PORTADA EL DIARIO DE ATACAMA (DOMINGO) CHILE
PORTADA EL DIARIO DE ATACAMA (DOMINGO) CHILE, , wwwdianoatacamac1 te pares, no de la fuerza” El poeta y editorMatías Rivas publica Referencias personales un conjunto de lecturas y reflexiones acumuladas por más de 15 años que buscan ser un espacio de calma en el ajetreo cotidiano. Valeria Barahona Una Una mente despierta aunque sin lluvia, una piscina cuyo frescor sobrevive sobrevive a un incendio, reflejo de que un día hubo vida entre las ruinas grafica la cubierta de “Referencias personales.
Lectura Lectura y autobiografía”, del poeta poeta y editor Matías Rivas, conocido conocido por sus columnas que rayan rayan en el existencialismo y que ahora esboza ideas, por ejemplo ejemplo, acerca de Emily Dickinson: Dickinson: “Sus poemas son especies de dibujos mentales, en otras ocasiones están compuestos por una serie de afirmaciones que sugieren latigazos. El deseo deseo la sacude y deja temblando. temblando.
Su amante es el Dios del Antiguo Testamento”. O, en vista de la transversalidad transversalidad de la política contemporánea, contemporánea, “los dramas de clase están fundidos con las relaciones sentimentales”, sentimentales”, apunta el también responsable de Ediciones UIJP (Universidad Diego Portales), quien luego describe sujuventud sujuventud “en calzoncillos, con una enciclopedia entre las manos y un plato de pan con manjar al lado; corriendo en las dunas, escapando de los pacos; tirando tirando en un auto con los vidrios abajo en un garaje oscuro”. Rivas describe “Referencias.. “Referencias... “ como algo “sincero, no es un libro con cálculos para llegar a ninguna parte, es un libro libro que está hecho por el placer placer de escribirlo”, gracias a que “me dieron esta oportunidad en Planeta y la aproveché porque porque es un libro en que, de alguna alguna manera, no tuve que hablar de nada obligatorio, no estaba amarrado como a la poesía y esa tradición, tenía una libertad libertad para articular mi propio ensayo, ensayo, disfruté bastante haciéndolo”, haciéndolo”, agrega el autor de “Tragedias “Tragedias oportunas” y “Aniversario “Aniversario y otros poemas”. “Referencias personales” viene en la línea de “Interrupciones. “Interrupciones.
Diario de lecturas”? Sí, pero acá hay más fragmentos fragmentos de diarios de vida, creo que es más personal, aparecen elementos elementos de mi vida privada que (en “Interrupciones” son) mucho mucho más de costado, aquí es como como más directo, hay algo autobiográfico autobiográfico entre medio. El autor recuerda que “una vez tuve que tratar mi tiroides con yodo radioactivo. Me encerré encerré veinte días en una casa solo y ahí empecé a escribir un díario, pensando hacerlo sólo sobre sobre eso, en 2008, aunque ese diario me duró bastante, hasta 2014, lo tengo guardado. Después Después he escrito pequeños diarios. diarios. También mi trabajo me obliga a tomar apuntes, para eso tengo distintas fórmulas, un diario, mafis que me mando a mí mismo con una anotación, anotación, voy juntando esas cosas. Tengo unos archivos también.
De repente cuajó todo eso que está hecho porque sí no más, como un lugar donde vas poniendo poniendo cuestiones que eventualmente eventualmente podrían servir para hacer algo y al final lo ocupé, en este caso para dar vuelta algunos algunos fragmentos, además que también escribí como un 25% para (darle continuidad a) el libro, para que aparecieran ciertas cosas necesarias”. Algo que recuerda a la descripción descripción que hace Rivas deClarice deClarice Lispector (“La pasión según G. H:), quien “cultivó la originalidad originalidad sin esfuerzo. La falta de apego ala norma, el desacato, es esencial en su escritura. Desobedece Desobedece sin pudor. Sus temas reiterados reiterados son la naturaleza fragmentaria fragmentaria del tiempo, el yo insatisfecho. insatisfecho.
