Las dudas e incertidumbre tras el fallido levantamiento militar contra Arce en Bolivia
Las dudas e incertidumbre tras el fallido levantamiento militar contra Arce en Bolivia LA POLICÍA reforzó el acceso al Palacio Quemado, un día después que una tanqueta se estrellara contra su puerta.
FRANCE PRESSE Y a ha vuelto la calma a La Paz, tras las horas de zozobra por la incursión de un grupo de militares encabezados por el destituido general Juan José Zúñiga que tomó el miércoles la céntrica Plaza Murillo e irrumpió en el palacio presidencial, en lo que el gobierno de Luis Arce describió como un "intento de golpe de Estado". Pero el caso está lejos de darse por cerrado: mientras ayer se anunciaron nuevas detenciones y se entregaron detalles sobre el presunto plan de los sublevados para tomar el poder, sectores de la oposición han planteado dudas sobre la veracidad del incidente y han acusado que se trató de un "show político" e incluso un "autogolpe" impulsado por el propio mandatario para reforzar su liderazgo en medio de la dura crisis económica que vive Bolivia. "Este grupo criminal planificó el golpe desde mayo", aseguró ayer el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, al anunciar que fueron detenidos 17 militares y civiles por el alzamiento, entre ellos, al general Juan José Zúñiga y el vicealmirante Juan Arnez, excomandantes del Ejército y la Armada, respectivamente, señalados como líderes del plan. Entre los detenidos, el ministro apuntó que un civil, identificado como Aníbal Aguilar Gómez, sería el presunto "ideólogo" de la movilización militar que dejó 12 heridos. Los principales implicados serían acusados de delitos de terrorismo y alzamiento armado contra el Estado, con lo que arriesgan penas de entre 15 y 30 años de cárcel.
Según la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, durante la entrevista policial que se le hizo a Zúñiga tras ser detenido el miércoles por la noche, él admitió que por motivos logísticos no se logró consumar el golpe. "Las unidades de Viacha tardaron en llegar, también el personal de la Armada y de la Fuerza Aérea no pudieron llegar", habría dicho.
Prada negó las acusaciones de la oposición de que la insubordinación militar fue un autogolpe e insistió en que se trató de un golsospechar respecto a que haya sido un intento de golpe de Estado, tal como lo presentó el gobierno, las dos posibles explicaciones que se presentan son igualmente caricaturescas y deplorables", comentó el columnista político Róger Cortez. "La primera sería un general que pierde su puesto y arriesga todo por tratar de recuperarlo; entonces darle a eso el nombre de `golpe de Estado' o `intentona militar' resulta excesivo, bastante ridículo, porque más allá del contingente que se movilizó --de unas decenas-y algunos carros pomposamente llamados blindados, no hay ninguna otra señal de que Zúñiga haya tenido más representatividad que la suya", señaló. "La segunda posibilidad es la que desarrolla el propio Zúñiga en una conversación con el Presidente. En beneficio de esa posibilidad, hay antecedentes que van más allá de la palabra de Zúñiga de que este general era un protegido de Arce (....) Pero no sé si llamarlo autogolpe, realmente no. En el mejor de los casos, sería un intento de un sainete político". A Cortez le llaman la atención algunos hechos inusuales: "Todo el gabinete está reunido, lo que no es tan frecuente. Y luego el Presidente increpa al general; cuando el enfrentó una situación que podía ser riesgosa en 2019, salió de picada tanto o más rápido que Morales a refugiarse a una embajada. Ahora él desciende de las escaleras y llega a la puerta principal para interpelar bravamente al general. Es como escenificado. Hay motivos para ser suspicaz". "Hay mucho misterio, pero considero que todo fue un globo de ensayo, una pulsación por parte de algunos actores internos de las FF.AA. y actores políticos.
El objetivo no era hacer un golpe de Estado, sino medir fuerzas y las reacciones en la sociedad civil para más adelante", señaló el analista político Juan Pablo Marca. "La hipótesis del autogolpe es muy simplista. Se ve como una pantomima, algo muy mal hecho.
