Industria del arándano en alerta por mayor presión de plaga Lobesia botrana
Industria del arándano en alerta por mayor presión de plaga Lobesia botrana Capturas en Ñuble aumentaron 386% el último aÑo Pone en riesgo System approach, que exime a un centenar de huertos de la región de la exigencia de fumigar la fruta con destino a Estados Unidos. Tanto el SAG como el Comité del Arándano están trabajando para reforzar las medidas de control.
ROBERTO FERNÁNDEZ RUIZ robertofernandez@ladiscusion.cl fotos: LA DIsCUsIÓN P reocupación existe en la industria del arándano debido a una mayor presión de la plaga cuarentenaria de Lobesia botrana en Ñuble y Biobío, lo que pone en jaque el System approach, con Estados Unidos, estrategia que desde 2020 se aplica en ambas regiones y exime de la exigencia de fumigar la fruta a aquellos huertos libres de la llamada "Polilla de la vid". Según estadísticas del SAG, las capturas de ejemplares inmaduros en vides -hospedero primario de la Lobesia-, en la región de Ñuble, anotaron un incremento de 386% en el último año. A marzo de 2023 las capturas anuales sumaron 7.626; a marzo de 2024, alcanzaron 2.160; sin embargo, a marzo de 2025 se elevaron a 10.500.
Como se recordará, en 2013, la detección de la plaga llevó a Estados Unidos a imponer restricciones a las importaciones de arándanos chilenos, como la exigencia de fumigar con bromuro de metilo, lo que afecta la. Industria del arándano en alerta por mayor presión de plaga Lobesia botrana condición de calidad de postcosecha de la fruta fresca.
Actualmente, los arándanos producidos en las regiones de O'Higgins y Maule deben cumplir, sin excepción, el requisito de fumigación para entrar al mercado norteamericano; en tanto, Ñuble y Biobío cuentan con el System approach, que permite a aquellos productores que cumplen con los requisitos, poder enviar su fruta sin fumigar, lo que es clave para los orgánicos, un sector importante en la región de Ñuble, puesto que la fumigación implica perder automáticamente la condición de orgánico. En el caso de Ñuble, un total de 105 huertos de arándanos participaron en el System approach en 2024 para exportar a Estados Unidos.
Según estadísticas de Odepa, con datos del Servicio Nacional de Aduanas, en 2024, la región de Ñuble exportó US$ 57,4 millones en arándanos frescos (convencionales y orgánicos), de los cuales US$ 15,6 millones se enviaron a Estados Unidos, es decir, un 27,1%. El riesgo de perder el System approach Julia Pinto, gerente técnico del Comité del Arándano, del gremio Frutas de Chile, fue clara en advertir que, si los muestreos que realiza la autoridad sanitaria de Estados Unidos a los arándanos de Ñuble detectan larvas de Lobesia botrana, no solo se verá afectado el huerto de origen, sino que toda la zona productora, ya que la región podría, eventualmente, perder el estatus que le confiere el System approach. "Habíamos tenido varios años con baja presión de la plaga, entonces, el año pasado fue un año de buena productividad, en términos generales, en los huertos, pero, además, tuvimos un año de mucha presión de Lobesia botrana, que nosotros lo llamamos `Año de polilla'. Efectivamente, notamos en nuestros diagnósticos que, hay que volver a trabajar con los productores para elevar nuevamente la guardia con respecto a la plaga, porque cuando tenemos varios años en que la plaga no ha sido relevante en términos de presión, vamos bajando la guardia.
Pero el año pasado tuvimos eventos más críticos, donde debimos elevar las alertas a nivel de todos los productores que envían fruta a Estados Unidos con System approach, como a aquellos que exportan a mercados como Corea del Sur y Canadá, que también necesitan un System approach", sostuvo la profesional.
Pinto manifestó que "la idea es tratar de llegar con toda esta difusión a la mayor cantidad de productores posible, para que estemos con la guardia arriba y efectivamente tengamos un año de menos presión, pero, además, de un mejor manejo y control por parte de los productores". "El riesgo más alto es que podamos perder el System approach con Estados Unidos, es decir, que decida que vamos a cuarentenar 100% Biobío y Ñuble y, por lo tanto, lo que obligaría que toda la fruta con destino a ese mercado tendrá que ser fumigada, lo cual no es bueno, porque cuando la fruta se fumiga pierde condición.
Y, por otro lado, tenemos varios supermercados en Estados Unidos que no quieren fruta con fumigación". Además, también advirtió del riesgo que la plaga se desplace hacia el sur, pues actualmente está presente solo hasta la región del Biobío.
