“Todo esfuerzo vale la pena si puedo enviar las medicinas que mi abuelita necesita para seguir viviendo”
“Todo esfuerzo vale la pena si puedo enviar las medicinas que mi abuelita necesita para seguir viviendo” A un año de Santiago 2023: la esforzada vida y las esperanzas de las hockistas cubanas que se quedaron en Chile "Todo esfuerzo vale la pena si puedo enviar las medicinas que mi abuelita necesita para seguir viviendo" REBECA AAMPA o ha sido fácil para ninguna: N trabajan hasta en tres lugares distintos para poder subsistir y enviar ayuda a sus familias, que viven en Cuba.
Pero las hockistas Helen Carta (31), Yakira Guillén (27) y Jennifer Martínez (24) no se arrepienten ni por un minuto de haber dejado todo en la isla, luego de protagonizar juntas una de las fugas más sonadas en la historia de los Juegos Panamericanos, en Santiago 2023.
En total, fueron siete los deportistas que huyeron esa jornada del 4 de noviembre (ver nota en página 13). Y cuando está a punto de cumplirse un año de aquella decisión que les cambió la existencia, las tres viven juntas en un departamento de dos piezas ubicado en un quinto piso de una megatorre de 37 pisos en Estación Central.
También se integraron a las filas del club Old Reds, que participa en la liga local, aunque no reciben un sueldo por ello, pero sí por las clases que todas dan a los niños que llegan a formarse ahí. Helen y Jennifer, por su parte, además trabajan con dos cursos del colegio Villa María Academy, de Las Condes, y son entrenadoras en distintos gimnasios.
Mientras que Yakira fue contratada como profesora de hockey por el colegio Betterland, de Lo Barnechea, aunque hoy está con licencia médica debido a que en septiembre fue sometida a una compleja cirugía. "¿Cómo era mi vida allá? Pésima, todas las seleccionadas vivíamos juntas en dos cuartos en La Habana, donde funciona el centro deportivo. Es obligatorio vivir ahí, y una vez por semana íbamos a clases a la universidad. Teníamos pocos implementos como calzados, uniformes, pelotas; entonces, no podíamos tener una buena preparación", comenta Carta.
Y añade: "Antes de llegar a la selección vivía en Villa Clara, en Ranchuelo, junto a mi papá y mi mamá, ya que soy hija única". Al igual que sus dos compañeras, admite que la decisión de quedarse en Chile "no fue premeditada", por lo que el largo viaje en bus hasta Iquique, el primer lugar al que arrancaque, el primer lugar al que arrancaHelen Carta, Yakira Guillén y Jennifer Martínez cuentan por qué decidieron dejarlo todo en su tierra natal y se fugaron el 4 de noviembre de 2023, a un día del término de los Juegos Panamericanos. ron esa noche luego de huir de la Villa Panamericana de Cerrillos, "fue entre lágrimas y miedos". En el norte las esperaba un conocido. ¿Siente que valió la pena su sacrificio, Helen? "Totalmente, porque he podido ayudar a mi familia, no sólo monetariamente, sino en lo que haga falta, como medicamentos que allá no se encuentran; entonces, uno puede hacer el envío desde aquí. Mi abuela es diabética, tiene insuficiencia renal... ". ¿Le manda medicinas desde acá? "Sí, Enalapril, que es también para la presión y en Cuba no hay. Le mandé su medicina para todo un año, con un conocido que se dedica a llevar este tipo de cosas para allá". ¿Cómo se llama su abuelita?2 "Juana, es la única que me queda. Tiene 91 años.
Ella siempre me apoyó, y cuando hablamos por videollamadas me dice: "Para adelante, hija, nunca para atrás, aunque sólo Dios sabe sí cuando puedas volver, en siete años más, yo todavía esté aquí". Pero todo esfuerzo vale la pena si puedo enviar las medicinas que mi abuelita necesita para seguir viviendo". Martínez, en tanto, cuenta que el día que huyeron, luego de enfrentar a Uruguay, era también el cumpleaños de su padre, Alexis, y para él fue una jornada triste. "Antes de la selección vivía cerca de La Habana, con mi mamá y mi hermano menor. Y mi papá vivía en un pueblo muy cerca. "Fue duro decirles por teléfono que no iba a volver, pero aún así me dieron su bendición.
Luego, en el bus a Iquique me fui pensando: "¿ Qué será ahora de mí, que nunca he trabajado?" Y no porque no hubiese querido, sino que al ser deportistas no nos dejaban y debíamos dedicarnos al deporte". ¿Y se arrepiente de haberse quedado, Jennifer? "No, allá no teníamos ni ropa. Nos daban uniforme de juego en juego, o sea cada cuatro años, y había que hacerlo durar, aunque muchas veces jugamos con zapatillas rotas.
Eso sí, nuestra familia pasa a ser mal vista, nuestra familia pasa a ser mal vista, nuestra familia pasa a ser mal vista, nuestra familia pasa a ser mal vista, nuestra familia pasa a ser mal vista, Yakira Guillén, Jennifer Martínez y Helen Carta cuentan su historia, a punto de cumplir un año en Chile. un año en Chile. y no tanto por los vecinos, sino en el trabajo.
Mi mamá es enfermera, y como tiene una hija que se fugó, los Jefes ya no la toman en cuenta y no la mandan a ninguna misión". Guillén es la más locuaz del trío, pese a que lleva tiempo lidiando con complicadas lesiones: "Me rompí el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda justo el día que jugamos contra Chile. Y ahí tomé la decisión de quedarme acá para que me operen, ya que lo cubría el seguro médico de los Juegos. Luego, me lesioné la otra rodilla, y en septiembre me volvió a operar el Dr. Roberto Yáñez, de la Clínica Meds, a quien debo agradecerle porque no me cobró un peso y ahí también hago la rehabilitación". ¿Qué es lo que más extraña de su tierra, Yakira? "A mi familia. Somos de Villa Clara, pero hace unos años nos trasladamos a Matanzas. Allá tengo a mis padres, abuelos, hermano, tíos, primos, sobrina... Hablo poco con ellos, porque están sufriendo muchos apagones. Sueño con tenerlos acá conmigo, sobre todo a mi sobrina, Lorena, de 7 años, a la que amo con mi vida". años, a la que amo con mi vida". RICHARD SALGADO.