Pero esa hipótesis, la del autogolpe, es muy útil para la oposición política al gobierno de Arce, para Morales, `Tuto', Mesa, Camacho, entre otros", agregó. el discurso de la oposición se ha ido tornando más crítico.
Luego de inicialmente "repudiar esta acción militar que pretende vulnerar la democracia", el expresidente Carlos Mesa, líder de Comunidad Ciudadana (CC), cambió su tono: "Terminado este amago que se parece a un sainete, escuchamos al `golpista' acusar al Presidente Arce, el discurso presidencial como un acto de campaña... los gobiernos del MAS han destruido la institucionalidad de las FF.AA., la credibilidad de lo que se dice y se hace", señaló.
El también exmandatario Jorge Quiroga, por su parte, calificó la sublevación de una "opereta" que evidencia "el grado de descomposición institucional después de 18 años de gobierno del MAS". "Un espectáculo" En la facción del MAS que obedece a Evo Morales fueron más suspicaces. "¿Cómo fortalecer a un Presidente en crisis económica? ¡ Desviando el foco y convirtiéndolo en mártir! ¿Cómo? Con un autogolpe logrando movilizar al pueblo para `defender y restaurar la democracia'", dijo el político "evista" César Dockweiler.
La diputada Luisa Nayar (CC) sostuvo que "los bolivianos vivimos un increíble show político, armado por los irresponsables, incapaces y corruptos que están de inquilinos en la mal llamada Casa Grande del Pueblo" y que "utilizaron a un general insano para `tomar' con tanquetas la Plaza Murillo". "El propio Presidente, en un acto de `coraje', increpó, en las propias puertas de palacio, al supuesto golpista, que no atinó a nada, a pesar de estar fuertemente resguardado por soldados", dijo.
Desde la cárcel, el gobernador electo de Santa Cruz, el opositor Luis Fernando Camacho, exigió explicaciones. "¿Fue un espectáculo mediático montado por el propio gobierno, tal y como dice el general Zúñiga? ¿ Fue solo una locura de algunos militares? ¿ Fue simplemente una muestra más de descontrol? ¿ Qué fue lo que pasó ayer? Explique y dé la cara, Presidente", dijo en sus redes sociales. "Si es que hay motivos para neralizado en el país.
Luego, los críticos apuntan a la teatralidad de la irrupción de Zúñiga en el Palacio Quemado: tras tumbar violentamente la puerta con una tanqueta, fue encarado rápidamente en el pasillo por Arce. "Yo soy su capitán y le ordeno que repliegue a sus soldados", le dijo el Presidente, y el general se retiró como si no hubiese pasado nada.
Por esta y otras inconsistencias, te me dijo que la situación está muy jodida, que esta semana sería crítica y es necesario algo para levantar mi popularidad", relató durante su captura. "Yo le pregunté: `¿ sacamos los blindados?'. Y él respondió `sacá'", agregó. Pero también hay otras preguntas en el aire. Primero, se trató de un grupo muy reducido de militares que se sublevaron en La Paz, y no fue un movimiento gepe fallido. Más tarde el Presidente Luis Arce hizo lo mismo. "¿Cómo podía ser una instrucción o una planificación de un autogolpe? (... ) Él actuó por cuenta propia", dijo el mandatario a la prensa.
Las suspicacias se han alimentado por unas breves declaraciones de Zúñiga a periodistas luego de su detención, en las que el general señaló que todo había sido acordado con Arce. "El PresidenHasta el momento han sido detenidas 17 personas por el presunto intento de golpe de Estado: Las dudas e incertidumbre tras el fallido levantamiento militar contra Arce en Bolivia JEAN PALOU EGOAGUIRRE Sectores de la oposición acusan que fue un "show político", un "globo de ensayo" e incluso un "autogolpe" del propio Presidente. EL DESTITUIDO comandante en jefe del Ejército, Juan José Zúñiga, fue exhibido a la prensa tras su arresto. ASSOCIATED PRESS.