Autor: CARLOS AGURTO L.
Ignacio Briones es reconocido por sus pares como EL ECONOMISTA DEL AÑO 2019
El segundo de cinco hermanos, en una familia ligada a la arquitectura y el arte, desde joven destacó por su interés por la economía y las políticas públicas. Desde niño su vida ha estado ligada a Francia, primero como alumno de la Alianza Francesa, luego como estudiante de pre y posgrado, y finalmente como embajador chileno ante la OCDE en París.
Su llegada al cargo económico más importante del país, tras el estallido de la crisis social, Nquieto intelectualmente y de buena conexión con la gente” son algunas de las virtudes que su círculo más cercano destacan del ministro de Hacienda Ignacio Briones Rojas. El ingeniero comercial, magíster en Economía y en Ciencias Políticas de la Universidad Católica (UC), y Ph.D. En Economía Política del Institut d'Etudes Politiques de Paris (ScPo), fue escogido por sus pares como el Economista del Año 2019.
Este reconocimiento, que entrega Economía y Negocios de “El Mercurio” desde 2001, ha sido otorgado anteriormente a Andrea Repetto, Mario Marcel, Juan Andrés Fontaine, Rodrigo Valdés, Francisco Rosende, Rosanna Costa, Rodrigo Vergara, José De Gregorio, Felipe Larraín, Cristián Larroulet, Klaus Schmidt-Hebbel, Sebastián Claro, Juan Pablo Montero, Andrés Velasco, Sebastián Edwards, Nicolás Eyzaguirre, Vittorio Corbo, Eduardo Engel y Ricardo Caballero. Nacido en Santiago, es el segundo de cinco hijos —dos hombres y tres mujeres— de los arquitectos Roberto Briones e Isabel Rojas. Casado hace doce años con la también arquitecta Francisca Cifuentes, Briones tiene tres hijos: Elisa, Aurelia y Vicente. Todos sus estudios primarios y secundarios los realizó en la Alianza Francesa. Sus compañeros de curso ya avizoraban el camino que seguiría en el futuro. “Siempre nos ha deleitado (aburrido) con sus tesis económicas”, señala su biografía en el anuario del colegio de 1990. Para Briones, el paso por la Alianza Francesa fue clave en su formación. “Fomenta el pensamiento crítico y nos obliga a ser autónomos y analíticos, con orden y rigor. Pese a ser un colegio de élite, nos permite conocer una mayor diversidad en lo político y lo social”, dice. Amistad de juventud con MEO y asistente a las marchas del NO Los últimos años de educación media coincidieron con el convulsionado ambiente político a finales de los años 80. “Para el plebiscito de 1988 tenía 16 años. Estaba en tercero medio y era un ávido lector del diario La Época. Recuerdo haber ido a las marchas del NO. En esa época era amigo de Marco Enríquez Ominami porque éramos compañeros. En su casa me tocó ver a varios próceres de la oposición de la época, entre esos, al expresidente Ricardo Lagos”, rememora. Con el tiempo, los caminos de Briones y EnríquezOminami se separaron. “Nos hemos visto un par de veces y nos tenemos gran cariño”, aunque asume que nunca votó por él en las elecciones presidenciales. Amigo desde séptimo básico es el actual vicerrector de investigación de la UC, Pedro Bouchon. “Nos gustaba el desafío intelectual, pero al mismo tiempo combinarlo con la vida cotidiana.
Éramos inquietos, pero estudiosos y responsables”. A comienzos de los años 90 ingresó a la UC a estudiar Ingeniería Comercial —período en el que por seis meses estuvo de intercambio en Francia—, después realizó un magíster en economía y otro en ciencias políticas. De su paso por la casa de estudios recuerda a docentes como Vittorio Corbo, Felipe Larraín, entre otros. Siempre se destacó como un buen alumno, siendo ayudante de varios ramos como Finanzas, Introducción a la Economía, Contabilidad Económica, etc. Así lo recuerda el expresidente del Banco Central, Vittorio Corbo, quien fue su profesor de Macroeconomía Financiera en el Magíster de Economía. “Participaba en claParticipaba en clases y tenía interés por aprender.
Siempre estuvo muy interesado y motivado por las políticas públicas”. VITTORIO CORBO CENTRAL Y SU PROFESOR EN EL DE ECONOMÍA DE LA UC Combina un conocimiento riguroso de la economía como ciencia con una inquietud intelectual que le permite ver los problemas más allá de los números”. LEONIDAS MONTES AMIGO Y ACTUAL DIRECTOR DEL CENTRO DE ESTUDIOS PÚBLICOS (CEP). Sin dejar de ser un riguroso economista, entiende que la economía es muy útil para explicar fenómenos complejos, pero también requiere de herramientas complementarias”. HARALD BEYER RECTOR DE LA UNIVERSIDAD ADOLFO IBÁÑEZ Es una de las personalidades que pueden influir positivamente en la agenda gubernamental. (... ) Siempre ha generado una buena conexión con la gente”. PEDRO BOUCHON AMIGO DE LA INFANCIA Y VICERRECTOR DE INVESTIGACIÓN DE LA UC Premio entregado por Economía y Negocios de “El Mercurio”: Ses y tenía interés por aprender. Siempre estuvo muy interesado y motivado por las políticas públicas”, dice Corbo. En el Magíster en Ciencia Política en la UC compartió con el actual director del Centro de Estudios Públicos (CEP), Leonidas Montes. “Combina un conocimiento riguroso de la economía como ciencia con una inquietud intelectual que le permite verlos problemas más allá de los números”, afirma.
