Autor: Francisco Morales-Peña*
Las ciudades después de la pandemia
L actual escenario en el cual se encuentra la humanidad respecto a la evolución del virus Covid-19 ha provocado un sinnúmero de cambios conductuales en los habitantes del todo el mundo. A la fecha han fallecido más de 776.000 personas y se han confirmado más de 21,7 millones de personas contagiadas. El gran dilema que se presenta es cómo evitar que se propague dicho virus. Al respecto, todos los países han tomado distintas medidas, desde cuarentenas globales anivel de país a cuarentenas focalizadas en determinados territorios. Los resultados han sido disimiles, lo que implica que no hay una única solución al respecto. Tal vez, la única certeza es que una vez que haya pasado esta pandemia mundial, los hábitos y costumbres de un alto porcentaje de la población del mundo cambiarán. Ello afectará, en particular, alas ciudades. Se estima que un 55% de la población del mundo habita ciudades, comprometiendo, directa o indirectamente, a más de 4.500 millones de habitantes. Por lo tanto, la dura experiencia del Covid-19 nos enfrenta al desafío de repensar el diseño de las ciudades, de modo de adoptar decisiones que se habían postergado por diversas circunstancias.
Uno de los mayores impactos en términos urbanos ha sido la restricción de la movilidad de las personas, limitando su acceso a sus fuentes laborales, centros de estudio y abastecimiento u otros, debido a que uno de los factores que provocan un mayor aumento de los contagiados por el Covid-19 son las aglomeraciones. Lo anterior una masificación del teletrabajo y telestudio. En países como Israel y España ya hay empresas que han incorporado cambios en su jornada laboral, con 4 días de trabajo presencial y 10 días de teletrabajo.
Algo similar ha propuesto la Primera Ministra de Nueva Zelandia, con un énfasis en reactivar la economía local, permitiendo que los ciudadanos tengan de esta manera tiempo para recorrer su país y por ende reactivar su economía.
A su vez, en Gran Bretaña se ha propuesto dividir las semanas en turnos laborales de tres días, con grupos A (lunes a miércoles) y grupos B (de jueves a sábado), lo que ya se ha aplicado en algunos sectores económicos de Corea del Sur. Respecto a la educación, Ausen sus colegios clases de 5 días cada dos semanas. En los países desarrollados, se está replanteando el rediseño de las oficinas, dejando un mayor espacio entre los trabajadores, los pasillos y escaleras tendrán un solo sentido y cada su lugar de almuerzo.
Se están ampliando las salas de conferencia, no con el fin que asista más gente, sino que pueda existirun mayor distanciamiento entre los asistentes a la par de una mayor demanda de pantallas de video con el fin de masificar las teleconferencias versus las reuniones presenciales masivas. También, hay cambios de conductas como la reducción del número de personas que pueden subir en un ascensor. En Chile, la incertidumbre de cómo evolucionará la pandemia ya está produciendo un impacto en la actividad laboral. Un reciente estudio (2) señala que un número significativo deempresas están evaluando continuar con la Entrega de beneficios como movilización, vestuario, alimentación y estacionamientos a sus trabajadores.
Además, investigaciones señalan que un 64% (3) de las empresas no ha visto afectado su funcionamiento porel teletrabajo, señalando que se requiere dotar a sus trabajadores de un buen computador y una buena conexión de internet.
Una encuesta reciente a trabajadores de empresas grandes, medianas y pequeñas y fundaciones señaló que un 48% de quienes teletrabajan lo hacen desde el living y sólo un 20% dispone de un escritorio para trabajar desde su casa.
Lo que implica, que a muy pocas las personas les es posible cumplir con sus funciones laborales en un contexto de comodidad o libre de ruidos (4). Sin embargo, la mayor preocupación está en la habitabilidad de los habitantes de las ciudades, la realidad en el país es que un alto porcentaje de la población presenta elevados niveles de hacinamiento en sus viviendas. Un 50% de las viviendas en Chile tiene menos de 45 m2, cerca de 3,6 millones de viviendas (5), de ellas, casi 640 mil no sobrepasan los 20 m2. El 56% de las viviendas de Santiago son de 70 m?o menos (6). El censo del 2017 indicó que un 7,3% de las viviendas presentan hacinamiento en casas antiguas, departamentos o conventillos. En particular, en la Región Metropolitana comunas como Santiago, Estación Central, Maipú, La Florida y Puente Alto presentan altos niveles de hacinamiento.
La situación, es preocupante, ya que siuna familia se logra acomodar en 45 m2, ¿Qué pasasi un integrante debe hacer cuarentena?, es casi imposible que se disponga con las condiciones mínimas exigidas para cumplirla (una habitación individual; baño propio; ventana). Por otra parte, el uso del transporte público ha disminuido en un 65 % en la Región Metropolitana.
