El sangriento despertar de Bangladesh
El sangriento despertar de Bangladesh Las raíces de un levantamiento popular El sangriento despertar de Bangladesh por Nafis Hasant Una Una extraña calma reina sobre Daca, Daca, la capital de Bangladesh, en la mañana del 5 de agosto de 2024.
Vehículos militares y policiales están estacionados en los principales cruces de la ciudad, con camiones que bloquean los principales puntos de entrada para impedir la afluenciade participantesde la “larga marcha hacia Daca” lanzada porel movimiento popular popular que sacude al país desde hacia semanas.
El apagón de Lntcrnet impuesto por el gobierno gobierno se levantó una semana después, pero las redes sociales bullen de especulaciones sobre lo que ocurrirá a continuación, después de que el jefe del Estado Mayor del Ejército de Bangladesh, el general Waker-uz-Zaman. ano nciara que se dirigiría a la nación en respuesta respuesta al pedido de dimisión de Slieikh Hasina, primera Hasina, primera ministra desde 2009. Cuando el general tomó finalmente la palabra palabra a las 16:00 horas, el rumor de que 1-lasina hahíaabandonadoel paísyase había extendido como un reguero de pólvora. Con gafas oscuras, oscuras, el rostro del oficial de alto rango del ataba su febrilidad ante las cámaras y, detrás de sus lentes, lentes, a una nación quecontenía la respiración. El hombreconfirmóque lajefadegobierno había huido. Dos horas antes, se babia subido a un helicóptero helicóptero militar con destino a la India. En las calles, la población estaba exultante, mientras una multitud eufórica irrumpía enel Ganahhahan. la residencia oficial de Hasina, Algunos tomaron sussaris, otros loscisncsdel lago del palacio, mientras otros se tornaban fotosechadosen fotosechadosen lasuntuosacamadela fugitiva. En la televisión, el general continuaba su discurso, discurso, llamando a la calma ya la moderación. Prometió una reunión con los principales dirigentes dirigentes de los partidos de oposición al día siguiente. En la orden del dia solo había una pregunta, la misma que nadie se habla atrevido atrevido a formular durante quince años: ¿ quién gobernaráel gobernaráel país ahora? Así terminó el “julio sangriento” de Bangladesh. Bangladesh. Un mes marcado por una represión brutal, múltiples desapariciones forzadas llevadas a cabo por los servicios de seguridad seguridad del Estado y un movimiento de masas que nada pudo detener. Un movimiento que provocó la caída del régimen de Hasina y del partido gobernante, la Liga Awami.
Dirigido durante mucho tiempo por el padre de Hasina, Hasina, Sheikh Mujib, la Liga Awami había presidido presidido la liberación de Bangladesh (entonces solo la mitad “oriental” de Pakistán) en 1971, antes de convertirse en un instrumento de opresión para el mismo pueblo al que había pretendido emancipar tras su regreso al po deren 2009, Incendio inextinguible Nada hacía pensar que 1-lasina estuviera a punto de ser destituida cuando comenzaron las protestas el pasado julio con el resurgimiento resurgimiento del Movimiento para la Reforma de los Cupos. Este movimiento, que apareció por primera vez en 2013. denuncia un sistema sistema de asignación privilegiada de puestos en la función pública.
Concebido en 1972 con el fin de facilitarla reinserción de los civiles que habían participado en laguerrade liberación nacional, el mecanismo reservaba entonces el 30% de los puestos de la función pública a estos estos “combatientes por la libertad” ya sus hijos hijos :ello%alasbimngvnas(mujeresagredidas sexualmente por el ejército pakistani y colaboradoras colaboradoras de etnia bengala; el 40% a las personas personas que vivían en distritos habitualmente infrarrepresentadasen el sector público; yel 20% a los nombramientos basados únicamente únicamente en el mérito.
