Autor: victoria de Donald Trump podría
Para las empresas emergentes de vehículos eléctricos, las cosas van de mal en peor
Para las empresas emergentes de vehículos eléctricos, las cosas van de mal en peor Varias compañías se declararon en quiebra a principios de este año:de efectivo, ventas desiguales y perspectivas de un gobierno de Trump nada propicio. Las accionesde Rivian hancaído este año. rado en quiebra. De 36 compa-ñías en operaciones con datossuficientes para un análisis, trescuartas partes están perdiendodinero y se prevé que 13 quedensin efectivo el próximo verano. Más desafíospor delanteSe espera que el gobierno deTrump propine otro golpe a susesfuerzos. El Presidente electoha prometido eliminar un crédi-to fiscal de US$ 7.500 para VEque ha ayudado a estimular lademanda. Ejecutivos de la in-dustria también están preocupa-dos de que el financiamiento dela era Biden para empresas devehículos eléctricos y proyectosde baterías también pudiera es-tar en riesgo en el segundo pe-ríodo de Trump. Mientras tanto, nuevos aran-celes o más altos sobre vehículosy piezas de auto provenientesdel exterior como los impues-tos que propuso Trump esta se-mana sobre México, Canadá yChina podrían subir aún máslos costos. Los obstáculos están causan-do estragos en la cadena de su-ministro automotriz, aplastan-do la demanda de baterías ymateriales como el litio que lasalimentan. “Es todo un ecosistema que seestá derrumbando”, dijo Brandt. Muchas de las nuevas empre-sas salieron a la bolsa en los últi-mos años, al aprovechar una olade entusiasmo por compañíasque trataban de emular el éxitode Tesla en la última década. Algunos sacaron ventaja deun auge en los llamados acuer-dos de fusión inversa, en los queuna firma aún novata se fusionacon una compañía de adquisi-ción con fines especiales, oSPAC, para cotizar en bolsa. Es-tos acuerdos ofrecen a las com-pañías un camino más fácil hacialos mercados públicos que unaoferta pública inicial tradicionalpero se ha demostrado que enri-quecen a internos a expensas deotros inversionistas. La transición a un segundo go-bierno de Trump también se pro-duce en un momento crítico parafabricantes de automóviles occi-dentales más establecidos comoFord y General Motors. Estas em-presas automotrices, las que hanprometido miles de millones dedólares para expandir sus líneasde VE, ahora están postergando oechando para atrás algunas in-versiones futuras puesto que lasventas no se han materializadocomo se anticipaba. Muchos están preocupadosde quedar incluso más atrás delos nuevos competidores en Chi-na, como el fabricante de auto-móviles eléctricos BYD y el fa-bricante de baterías CATL. Unaretirada de EE.UU. de las indus-trias de energía limpia podríaextender la enorme ventaja deChina en estos sectores, advier-ten analistas. “Si continúan así, entoncessimplemente hemos abando-nado un importante motor eco-nómico de los próximos 50años”, manifestó Aniket Shah, jefe global de estrategia de sos-tenibilidad y transición energé-tica en el banco de inversionesJefferies Group. Northvolt, una empresa pri-vada, estuvo entre las implosio-nes más increíbles de la indus-tria.
La joven compañía, la quetrató de fabricar baterías con unahuella de carbono más baja, ha-bía recaudado alrededor de US$15 mil millones en casi una déca-da de patrocinadores, entre losque se encuentran Volkswagen, Goldman Sachs Asset Manage-ment y la Unión Europea.
El entusiasmo de los inversio-nistas por su tecnología de bate-rías y los antecedentes del jefee j e c u t i v o P e t e rCarlsson, un exad-ministrador de lacadena de sumi-n i s t r o d e T e s l a, dieron un impulsoa la valoración dela compañía. SUBSIDIOTrump prometióeliminar un créditofiscal de US$ 7.500para VE que ha ayudadoa estimular la demanda. El debilitamien-to del mercado deVE, junto con la cancelación delpedido de BMW, cambiarondrásticamente los planes de lacompañía y la llevaron a solicitarla protección de quiebra. Carl-sson ya dejó su cargo. EmprendimientosgolpeadosOtras empresas emergentescon apoyo del gobierno deEE. UU. también están decayen-do. Li-Cycle Holdings, una firmaque ha prometido convertir bate-rías recicladas en materiales úti-les, tiene un préstamo de gobier-no aprobado de US$ 475 millonespara ayudar a construir una plan-ta en Rochester, Nueva York. Sin embargo, a fines de sep-tiembre, solo tenía suficienteefectivo a mano para mantenerlas operaciones durante unosseis meses. La firma canadien-se, que cuenta con respaldo fi-nanciero de la minera Glenco-re, ha suspendido la construc-ción de la fábrica debido a quelos costos han aumentado rápi-damente. Las acciones de Li-Cycle hanbajado más de un 97% en rela-ción al precio de cotización, cuando se considera una divi-sión inversa de acciones. El director ejecutivo AjayKochhar señaló que la compa-ñía confía en que va a poderreunir el dinero necesario paraterminar el proyecto Rochestery desarrollar un negocio auto-sustentable. “Los inversionis-tas están botando a la guaguajunto con el agua de la tina” enel sector, dijo. El fabricante de furgones y ca-miones eléctricos Canoo tam-bién está gastando cantidades deefectivo y ha despedido a cercade una cuarta parte de su fuerzalaboral en la ciudad de Oklaho-ma para ahorrar dinero.