Pinto explicó que "para Estados Unidos la preocupación no solo es el propio huerto, donde ellos ven que el productor hace un trabajo, sino que también tiene que ver con los entornos, que tienen que ver con las parras caseras, las parras silvestres y con los viñedos, en el caso del Valle del Itata, algunos de los cuales pueden estar abandonados, ya que a ellos no les afecta tanto, en términos de que, a nosotros, si nos detectan un huevo o una larva, quedamos fuera de este sistema". Si bien la profesional evitó responsabilizar a alguna de las partes involucradas en el control de la plaga, planteó que "debemos trabajar de manera conjunta, el SAG, la industria del arándano, la industria de la vid vinífera, la industria de los ciruelos; y también hacernos cargo de los entornos, saber quiénes son nuestros vecinos, porque hay prácticas que nosotros podemos hacer con los vecinos". Consultada por las expectativas de lo que ocurra en la próxima temporada, expresó que "este año esperamos mostrar números más bajos que los del año pasado, mostrar al USDA, al AFIS, que efectivamente estamos trabajando en función de bajar la presión de la plaga; este año, obviamente, si partimos la temporada y empiezan a haber casos sería complejo, porque nos pueden subir el muestreo desde un 2% a un 4%, como ocurrió el año pasado.
Esperamos que no encuentren más ejemplares, para eso estamos trabajando". "En el corto plazo, buscamos que no se registren detecciones en los predios adscritos al System Approach ni en productores que envían fruta a Estados Unidos fuera de zonas cuarentenadas, ya que una sola detección podría duplicar el porcentaje de muestreo, encarecer la operación y poner en riesgo la continuidad del sistema, incluso incorporando nuevas regiones a cuarentena", advirtió.
En el mediano y largo plazo, el desafío es ampliar el System approach a regiones como Maule y a zonas de Ñuble que están en control, lo que permitiría exportar sin fumigación con bromuro de metilo, proceso que, indicó, "deteriora la fruta y afecta su competitividad frente a otros orígenes que no deben fumigar". Refuerzan medidas de control Frente a este escenario de mayor presión, el SAG ha reforzado las medidas de control de la plaga. El encargado nacional del programa Lobesia botrana del SAG, Paul Fuentes, informó que para esta temporada el Servicio ha modificado su estrategia de control fitosanitario contra la plaga.
Ahora, los productores de uva, arándanos y ciruelos de exportación deberán aplicar insecticidas de primera generación de manera obligatoria en todos sus predios, independientemente de si cuentan con emisores de confusión sexual, que es la estrategia de base del SAG para el control de Lobesia.
Fuentes destacó que las condiciones climáticas, especialmente las primaveras lluviosas del año 2024, han favorecido un aumento poblacional de plagas como la Lobesia, por lo que en la temporada 2024-2025 hubo un aumento de capturas de esta polilla que ataca a viñedos y arándanos. El profesional participó esta semana, en Chillán, en una jornada de capacitación dirigida a productores y equipos técnicos organizada por el Comité de Arándanos de Frutas de Chile, en conjunto con el SAG. Al respecto, el director regional del SAG, Osvaldo Alcayaga, indicó que "hasta ahora, las directrices del programa System approach se han mantenido sin modificaciones. Este programa, que lleva ya varios años en funcionamiento, ha permitido a muchos productores exportar su fruta a los Estados Unidos sin la necesidad de tratamientos cuarentenarios con bromuro de metilo. Este tipo de tratamiento disminuye el valor del producto, afectando especialmente a los productores con certificación orgánica. Sin embargo, la amenaza de intercepciones de plagas siempre está presente.
Un solo incidente podría comprometer el futuro del programa tal como lo conocemos, lo que subraya la importancia de mantener una vigilancia fitosanitaria constante para proteger el acceso a este mercado clave". "Como Servicio, hacemos un llamado a los productores a realizar un análisis exhaustivo de los puntos de riesgo dentro y fuera de sus predios, lo que implica identificar y manejar parrones asilvestrados en bosques o cercos vivos, así como parrones domésticos o viñedos cercanos que puedan actuar como reservorios de la plaga", añadió Alcayaga, quien destacó que se ha realizado un trabajo de coordinación con compañías eléctricas y forestales a fin de eliminar ese riesgo para la sanidad fitosanitaria en caminos rurales y servidumbres de estas empresas.
JULIA PINTO GERENTE TÉCNICO COMITÉ DEL ARÁNDANO El riesgo más alto es perder el System approach con Estados Unidos, y decida que vamos a cuarentenar 100% Biobío y Ñuble" OSVALDO ALCAYAGA DIRECTOR REGIONAL DEL SAG La amenaza de intercepciones de plagas siempre está presente.
Un solo incidente podría comprometer el futuro del programa" Monitoreo de la plaga El SAG llamó a los productores beneficiados con emisores de confusión sexual a instalarlos antes del 15 de septiembre, fecha técnica clave para maximizar su eficacia, y a implementar un automonitoreo constante mediante inspecciones visuales periódicas durante la floración y fructificación, con el fin de detectar a tiempo cualquier indicio de la plaga. Durante esta temporada, se contempla la intervención de 45 mil hectáreas por Lobesia a nivel nacional. En 2024 Ñuble exportó US$ 57,4 millones en arándanos frescos; un 27,1% a EE.UU..