El sistema evolucionó a lo largo largo de los años, y las adjudicaciones por mérito pasaron del 20% al 40% en 1976, hasta que en 2010 el gobierno decidió incluir a los nietosde los “libertadores” enel 30% reservadoa losex combatientes. Combinada con el aumento del desempleo juvenil, la decisión desencadenó las primeras manifestaciones en 2013. Apesarde la represión amanosdelapolicia y del ala estudiantil de la Liga Awami la BaogladeshChhatra BaogladeshChhatra League (BCL), unaestructuni de tipo paramilitar, la movilización noha cesadoalolargode cesadoalolargode los af1os. En 2018, Hasi na tuvo que responder. Intentó una provocación con la que esperaba desacreditar el movimiento de protesta: abolir todo el sistema de cupos. Fue un error: la población aplaudió. Tresaños después, después, sin embargo, los hijos de los combatientes combatientes por lalibertad” presentaran una demanda ante la Corte Suprema donde consideraban quela abolición de los cupos erainconstitucional. erainconstitucional. Enjulio de 2024 la Corte les dio la razón y rcstablecióelsistema. Las protestas estallaron en algunas universidades universidades públicas, pero las filas de los manifestantes manifestantes estaban dispersas.
Hasta que dos acontecimientos atrajeron hacia ellos la corriente corriente del descontento: la publicación de una investigación periodística que demostraba demostraba que los exámenes de ingreso a la hinción hinción pública (de los que dependía el 44% de los puestos de trabajo en esta etapa) habían sido filtrados a personas próximas al gobierno; gobierno; y, por sobre todas las cosas, una aparición televisada de Hasina duran te la cual calificó a los manifestantes de rajakar. s, un término cargado de sentido cuya comprensión requiere requiere retroceder en el tiempo. En 1971, cuando Bangladesh todavía formaba formaba parte de Pakistán, Islam abad perpetró un genocidio cuyas estimaciones, aunque varian. varian. cifran el número de muertos en cientos de miles. Las masacres duraron nueve meses meses y contaron con la ayuda de colaboradores bengalíes, conocidos colectivamente corno rajakars.
Para un ejército que no sabia qué aspecto aspecto ten ian los rnukti bahin( (“combatientes porla lihertad”)yque apenas conocía el terreno, terreno, estos rafa ka rs fueron un recurso determinante determinante para identificar al “enemigo”: indicaban a los soldados pakistaníes qué casas quemar, qué familias castigar (por la participación de un hijo en los mukti bahiní) y a qué mujeres violar; cuando no participaron directamente directamente en estos actos por celo religioso, codicia o venganza personal.
Hasina no podía ignorar el efecto que produciría Su elección de palabras y el revuelo causado causado por la investigación periodística sobre el fraude en los exámenes obligaron a la Corte Suprema a modificar el sistema de cupos el 21 de julio.
Desde entonces, el 93% de los puestos puestos se adjudican por mérito, el 5% a los “combatientes “combatientes por la libertad”, el 1% a adivasis y el 1%adiscapacitados y”tercer género” (personas (personas que no se reconocen ni como hombres ni como mujeres). Pero la decisión de la Corte Suprema llegó demasiado tarde. El incendio ya había conwnzado, y bien rápidamente porque, porque, a laesperade lachispa que laencendiera, la pradera bangladesí hacía tiempo que se había había secado. El desprecio por la clase obrera El largo reinadode Hasina secaracterizó por el auge de una forma de capitalismo clientelista clientelista carente de cualquier aiode ración. El sector bancario estaba a merced de un puñado puñado de magnates industriales lo suficientemente suficientemente cercanos al gobierno como para considerar considerar que no tenían que devolver sus préstamos. préstamos. En caso de dificultades, las autoridades autoridades no dudaban, por ejemplo, en modificar las normas del Banco Central para facilitar la extorsión y la malversación.
Lejos de las bacanales de beneficios reservadas reservadas a las altas esferas de la sociedad, la Liga Awami había transformado el país en una fábrica fábrica que producía al mismo tiempo textiles baratos y trabajadores pobres.
En 2010, el gobierno gobierno aprobó una ley destinada a desarrollar unas cien “zonas económicas privadas” para respaldar las “zonas económicas especiales” (públicas) en su tarea de privar a los trabajadores trabajadores de secciones enteras de la normativa que regula el trabajo. En 2021, más de 500.000 trabajadores de la industria de la confección empleados en estas zonas no tenían derecho a aílliarse a un sindicato, También les estaba prohibido participaren negociaciones colectivas. colectivas.
Traseltrágicoincendiode RanaPlazaen 2 013(1). el país vivió val as huelgas enel sector textil, a las que el gobierno respondió con violencia violencia balas de goma para las multitudes; desapariciones desapariciones y asesinatos para los lideres sindicalistas. sindicalistas.
En 2022, la Confederación Sindical Internacional (CSI) situóa Bangladesh entre losdiezpaisesdondelasituación esmáscrítica para los trahajadores (2). Mientras que el 30% de la riqueza producidaesacaparada porel 5% de los hogares más acomodados (3), en agosto de 2022, miles de trabajadores del té la mano de obra peor remunerada del país iniciaron una huelga salvaje de tres semanas para exigir salarios dignos. El gobierno los obligó a aceptarun aceptarun aumento irrisorio: del equivalentea 1,20 dólares estadounidenses a 1,70, todavia por debajo debajo de la línea de pobreza de 2,15 dólares. El desprecio de Hasina por la clase obrera obrera se extendió más allá del ámbito nacional. Las trabajadoras migrantes, glorificadas como como “guerreras de las transferencias”, eran un producto de exportación esencial para Bangladesh. Sin embargo, el gohicrnoguardó gohicrnoguardó silencio, enel mejor de los casos, sobre los abusos que sufrían.
Cuando en 2019 se repatriaron repatriaron 119 cadáveres desde Arabia Saudita, el ministro de Asuntos Exteriores, Ahdul Momen (2019-2 024), señaló que el número de estas muertes era insignificante en coniparación coniparación con el número de mujeres bangladesíes bangladesíes que trabajaban en Arabia Saudita. En 2022,3.838 mujeres regresaron muertas del extranjero (4). Del imperio de las Indias a los Estados modernos JJf 1850-1947.
Imperio británico. : 2. 1 11947-1971 _j India Pakistán Birmania _, jcevlán ¡ Después 1971 b Bangladesh __ Sri Lanka A fines de junio de 2024, estudiantes bangladesies se manifestaron contra un sistema de contratación de funcionarios. En pocas semanas, el movimiento se hizo masivo y obligó a huir a la indomable primera ministra Sheikh Hasina.
Desde las protestas iniciales hasta el levantamiento popular, ¿qué pasó? ¿ Y qué esperanzas puede tener el pueblo de Bangladesh para el futuro?. El sangriento despertar de Bangladesh Esta situación ha resultado ser un terreno fértil pan los movimientos islamistas. Alimentadosporel islamistas. Alimentadosporel regreso deloshangladesíesquehalitan deloshangladesíesquehalitan luchado con los muyahidines afganos en los años ochenta por el oportunismo de los partidos islámicos tradicionales, diversos grupos grupos extremistas han atraído a trabajadores de las zonas rurales.
La afluenciade fondos de los paises de Medio Oriente y del Golfo, en particular particular de Arabia Saudita, ha permitido a estas organizaciones colmar las lagunas educativas y laborales dejadas porel Estado y reclutar masivamente masivamente en las madrasas.
El Estado bangladesi no podría haber deseado deseado un mejor adversario, ya que declaró su apoyo a una forma de islam “moderado” en el contexto de la “guerra contra el terrorismo”. terrorismo”. Cuando en 2t)13 la Liga Awami prohibió prohibió toda actividad política del partido moderado moderado Jamaat-e-lslami Bangladesh (JIB), sopló el viento de las velas de toda una serie de organizaciones mucho más radicales, cuya cuya represión puede orquestar libremente. En 2013, por ejemplo, el grupo Hefazat-e-lslam organizó Lina manifestación en el distrito financiero financiero de Daca para exigir una ley contra la blasfemia. ¡-[asma lanzó fuerzas policiales y paramilitares contra los manifestantes.
En una forma de obcecación cuyos efectos no habían previsto, la izquierda y los progresistas progresistas del país aplaudieron entonces el “coraje” “coraje” de las autoridades, sólo para pagar los vidrios rotos tinos años después, cuando se llevó acabo una represión similar contra toda toda persona que se mani festara públicamente en contra del gobierno.
Buenos vecinos En los últimos años se han multiplicado las desapariciones forzadas ylas ejecuciones extrajudiciales, extrajudiciales, En2022, elsitiowehNetraNews reveló la existencia del centro de detención secreto Avnaghor (“la habitación de los espejos”), espejos”), dirigido por los servicios de inteligencia military que había sidoohjetode rumores durante durante mucho tiempo (5). Durante las protestas por la seguridad vial de 2018, cuando los estudiantes estudiantes salieron a la calle para exigir rutas más seguras y mejores normas de transporte, el gobierno gobierno dejó inarehara las ftierzas de seguridad y a los dirigentes de la ECL.
Cuando el fotoperiodista fotoperiodista Shahidul Alam informó sobre estos acontecimientos, ftie encarceladodurante 107 días en virtud de la Ley de Seguridad Digital, con el pretexto de que habría fomentado complots complots “antinacionales” (6). Hasina aplicó esta política en nombrede la “liberación nacional”la misma por la que había había luchado su padreyde la queella se presentaha presentaha como garante. Oponerse a la Liga Awami significaba obrar con tra la emancipación deI país, incluso cuando el gobierno sometía a Bangladesh a los deseosde su vecino indio. India rodea completamente el territoriode Bangladesh, con la excepción de su apertura al océano Indico. Nueva Delhi es, por tanto, un interlocutor clave para Daca. Aunque India India siempre ha gozado de ventajas comerciales comerciales con su vecino tras su liberación, en los últimos últimos quince años estas se han transformado en privilegios que ilustran un vínculo de sumisión. sumisión.
Un ejemplo es la central eléctrica de carbón de Ranipal, cerca de los Sundarhans uno de los mayores manglares del mundo, que se extiende a ambos lados de la frontera, se construyó en 2Olócon inversiones indias y se alimenta de carbón indio importado, mientras mientras que Bangladesh, uno de los países más expuestos al calentamiento global, absorberá absorberá por si sola el impacto niedioamhiental.
En 2017, el gobierno de Hasina firmó un acuerdo con laempresa indiaAdani Power, propiedad de Gautam Adani, estrechamente vinculado al primer ministrode India, Narendra Modi, en virtud del cual Bangladesh tendrá que pagar pagar por unaelectricidad que no utilizará (7). Aunque el l3haratiya Janata Party (FU P) de Modi y la Liga Awami han trabajado codo a codo, la brecha entre ambas poblaciones se ha ensanchado. Se anima a los indios a ver a los ha ngladesíes como potenciales inmigrantes ilegales, pidiendo limosna constantemente a pesarde la pretendida benevolencia de India yel rol decisivo que desempeñó en la liberacióndesu liberacióndesu país. Losbangladesíes, porsu parte, denuncian la violencia contra los musLililianes musLililianes en India y los injustos acuerdos comerciales comerciales firmados entre ambos países.
En Daca no es raro oír rumores sobre la presencia de agentes de los servicios secretos indios en e! ejército y la policía, o sobre el hecho de que se haya nombrado a indios para altos cargos del gobierno. No hay pruebas de ellos, pero pocos pocos bangladesíes se sorprenderán al descubrir descubrir que todo es cieno.
El sentimiento anti in dio alcanzó su punto álgido en junio de 2024, cuandoel gobierno de l-Iasinaconcedióa India India el derecho de utilizar de manera gratuita el sistema ferroviario de Bangladesh para que sus trenes pudieran circular de Bengala Dcci dental aAssam (8). En Bangladesh ha surgido un movimiento de boicota India. A pesar de ello, Hasina confia en acallar a los manifestantes. A mediados de julio, tras cinco d ias de manifestaciones, se impu so un apagón de Internet y un toque de queda. Escuadrones Escuadrones de la muerte formados por líderes de la Liga, policias y otras fuerzas paramilitares paramilitares patrullaron las calles, Manifestantes, transeúntes y niños fueron asesinados, a veces veces en sus propias casas.
Se estima que murieron murieron al menos mil personas, basándose úni camente en el número de cuerpos que llegaron llegaron a los hospitales (9). A estas alturas, Hasina podría haber optado optado porrespondera lasnuevasreivindicaciones formuladas por los estudiantes a la cabeza del moviniiento, que incluían la exigunciadejusticiayde exigunciadejusticiayde quelas autoridades rindieran cuentas por los heridos y los muertos. Enlugarde ello, optó por redoblar la apuesta.
Mientras continuaban continuaban las protestas en todo el país, los líderes de la Liga Awami salieron a los medios de comunicación comunicación para afirmar que estaban siendo fomentadas por elementos “anti liberación”. Como resultado, las reivindicaciones de los manifestantes se unieron cii una sola: la salida de Hasina, una bandera que congregó a multitudes multitudes cada vez más numerosas dispuestas a desafiar los toques de queda yla represión.
Pocas Pocas horas antes de su huida, Hasina pidió repetidamente repetidamente a los militares que dispararan contra contra los manifestantes, a lo que el jefi del Estado Mayor, el general Zanian, se negó (10). ¿Quién gobernará ahora? En las horas y los días que siguieron a la “segunda “segunda independencia de Bangladesh”-como Bangladesh”-como llaman ahora los bangladesies a la huida de Hasina, la turbase hizo con el poder. La alegría y el alivio pronto se transformaron en rabia y cólera. Hubo informes de violencia comunaly comunaly robos (11). Pero la población se organizó organizó para proteger propiedades, templos e iglesias. iglesias.
Mientras una campaña de desinformación desinformación dirigida porla organización supremacista hindú Rashtriya Swayamsevak Sangh (RSS), en concierto con la Liga Awami, exageraba la violencia comunal contra los hindúes, niensajesdeWhatsapp niensajesdeWhatsapp yconversacionestelefónicas filtrados revelan que militantes de la Liga planificaron planificaron ataques contra templos hindúes para sembrar el caos (12). El gobierno provisional, presidido por Muhammad Muhammad Yunus, Premio Nobel de la Paz en 2006 y celebrado por los medios de comuni cación como el “banquero de los pobres” (13), prestó juramento el 8 de agosto. Yun os, cuya ideología neoliberal encanta a Occidente, goza goza de cierta credibilidad entre la población, en parte porsu reputación internacional, pero, sohretodo, pero, sohretodo, porel odio que le tiene Hasina.
Hasina consideraba queella debería haber recibido recibido el premio en su lugar, por haber firmado firmado los acuerdos de paz que, en 1996, pusieron fin a la guerra civil de varias décadas entre los adivasis y el gobierno de Bangladesh en los Chittagong Hill Tracts(en el sudeste del país). Por ello, gran parte de los bangladesies aplaudieron aplaudieron laelección de oua figura percibida comono perteneciente ni ala Ligani al principal partido de oposición, el conservador Partido Nacionalista(BNP). La elección de Yunus para formar gobierno gobierno no deja lugar a dudas sobre la orientación neoliberal de sus planes: antiguos generales, ministros y embajadores, todos ellos fervientes fervientes partidarios de una mayor privatización de los recursos e industrias nacionales. Pero el equipo también incluye a Adilur Rahman, activista de derechos humanos, y a Rizwana Rizwana Masan, ahogada especializada en justicia medioambiental. Por primera vez en la historia historia de Bangladesh, dos estudiantes del movimiento movimiento contra la discriminación han sido nombrados para ocupar cargos ministeriales. ministeriales.