Había recibido un paquete deincentivos de US$ 113 millonesdel estado para crear más de1.300 empleos en sus plantas devehículos y baterías en Oklaho-ma y había prometido alcanzarrápidamente US$ 1.400 millo-nes en ingresos este año, des-pués de salir a la bolsa en 2020 através de un acuerdo SPAC. “Se siente como si le golpea-ran la cara todas las mañanas altratar de desarrollar vehículoscuyos componentes se han ex-ternalizado desde hace muchotiempo a China”, dijo el jefe eje-cutivo Tony Aquila. Este mes, la compañía obtuvoun préstamo de US$ 12 millonesde una firma de inversiones con-trolada por Aquila. Algunas nuevas empresas to-davía están buscando acuerdosSPAC.
E n j u n i o, T h u n d e r P o w e rHoldings, una com-pañía con sede enWilmington, Dela-ware, que proponeutilizar inteligenciaartificial para fabri-c a r m e j o r e s VE, completó un acuer-do de fusión inversa. Desde en-tonces, las acciones con el sím-bolo “AIEV” han bajado más deun 95%, hasta 47 centavos al cie-rre de hace una semana.
“Muchos de estos equipos deadministración entran en estopensando en que van a llegar aser el próximo Tesla, pero eso re-sulta ser más la excepción que laregla”, comentó Brian Dobson, director administrativo del co-rretaje Clear Street, quien ha se-guido de cerca el sector. Artículo traducido del inglés por “El Mer-curio”. CONTENIDO LICENCIADO PORTHE WALL STREET JOURNALAMRITH RAMKUMAR Y SHANE SHIFFLETTThe Wall Street JournalLas nuevas empresas de vehí-culos eléctricos (VE) tenían difi-cultades antes de las elecciones. Lallevarlas a una caída en picada. Varias compañías destacadas, entre ellas el fabricante de SUVeléctricos Fisker y el fabricantede buses Arrival, se declararonen quiebra a principios de esteaño. El fabricante de bateríasNorthvolt, con sede en Suecia, seconvirtió en la víctima más re-ciente la semana antepasada, alpresentar una solicitud para elCapítulo 11 después de que BMWcancelara un pedido clave.
Al menos una docena de otrasempresas emergentes, que se es-pecializan en vehículos eléctricoso baterías, corren el riesgo dequedarse sin efectivo para el pró-ximo verano (Hemisferio Norte), según un análisis de sus presenta-ciones más recientes que realizóThe Wall Street Journal. Incluso las acciones de em-prendimientos más estables, co-mo Rivian Automotive y LucidGroup, cayeron casi un 50% esteaño mientras enfrentan un pa-norama cada vez más desafiante.
A fines de noviembre, Rivian ob-tuvo la aprobación condicionalpara un préstamo del gobiernode hasta US$ 6.600 millones pa-ra aumentar la capacidad de pro-ducción, pero los inversionistasaún están preocupados por loscostos y la perspectiva de que elfabricante de camiones eléctri-cos puede que no obtenga el di-nero si no completa el acuerdopara el Día de la Investidura.
Muchas de estas compañíasjóvenes se han visto afectadaspor la decreciente demanda deautomóviles eléctricos, los cos-tos cada vez más altos y los obs-táculos en la cadena de suminis-tro que han dificultado su capa-cidad de sacar nuevos productosrápidamente. El colapso en elprecio de las acciones ha evapo-rado miles de millones de dóla-res en valor de mercado. El panorama político cambianteestá poniendo en riesgo la inver-sión planificada en EE.UU., partede la cual ha contado con la ayudade subsidios federales y estatales. “Es simplemente un desastreel que hay ahí con la demanda delos consumidores en baja”, ma-nifestó Ted Brandt, jefe ejecutivodel banco de inversiones Marat-hon Capital, que se enfoca en laenergía limpia. Un análisis delWSJ de 54 empresas emergentesde baterías y VE que cotizan enbolsa muestra una situación fi-nanciera cada vez más terrible. Siete compañías ya se han decla-EFE. Los fabricantes y proveedores de automóviles eléctricos están lidiando con una disminución Varias compañías se declararon en quiebra a principios de este año: