Autor: CATALINA MUÑOZ-KAPPES
Despedido y reinstalado: La trama y los efectos del caso de Sam Altman en Open Al
CEO estuvo cuatro días fuera de la firma creadora de Chat GPT MICROSOFT La firma tiene 49% de participación de Open Al y se espera que juegue un rol importante. Fundada en 2015, Open Al se ha convertido en una de las empresas más reconocibles de la revolución de la inteligencia artificial. Son los creadores del chatbot Chat GPT, cuya versión más avanzada cuesta US$ 20 al mes. Por solo cuatro días se mantuvo la decisión de Open Al, la empresa creadora de Chat GPT, de desvincular al gerente general Sam Altman. El viernes pasado, la firma anunció que Altman, quien se ha convertido en la cara más reconocible de la revolución de la inteligencia artificial, ya no continuaría en su cargo. Altman ayudó a fundar Open Al, en 2015, y se desempeñaba como CEO desde 2019.
Como motivo del despido, el directorio indicó que el ejecutivo no habría sido “consistentemente sincero en sus comunicaciones con la junta, lo que obstaculizó su capacidad para ejercer sus responsabilidades”. Además, afirmaron que el directorio ya no confiaba “en su capacidad para seguir liderando Open Al”. Reacción interna La decisión causó un revuelo inmediato al interior de Open AL. Solo horas tras el anuncio, el presidente de la compañía, Greg Brockman, renunció a su puesto.
Además, el mismo viernes indicó a través de X (antes Twitter), que “estamos sorprendidos y entristecidos de lo que hizo el directorio hoy”. Según relata The New York Times, Brockman no participó de la reunión en la que se decidió despedir a Altman. Sin embargo, los verdaderos problemas comenzaron el lunes, cuando 700 de los 770 empleados firmaron una carta en la que amenazaban con irse de Open Al si Altman no era reinstalado. Incluso firmó uno de los directores que había votado para despedir al CEO, según The New York Times. El martes en la noche, Operevirtió la decisión.
A través de X, comunicaron que, “en principio, hemos llegado a un acuerdo para que Sam Altman regrese a Open Al como CEO con un nuevo directorio inicial... Estamos colaborando para resolver los detalles”. La relación con Microsoft El lunes, previo a la reincorporación de Altman a Open Al, el CEO de Microsoft, Satya Nadella, anunció a través de X que “Sam Altman y Greg Brockman, junto con sus colegas, se unirán a Microsoft para liderar un nuevo equipo de investigación avanzada de IA”. La relación entre Microsoft y Open Al comenzó en 2016. Desde entonces, según reporta The Economist, la firma ligada a Bill Gates ha invertido US$ 13 mil millones, por lo que sería un 49% de participación. Como parte del trato, la tecnología de Open Al debe ejecutarse en Azure, perteneciente a Microsoft. A cambio, tiene acceso a la gran capacidad de procesamiento de Microsoft, necesario para entrenar sus modelos de IA.
Tras ser reincorporado en su cargo de CEO, Altman dijo en X que “cuando decidí unirme a Microsoft el domingo por la tarde, estaba claro que ese era el mejor camino para mí y el equipo.
Con el nuevo directorio y el apoyo de Satya (Nadella), espero volver a Open Al y construir sobre la base de nuestra sólida asociación con Microsoft”. 0 Con la reincorporación de Altman, se renovó a los directores que tenían un perfil académico por un grupo con el foco puesto en el negocio de la tecnología. como respuesta a la publicación de Altman, Nadella escribió que “nos alientan los cambios en el directorio de Open Al.
Creemos que este es un primer paso esencial en el camino hacia una gobernanza más estable, mejor informada y eficaz”. Según The New York Times, se espera que Microsoft tenga una mayor participación en el futuro, lo que podría incluir un puesto en el directorio. ¿ Nueva dirección? De los cuatro directores originales, tres fueron removidos de sus puestos. El único que se mantiene es Adam D'Angelo, quien también es director ejecutivo de Quora. Por otro lado, se incorporan al directorio Lawrence Summers, exsecretario del Tesoro, y Bret Taylor, uno de los primeros funcionarios de Facebook y ex codirector ejecutivo de Salesforce, quien también presidirá el directorio. Los directores que dejan Open Al son Helen Toner, investigadora en la Universidad de Georgetown; Tasha McCauley, científica en Rand Corporation, e Ilya Sutskever, investigador de IA y redes neuronales. El cambio en el perfil de los directores ha sido tema de interés en la prensa en EE.UU.
CNBC escribió que mientras el directorio anterior “incluía académicos e investigadores”, los nuevos directores “tienen amplia experiencia en negocios y tecnología”. Según comenta a “El Mercurio” David Beatty, académico en la Universidad de Toronto, la estructura del directorio era inusual, ya que el órgano estaba orientado hacia un propósito sin ánimo de lucro, mientras que la empresa sí tiene fines de lucro. Beatty afirma que el propósito corporativo “estaba dividido entre el lado con fines de lucro y sin fines de lucro. Por un momento, diría que el lado de sin fines de lucro destituyó al CEO. Eso se dio vuelta y ahora el directorio es con fines de lucro”. Cuando se fundó Open Al, en 2015, se hizo como una organización sin fines de lucro. Para Marcos Singer, director del MBA UC, el gobierno corporativo de una empresa es determinante de su estrategia, táctica y espíritu. “Si hay un cambio tan radical de quienes están a cargo de la empresa, la empresa va a cambiar muchísimo”, afirma.
Añade que “seguramente un nuevo directorio tendrá una visión muy distinta y borrará con el codo lo que se ha escrito previamente, sea bueno o malo”. Pese a estos cambios, Beatty no ve un impacto en el negocio de la compañía, ya que la alteración se hizo muy rápidamente.