Un tercero, Mahfuz Abdullah, descrito a menudo como el teórico del movimiento, ha sido nombrado asistente especial deI principal principal asesorde Yunus. l3idhan Ranjan Roy y Supradip Chakma, que representan respectivamente respectivamente a las minorias hindúes yadivasis, también han sido nombrados como asesores. Izquierda ausente Porel momento, el gobierno de Yunus no ha anunciado ninguna medida política importante, importante, ni ninguna agenda, aparte de un pedido pedido de extradición de Sheikh Hasina a India.
Pero el panorama político no deja de cambiar: cambiar: el Partido Nacionalista aprovecha el vacío vacío dejado por la caída de 1-lasini para ocupar ocupar el terreno, en particular asumiendo las actividades de tráfico gestionadas por la Liga Liga (aunque dé mucha importancia a ciertas purgas internas supuestamente destinadas a limpiar sus filas); se ha levantado la prohibición prohibición del grupo islamista JIB y su ala estudiantil, estudiantil, Chhatra Shihir, refuerza su presencia en los campus universitarios.
También ha estallado estallado la polémica entre los estudiantes: algunos algunos piden la retirada de los partidos políticos políticos de los campus (donde suelen gobernar) y otros promueven una forma de acción política política “apartidista”, cuya eficacia se desconoce, El Partido Nacionalista y el gobierno provisional provisional han presentado varias propuestas para para reescribiro modificar la Constitución, con el objetivo declarado de impedir cualquier vuelta al autoritarismo.
Si la “gran noche” no parece estaralavuelta estaralavuelta de la esquina, es porque sería un error interpretar interpretar que el levantamiento harigladesi extrae sus esperanzas de la “izquierda”. Los líderes estudiantiles provienen de diversos ámbitos, con una inclinación por la democracia liberal, incluso cuando acompaña al neoliberalismo.
Y lo que es más importante, los partidos progresistas progresistas tradicionales el Partido Comunista de Bangladesh (PCB), eliatiya Samajtantrik Dal (Partido Socialista Nacional) yel Partido de los Trabajadores brillaron por su ausencia en las protestas, entre otras cosas porque formaban parte de la coalición gobernantejuntocon la Liga. Estos pan idos y sus líderes rio brillaron por su denuncia de la corrupción y el autoritarismo autoritarismo de la primera ministra. En algunos casos, casos, incluso han reforzado estos fenómenos.
Cuando el ala estudiantil del PCB, el Bangladesh Bangladesh Youth Union, y otras organizaciones estudiantiles estudiantiles de izquierda, como la Bangladesh Student Federation, participaron en las protestas y se enfrentaron a la violencia estatal, los líderes progresistas no condenaron públicamente públicamente las atrocidades.
Esta actitud no es de extrañar dado el debilitado estado de sus formaciones, formaciones, sus bases tradicionales -los sindicatossindicatosestán corrompidas o repriniidas, v sus alas estudiantiles. que sufren la sombradel BCLen los campus, sededicaron ala lucha contra los islam istas en nombre del laicismo. Una lucha que la propia Hasina lideró, en virtud de las mices prtwesistas desu partido. Fuera de los partidos, las fuerzas de izquierda izquierda bangladesies se agrupan principalmente principalmente en torno al Comité Nacional para la Protección del Petróleo, el Gas, los Recursos Minerales, la Energía y los Puertos. Pero esta organización carece de líderes en el terreno capaces de construir una fuerza política.