Sin embargo, en las comunas de El Bosque, Puente Alto y Quinta Normal, la 325.000 330,090 339.000 340.000 345.000 350.900 355,090 360.000 365 900 e AAA A E A ss j 4 as? e BERNARDO w e E OHIGGINS : Ciudades Post Covid-19 Ubicación Centros de 5 Trabajo Intercomunal si ondaa | - MACROCOMUNA Ignacio Mesina Caro | ORIENTE | | 2 | | | CEN 3 ma” E 87] | 1 1 MACROCOMUNA PONIENTE | | pa : pl | | Simbología 3 My Centro de Trabajo Intercomuna! (CTI) 24 $ par + E Y o Límite comunal MACROCOMUNA SU! Er Macrocomunas de la Región Metropolitana 8| % Pob. En Macracomuna Macrocomuna | Centro 1.073.791 Norte 840.668 | | o 817,742 13% 5] Poniente 1.511.080 | 25% | Sur | 1.860.571 30% | Pi AAA A 220000 330.090 338/00 240/000 3401000 3661000 de habitantes.
Censo 2017 Movilidad en período de cuarentena bajó sólo entre un 15% y un 25% (7). Lo señalado nos lleva a plantear un conjunto de propuestas que, buscando aminorar el impacto de la pandemia, nos permitan pensar y construir una ciudad acorde alos nuevos requerimientos y, por ende, propicia a una mejor calidad de vida.
La primera propuesta es la creación de Centros de Teletrabajos Intercomunales (CTD, donde los habitantes de un grupo de comunas puedan acceder a trabajar y/o estudiar de manera remota en un lugar de fácil acceso y con un funcionamiento 24/7. Los CTI permitirían disminuir de manera sustancial, en extensión y duración, los viajes al trabajo o lugar de estudio. Y evitarían la angustia por no disponer de un lugar adecuado para desarrollar su actividad profesional o académica. El financiamiento de los Centros debería resultar de una asociación Público-Privada, con la participación de la Subsecretaría de Desarrollo Regional, con el Fondo Común Municipal, el sector privado y organizaciones vecinales y comunitarias representativas. La segunda propuesta se orienta al establecimiento de horarios diferenciados de ingreso alos trabajos y estudios. De esta forma se lograría disminuir las altas congestiones en las ciudades en los horarios punta. En el ámbito laboral, se puede establecer un horario “obligatorio” en el cual todos los trabajadores deben estar presentes en el trabajo, por ejemplo de 11:00 a 16:00 hrs.
Sin embargo, el horario de ingreso y de salida debiera resultar de un diálogo al interior de las empresas y organizaciones públicas, en el marco general definido porla autoridad, obviamente asegurándose el cumplimiento de la totalidad de las horas de trabajo consignadas en los contratos laborales. Respecto a los estudios escolares y universitarios, se propone establecer horarios difeRenciados de ingreso. Por ejemplo, la educación básica podría iniciar sus actividades a las 08:00 a.m., y la educación media a las 10:00 a.m. En el ámbito universitario, cada Universidad podría establecer bloques de clases “On line” en las mañanas y presenciales en las tardeso viceversa. En relación con el comercio de malls y supermercados, se propone una reducción de sus horarios totales, permitiendo que cada rubro pueda definir y diferenciar sus horarios. Por ejemplo, los bancos en las mañanas, los malls y supermercados en las tardes.
En tercer lugar, se debe avanzar hacia una “movilidad sustentable”, con el fin de dismilas aglomeraciones como la extensión y duración de los viajes al interior de las ciudades, propiciando desplazamientos a los subcentroso pluricentros de las ciudades. Lo cual se debe traducir en la ampliación de las líneas de metro, mejorar la frecuencia y regularidad de Red Bus, implementar la tarificación vial y fomentar el uso de bicicletas y scooters. Mi 1.
Las Facultades de Ingeniería de la Universidad de Santiago de Chile y de la Universidad Bernardo O Higgins se encuentran desarrollando un estudio sobre los “Efectos del Covid 19 en las ciudades o Ciudades Post Covid 19”. En participan Ignacio Mesina C. Magister Medio Ambiente Mención: Gestión y Planificación Ambiental del Territorio (USACH) y Cristián Robles. Ingeniero Civil Industrial (E). UBO. Esta columna de opinión corresponde a un resumen del primer informe de la investigación. 2. EY Chile. 3. Empresa Page Group. 4. Brica; Krino; Social Lab Agency. 5. Geo Advisors. 6. La Tercera. 7. Universidad de Chile. “Académico Facultad de Ingeniería Universidad de Santiago de Chile/Universidad Bernardo O Higgins.