Sus ficciones y crónicas incursionan incursionan en el misterio”. Para llegar a esta construcción construcción de retazos, agrega el escritor, escritor, “hay libros de este tipo que cito, como La tumba sin sosiego, de Cyril Connolly, que también son fragmentos; las Prosas apátridas, de Julio Ramón Ribeyro; Escritorio, de Martín Cerda, son modelos de libros fragmentarios que me sirvieron, son muy distintos, distintos, por cierto, pero que tienen tienen esta estructura de ir poniendo poniendo cosas que aparentemente aparentemente no están demasiado ligadas ligadas y que, claro, cuando uno las lee se empiezan a unir, unir, la estructura interna”. En una parte dices que en tu adolescencia jugabas con el diccionario diccionario “Pequeño Larousse” y es curioso cómo casi todas las personas ligadas a las letras tienen tienen ese recuerdo. Uno lo leía, está lleno de imágenes, imágenes, entonces era una una entretención, una fascinación y que te hacía saber cosas que no tenías para qué, de alguna manera, darte cuenta.
O sea, lo leías para buscar una palabra y también (antes) había muchas horas muertas, en el sentido de que no era un mundo conectado, conectado, entonces la posibilidad de agarrar un libro para entretenerse entretenerse era grande.
Qué dispositivo ahora, aparte del celular, podría reemplazarlo? La calle, un lugar donde estaba estaba la gente (ríe). El barrio era mucho más transversal en Chile Chile y también estaban las enciclopedias, enciclopedias, las bibliotecas de distintas zonas de Santiago que uno sabía que eran buenas porque había gente que donaba donaba libros, no necesariamente porque se habían comprado. Que iban quedando de una generación a otra? Claro.
Hay bibliotecas que la gente dona, hay un conocimiento conocimiento que se va transmitiendo transmitiendo de una generación a otra, así como amigos que te enseñan enseñan cosas o dónde buscar: eso se aprende con una edad, a los 15,16 años, y después con amigos más viejos, escritores escritores que empiezas a conocer, conocer, Germán Marín (“Un oscuro oscuro pedazo de vida”) en mi caso, caso, que te enseñan a buscar información en otros lugares, otra especie de libros, eso es muy alucinante. Esas bibliotecas ahora se encuentran encuentran en Mercado Libre, parece parece que las nuevas generaciones generaciones se dedican a venderlas.
Los libros no han logrado convertirse, convertirse, como era hace unos años, en objetos que daban a las casas una sensación de orgullo, orgullo, de gente que trataba de ser más culta en la vida, todo eso se ha ido perdiendo.
Los libros libros estaban en la sala, en el comedor, comedor, vendían muebles amedida amedida para eso, chiquititos, más grandes, porque la gente en el fondo consideraba que le compraba compraba algo a su familia, con revistas revistas también, a veces libros baratos, usados, pero eso significaba significaba capital cultural. Yesapalabra Yesapalabra desapareció, parece.
En este día a día también señalas señalas que “el trabajo creativo, el análisis o la conversación” son formas de combatir el miedo, miedo, la incertidumbre: ¿ por qué no se llega ahí? (Porque) frente a eso hay que resistir. Resistir es un verbo que lleva consigo el dolor.
Sí, pero a veces también la estrategia, estrategia, el lugar donde uno se para también es importante para para resistir, como cuando una puerta te la quieren echar abajo: abajo: depende de dónde te pares, no de la fuerza que hagas, es que no la van a romper.
Hay que tener una habffidad que se va desarrollando en la vida, una experiencia para saber resistir cuestiones que son incómodas, y la vida está lleno de eso, entonces entonces más que tirarse contra ellas en algunas ocasiones hay que ubicarse en un lugar que te permita terciar, pasar por debajoo debajoo definitivamente enfrentarla enfrentarla de una manera mucho más nítida eso es algo que, no sé, que se va desarrollando.
Formas Formas de resistencia personal. (3 “Resistir depende de dónde Litlas Riva “Referencias personales” Matías Rivas Seix Barral 148 páginas $17 mil 1 EL POETA Y EDITOR MATÍAS RIVAS TAMBIÉN ES AUTOR DE LOS LIBROS “ANIVERSARIO Y OTROS POEMAS” Y “TRAGEDIAS OPORTUNAS”..