La situación actual quizás le ofrezca un espacio espacio para desarrol larsu base aliándose con los trabajadores de la confección y del té, participando participando en la transformación de los sindicatos sindicatos (o, por lo menos, de aquellos que no han sido completamente cooptados por los principales principales partidos políticos). Todo ello supondrá, supondrá, al menos de momento, abandonare1 término término “socialismo”, asociado a Mujih y, por extensión, a Hasina.
Bangladesh es actualmente escenario de manifestaciones organizadas por diversos grupos de interés, y por diversos motivos: los cargadores de carretillaspousse-pousse privados privados de sus derechos, los médicos cuyos lugares lugares de trabajo fueron saqueados durante las recientes manifestaciones, la fuerza paraniilitarAnsar paraniilitarAnsar cuyos miembros son leales a la Liga, los policías que se han negado a volver al trabajo, trabajo, etc. Aunque estas manifestaciones han suscitadoel temora unacontrarrevoluciónoa la intervención de fuerzasreaccionarias, también también son signo de una nueva libertad en Bangladesh: Bangladesh: la libertad de expresarse. Con la excepción excepción de un breve momento en 1990 (cuandocayóel (cuandocayóel dictador Hussain Muhammad Erahad), Erahad), Bangladesh nunca había vivido algo así. El precio de esta libertad ha sido alto, pero el sangriento renacimiento de Bangladesh ha despejado un horizonte que llevaba mucho tiempobloqueado. Corresponde al pueblo de Bangladesh determinarel camino que seguirá de ahora en adelante. 1. OliviçrCyrsn, ”Au Bangladesh, les niçvniiçrsdu prt-áponer”, prt-áponer”, Le Monde diplomatiqve, juniode 2O13 z”rrucolobnl rnghisindei2o22”, inremstlona1Traclc UnionCoakderatioa. aodejuniode 2ti2Lhltp&J/wwwiluc3. Household Incorne and Expenditure suney. 1-1 lEs 2022. Bangladesh Burean orstatistics. Daca, 12 de abril de 2023,4,MigranI workersírom Bangladesh Toonianydieon foreignshores”, Dhaka flibune, 3odedictembrede2olç. scerecponnofflhaka”, Nerni News, i4deagostode 2a22.6, Md. sanaul islam Tipu. ”Caseagainst shahidul Alam: CID again asked to submit pmbe repon”, Li ha ka Tinca, 9 de febrero de 2023.7.”HowquestionableAdanideilmakeselectricitv ccstlicr. Tite BosinessSMndard. haca, 20 de agosto tic 2024.8.AliÁsifshawon, ”Goods, passengeraallowed under Bangladesh-India milwaydcal”, flhaka Tribuir, 2Sde juniode 2024.9, “More than 1.000 kil]ed in 1langiadeahiolence sinee. July, health lninisnyehiefsays”, ReutLrs, New Yurk, 29 de agostode 2024.1O “Exclusive Bangladesh armyrafrised tu suppress prorest, sealingl-iasinas fate”, Reurtrr, 7de agnainde 2024.11.
Rama Paul y Kiishna N. t)as, “Hindu bornes, temples trngeted LnllanghsdeshaftcrHasinaous*er. tninoritygruup sas”, Reuters, 6 de agosto de 2024; Jacqui Wakefleld, “The far-rightvideosdistoningthe truth o(nangladesh rninoritv attacks”. IB de agostode 2024. bbe. com u. rarhana sultana. BangiadeshsNewDemoenwy Under Threst Froni rlood otMisinforntaiioc, Tite Dfpkmat, 14 de agosto de 2024. thediploniat. con 13. Céduieoouverneur, “El negoeiodc la rniseria”. Le Monde diplomctique. abril de 2012. Autor e investigador bangladesí, editor de la revista. Jornhoor. Traductrón: Errulia FernndezTasende.