Tebogo y el coronavirus rompen a Lyles en su prueba predilecta
Tebogo y el coronavirus rompen a Lyles en su prueba predilecta N i sus compañeros de equipo lo sabían.
Noah Lyles, el excéntrico velocista que agiganta su dimensión mediática en París 2024, tras abandonar en silla de ruedas la pista violeta del Stade de France, admitió a la BBC que había sido diagnosticado con covid-19. Habló con una mascarilla negra en su rostro. "Iba a competir de todos modos. Para ser honesto, estoy más orgulloso de mí mismo que de cualquier otra cosa: haber salido y obtener una medalla de bronce con covid", soltó el velocista, que repitió el bronce de Tokio 2020. La desprolijidad de Lyles, que corrió en la pista 5 entre su compatriota Erriyon Knighton y el dominicano Alexander Ogando, deja en entredicho los protocolos sanitarios del torneo. Una vez diagnosticado, el atleta fue puesto en cuarentena fuera de la Villa Olímpica.
El Comité Olímpico y la Federación Atlética de EE.UU. emanaron un comunicado donde advierten que activaron todos los "protocolos necesarios para priorizar su salud y la seguridad de sus competidores", y que la decisión de correr fue de Lyles.
El estadounidense se desplomó después de cruzar la meta, ahogado y derrotado. "Me quedé sin aliento, me dolía el pecho", confesó, tras ser atendido por paramédicos. "El covid, te merma tu capacidad aeróbica, de fuerza, más si va acompañado de dolor muscular y fiebre. Y en una prueba de velocidad un cuarto de segundo cuenta, por eso es un mérito que Lyles haya salido tercero", dice César Kalazich, médico deportólogo de Meds. La Organización Mundial de la Salud en 40 los deportistas contagiados de coronavirus durante París 2024, mientras el COI ha pedido que las autoridades sanitarias de Francia den cuentas por aquello.
En tanto, Letsile Tebogo, un sprint nacido hace 21 años en Botsuana y que se transformó en el primer africano en ganar esta prueba, con el quinto mejor registro personal de toda la historia (19.46 ). Un atleta que hasta los 13 años jugó al fútbol y que se desató en Saint-Denis motivado por la pérdida de su madre en mayo. "Ella me mira desde arriba y está feliz, muy feliz", dijo el vencedor.
Kenneth Bednarek se quedó con la plata (19.62 ). "Lo mejor de Tebogo fueron sus últimos 100 metros, la posición del tronco derecha, sin inclinarse, braceo amplio, el talón al glúteo y luego lo sacaba adelante, todo perfecto, me hizo recordar a Bolt. De los batatazos grandes de los Juegos, tiene una proyección salvaje. Lyles no debió estar en la pista, comprometió la salud del resto", dice Alberto Labra, reputado entrenador de velocidad.
En el resto de la jornada lo más sobresaliente fue el nuevo récord del mundo que imp u s o l a e s t a d o u n i d e n s e Sydney McLaughlin en 400m metros vallas: 50.37, relegando al bronce a la neerlandesa Femke Bol. En los 110m vallas celebró Grant Holloway, también de EE.UU., con 12.99.
EL ESTADOUNIDENSE NO PERDÍA DESDE TOKIO 2020 EN LOS 200 METROS: Tebogo y el coronavirus rompen a Lyles en su prueba predilecta El oro de los 100m corrió con covid-19 y se desplomó tras llegar tercero en el doble hectómetro, dejando en evidencia la desprolijidad sanitaria del evento. El botsuano hace historia. EFE Más detalles en www.elmercurio.com/deportes Lyles no pudo emular a Usain Bolt con el oro en 100 y 200 metros planos. Nunca un africano había corrido tan veloz los 200 metros. Tebogo le ganó a Lyles en semis y en la final.. - - - - -