Comediante se fue a vivir a la Rotonda Atenas sin saber que era un barrio tan ajetreado
Comediante se fue a vivir a la Rotonda Atenas sin saber que era un barrio tan ajetreado "Hay momentos en los que está congestionado totalmente", comenta Jacob Riquelme Comediante se fue a vivir a la Rotonda Atenas sin saber que era Cuando lo visitó, fue en la tarde, cuando había paz. Ahora tiene que planificar bien todas sus salidas.
WWVILHEM KRAUSE uando buscaba un nuevo deC partamento para vivir, el comediante e influencer Jacob Riquelme visitó el que arrendó en los alrededores de la Rotonda Atenas durante la tarde, momento en que el sector mostraba su faceta más dócil, sin tanto ruido ni ajetreo. Ya instalado en la propiedad, cree que quizás cometió un error. "Cuando vine a verlo, lo hice en un horario de tarde que era más tranquilo y me gustó en ese momento. No me di cuenta del movimiento real del lugar", admite.
Aunque lleva poco menos de un mes en la propiedad, se ha sorprendido por el jaleo diario en la Rotonda Atenas, una intersección clave donde confluyen las avenidas Colón, Cuarto Centenario, Tomás Moro y Los Domínicos.
Es un punto neurálgico de la comuna, hay un supermercado, varias estaciones de servicio, microbuses en todos los sentidos y abundante en restaurantes de comida rápida, lo que significa que siempre hay motoristas de delivery dando vueltas. "Me gusta andar ocupado, saliendo y entrando todo el tiempo. Pero también me gusta que mi casa sea un lugar tranquilo, como un escape al ritmo diario que uno tiene", comenta.
Eso se ha traducido -más allá de acostumbrarse a los constantes bocinazos en adaptarse a ciertas cosas: ya no sale a trotar por la calle; ahora prefiere hacer sus rutinas en su gimnasio, estar mucho más alerta a la hora de sacar a pasear a sus perros y organizarse mejor a la hora de salir de la casa para evitar que lo agarre algún taco evitar que lo agarre algún taco evitar que lo agarre algún taco evitar que lo agarre algún taco un barrio tan ajetreado En 1999 se hicieron pasos bajo y sobre nivel en la rotonda, pero sigue habiendo congestión. TM 1! 1! 1! grande. Un consejo: Bárbara Urrutia, directora de Algarrobo Propiedades, sugiere hacer dos visitas a un departamento antes de arrendarlo. "Siempre es importante, como punto básico, visitar la propiedad con luz de día. De esa manera te das cuenta si es oscura o fría", aconseja.
Sobre el ajetreo, para tener una visión real, la agente sugiere recorrer el sector en los horarios en que se va a mover. "Es muy distinto ir un sábado a las 11 de la mañana que un día hábil a las 7:30. Visitar el sector, ver cuál es la conectividad, si hay servicios cerca, supermercados, farmacias, también es crucial", advierte. Jacob, ¿asumió al arrendar que iba a tener más movimiento? "No, no lo pensé tanto. Creo que es algo que uno debe evaluar antes de cambiarse: ver dónde vas a vivir, qué hay cerca, todas esas cosas. Porque después te toma de hn hn W Fe Fe sorpresa. Si estabas acostumbrado a salir a cierta hora para hacer trámites, tienes que reconfigurar tus horarios y movimientos en función de dónde vives.
Acá todo funciona por horario; hay momentos en que está congestionado completamente y otros en que no hay ningún auto". ¿En qué se refleja eso en su día a día? "Más que nada en el exterior, no tanto dentro de mi casa, cuando quiero salir, hay mucho movimiento. Eso es puntualmente: la congestión más que nada y el ajetreo del barrio. Porque si te pones a pensar, acá hay casas, empezaron a construir edificios alrededor y ya dejó de ser tan residencial. Empezó a ser más una zona de cruces. No me esperaba que tuviera tanto flujo de autos, salir de repente en la mañana es un cacho.
Hay muchos autos; si me meto, no sé, a Colón, hay tacos por todos lados". Tampoco es tan fácil sacar a sus perras a pasear. "Antes vivía cerca de Américo Vespucio, que era como un parque, entre comillas. Ahora tengo que salir por las calles; no hay ningún área verde cercana ni parques. Tendría que ir al Parque Araucano, que ya está más lejos. Pero la gente no respeta mucho los pasos de cebra ni esas cosas. De hecho, me ha tocado ver gente apurando a los que van cruzando. Ando con ellas muy cerca porque me da miedo que pase un auto loco". Entonces, ¿qué fue lo que le conquistó del lugar? "Me gusta porque acá vive una de mis mejores amigas. Siento que es un plus tener un ambiente grato y cercano en el edificio. Además, está cerca de varios malls. Si tomo una calle, me deja en la autopista y puedo avanzar rápido, a menos que haya tacos. Me gusta la ¡ luminación del departamento, la orientación, el espacio, pero el tema del ajetreo no me lo esperaba". ¿Está arrepentido de haber arrendado ahí? "Es que estoy todavía cachando qué onda. Estoy ambientándome". 'MARIOLA GUERRERO..