Autor: ROBERTO MARDONES SÁEZ Secretario de Prensa Presidencia de la República (1984-1988)
Un triste recuerdo
Señor Director: Ocurrió un domingo 7 de septiembre —hace 38 años, entre las localidades de El Canelo y La Obra—, sector del Cajón del Maipo, donde una veintena de integrantes del Frente Manuel Rodríguez atentó en contra de la comitiva que trasladaba al presidente Augusto Pinochet, junto a Rodrigo, uno de sus nietos menores, desde su casa de descanso en Melocotón hasta su domicilio en Santiago. Los protagonistas de este asalto lo denominaron Operación Siglo XX. Se llevó a cabo con armamento de grueso calibre, como lanzacohetes M72 LAW, fusiles M16 y granadas de alto poder destructor. La misión de los ejecutantes era una sola: terminar con la vida del ex primer mandatario, lo que no se logró. La acción dejó como resultado cinco escoltas presidenciales fallecidos y Il uniformados heridos de gravedad, quedando algunos de ellos inválidos de por vida. En este nuevo aniversario, familiares y camaradas de armas concurrirán hoy hasta el monolito erigido en evocación de sus deudos, que se ubica a un costado de esa ruta precordillerana.
Elevarán cristianas oraciones en memoria de los suboficiales de Ejército Cardenio Hernández Cubillos (32), Gerardo Rebolledo Cisternas (31), Miguel Guerrero Guzmán (28) y Roberto Rosales Martínez (25); como también por el alma del cabo primero de carabineros Pablo Silva Pizarro (26), el único soltero de los uniformados muertos en la emboscada.
Desde la tarde de ese domingo 7 de septiembre de 1986, esos hombres pasaron a incorporarse a la historia de los mártires, al cumplir con el juramento que un día hicieron en sus unidades frente al emblema nacional: "Servir fielmente a la Patria hasta rendir la vida si fuese necesario". Dos días más tarde, la ciudadanía repudió masivamente este atentado congregándose en torno a la Llama de la Libertad —que entonces irradiaba su luz frente a la Plaza Bulnes.