso. Eso ayudó a que desde el primer momento hubiera mucha cercanía. Nos permitió además hacer una primera actividad llamada "Noche de boleros' a la que asistieron 25 personas. Desde ahí se fue tejiendo una amistad muy linda, que además nos llevó a relacionarnos conel Cecosf Barrios Bajos para entender más y mejor la situación de vulnerabilidad de quienes viven en el sector.
Siento que la clave de todo esto ha sido la empatía de comprender las necesidades y dar el reconocimiento que tiene el barrio desde sus inicios. barrio desde sus inicios. ¿Cómo se están relacionando con las nuevas generaciones? Mediante la vinculación con lasescuelas y conun llamadoa que delegacionesvisiten el parque cultural.
Creemos que el 66 Me encanta poner a conversar a distintos espacios y a distintas personas sobre sus necesidades, sobre las formas en que pueden colaborarse mutuamente enla búsqueda de soluciones a sus problemas... " 66 El desafío principal fue pensar en cómo poner en valor las ruinas para las personas del barrio, cómo destacar estaidea de patrimonio o memoria barrial que está presente en un lugar que prácticamente eraun basural". acercamiento efectivo con el lugar podría ser la mejor forma detransmitir suvalor histórico y patrimonial. Además nos interesaformara las personas del barrio en materias de gestión cultural, presentándoles las distintas aristas que tiene aquello. Muchos piensan que la cultura es el producto final, pero no hay que olvidar todala cadena de valor que hay detrás. En general estamos teniendo un buen feedback. Incluso en julio se hizo el primer carnaval invernal delos Barrios Bajos que fuetodo unéxito. Se reunieron res generaciones en un solo evento y eso fue maravilloso. RESPALDO El Parque Cultural Ex Fábrica Barrios Bajos cuenta con un plan de gestión 2024-2029. Además el espacio fue validado como Punto de Cultura Comunitaria por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Ello esgarantía de accesoa asesorías, capacitaciones y financiamiento para sus planes de fortalecimiento. "En este tipo de avances ha sido fundamental escuchar a las personas sobre qué es lo que se imaginan para la ex fábrica. Desde ahí surgieron inquietudes como la falta de espacios verdes en los barrios y por eso es que comenzamos a MNamar parque cultural a la ex fábrica. Ese concepto permite una cercanía mucho mayor entre naturaleza y cultura", dice.
Y agrega: "Algo que hemos aprendido con el paso de los meses esla necesidad de adaptarnos a las condiciones del espacio al momento de pensaren las que cosas queahí se pueden hacer sobretodo durante la rudeza del invierno en Valdivia. Poresofue complicado sostener una programación de artes escénicas, sin embargo descubrimos que los oficiossí pueden tenercabidadurantetodoelaño". CROWDFUNDING Actualmente el lugar cuenta conelectricidad, perolefaltaconexióna lamatriz de agua potable. Para ellose necesita invertir $15.000.000 que de momento se están reuniendo mediante una campaña de financiamiento colectivo por internet. Las donaciones pueden ser desde $500 a través de la página web masvidaparabarriosbajos. cl. Quedan dos meses para finalizar y solose han logrado $982.000. ¿Cuál es la evaluación preliminar sobrecómo ha funcionado la campaña? -Sin duda que nos falta mucho más apoyo, pero también más visibilización de la campaña. Siento que en Valdivia todavía es desconocido el sistema de crowdfunding. La mayor cantidad de apoyos que hemos recibidoson de afuera.
Tal vez lareacción más lenta de los valdivianos se debaal invierno y a que por lo mismo, no estamos pudiendo hacer cosas presenciales para hablarle a cada una de las personas sobre la importancia de quenos ayuden. Pero no estamos parados. Estamos usando todas las herramientas a nuestro alcance para recordar permanentemente la campaña. Entodo lo que hacemos, transmitimosla relevancia que tiene el Parque Cultural Ex Fábrica Barrios Bajos para la ciudad. 03 Barrios Bajos para la ciudad. 03.