Tesis en historia financiera y afición por la cocina y la literatura A comienzos de este siglo decidió radicarse en París para realizar un máster y doctorado en la ScPo, cuna de los principales líderes políticos de Francia, como Emmanuel Macron, Francois Hollande o Jacques Chirac. En un barrio cerca de la Opera de París, se instaló en un departamento con otro de sus amigos de infancia, Jorge Ferrando, actual jefe de Estudios de Empresas Copec. En ese lugar, Briones dedicó tiempo a una de sus principales virtudes: cocinar. “No tiene nada que envidiarle a un chef de restaurante, es fuera de serie”, asegura Ferrando.
Su afición por la buena mesa los llevó a No sorprendió a sus amigos, quienes destacan su cercanía y humildad intelectual, Ambos —una vez que regresaron a Santiago—a desarrollarse durante tres años como cronistas gastronómicos en la revista Cosas, firmando bajo el seudónimo de Eugenio de la Cruz. Su tesis de doctorado fue sobre historia financiera. “Banca libre, de la idea a la realidad: el caso de Chile, 1860-1898”. Su director de tesis, Marc Flandreau, es uno de los principales historiadores económicos y financieros a nivel mundial. Aprobó la tesis con distinción máxima y felicitaciones del jurado. El gusto por la lectura no se reduce a libros de historia económica y filosofía política, sino que también a las novelas.
Por eso, en su biblioteca comparten espacio autores como Karl Popper y Adam Smith, con ganadores del Nobel como Yasunari Kawabata y Mario Vargas Llosa. ¿Su novela favorita? “La conjura de los necios”, de John Kennedy Toole. Su afición por la literatura contrasta con su indiferencia por la televisión. De hecho, reconoce que en casa no tienen televisores, sino que solo un telón donde ven películas en Netflix con la familia los fines de semana. ¿ Cómo se informa? “Leo diarios y escucho radio. Estoy suscrito a The Economist y a El País (de España)”, dice. Asesor de Hacienda y fundador de Horizontal Tras su regreso de Francia, Briones participó en el primer gobierno del Presidente Sebastián Piñera, como coordinador de finanzas internacionales en el Ministerio de Hacienda. Ahí cultivó una estrecha relación con el exministro Felipe Larraín. En paralelo a su rol en Teatinos 120 participó en la creación del centro de estudios Horizontal, con Hernán Larraín, Felipe Kast, Leonidas Montes, Pablo Correa, entre otros. Ese fue el germen de Evópoli, partido del cual Briones es militante. “Me costó entrar porque la palabra militante tiene una carga muy fuerte, pero es un gran partido que ha refrescado la política. Estoy orgulloso de pertenecer ahí”, afirma. En esa época comenzó a utilizar una moto Vespa para moverse por Santiago.
“Más que una afición, se transformó en una necesidad y un placer”. Ahora, por razones de seguridad, no utiliza la moto para sus traslados diarios, pero confiesa que algunos fines de semana se “escapa” arriba de ella. En 2013 nuevamente apareció París en el destino del economista. Ese año el Presidente Piñera lo designó como embajador chileno ante la OCDE, cargo en el que se mantuvo por casi un año.
Desde decano de la UAI a jefe de las finanzas públicas post estallido A su regreso a Chile asumió como decano de la Escuela de Gobierno de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI). El rector Harald Beyer destaca su capacidad profesional. “Sin dejar de ser un riguroso economista, entiende que la economía es muy útil para explicar fenómenos complejos, pero también requiere de herramientas complementarias.
Este enfoque lo hace ser particularmente reflexivo y poco dado a entregar respuestas hechas, característica tan habitual en muchos académicos, a los problemas que le toca enfrentar”. Considerando su trayectoria, sus amigos más cercanos no se sorprendieron con la llegada de Briones a Teatinos 120 tras el estallido social, y destacan que es la persona indicada para los desafíos que enfrenta el país. “Es una de las personalidades que pueden influir positivamente en la agenda gubernamental”, dice Bouchon. Por su parte, Montes cree que su amigo está a la altura del desafío. “Friedrich Hayek decía que un economista que es solo un economista no es un buen economista. Si le creemos, Ignacio Briones es un buen economista y representa un cambio saludable para los desafíos que enfrenta el país”.